Te reto.

1 de noviembre.

El martes había llegado. Iban a iniciar su pequeño juego, había puesto al tanto a sus amigos para que no fueran tan crueles de hablar de las series o juegos frente a él, ellos no estaban de acuerdo y decían que era una estupidez pero él quería mantener su dignidad intacta, además necesitaba un respiro. Terminó de atar sus zapatos y bajó a hacerse su desayuno.

Por otro lado estaba Megan terminando de peinarse y respiró hondo viendo las noticias de los famosos, apagó la televisión y vio por la ventana a ver si James ya había salido.

Lo más fácil para ella sería no ver las noticias de los famosos, pero no podía dejar de leer, se aburriría demasiado encerrada en su casa; ¿En qué se había metido?

Bajó a la cocina a comer su desayuno cuando escuchó una corneta muy conocida ya. Se apresuró a tomar su jugo, agarrar su mochila y salir de la casa. El auto de James estacionado frente a su casa con las ventanillas abajo mientras escuchaba Company de Justin Bieber, era gracioso verlo cantar y bailar dentro de su auto.

Megan se acercó y se subió en el auto, bajándole el volumen a la música. James volteo enojado.

—¿Qué te pasa? Déjame cantar tranquilo —dijo subiéndole nuevamente a la música—Pensé que te gustaba Justin —dijo alzando las cejas burlón y Megan se cruzó de brazos—¿No dirás nada de él? —sonrió burlón.

—No, no diré nada al respecto —dijo Megan— ¿Pero no te importaría hablar de la muerte de... En grey's anatomy? 

— ¡Ni se te ocurra que te...! —antes de decir algo James se controlo— Ya estamos llegando al colegio —Dijo sonriendo tranquilamente.

— ¿Algún problema, querido? —sonrió Megan maliciosamente, él la vio alzando la ceja y bufó.

—Estoy perfectamente, no sé qué piensas —dijo James sin verla.

—Mírame, quiero ver tu cara cuando lo digas —dijo burlona Megan inclinándose a él.

— ¿Quieres chocar? No sabía que te ibas a suicidar a la hora de iniciar — dijo James burlón y Megan le hizo un gesto grosero con la mano.

—Jópete.

— ¿De qué libro sacaste ese jódete? —sonrió James.

—Pues del teor... no importa, ¿sabes? averígualo tú —Dijo Megan, molesta de casi caer en algo tan estúpido como eso. 

James rió y estacionó el auto, de donde se bajó Megan hecha furia. El muchacho sonrió más y se bajó del auto, le puso seguro y se acercó a sus amigos. El grupo de chicos se voltearon a saludarlo y empezó el verdadero reto.

 —No sabes, James, ayer salieron las fechas para la película de Star Wars, estará genial, planeamos ir el fin de semana siguiente de cuando la estrenen, ¿Qué dices? —Sonrió Gus, el rubio que más odiaba en ese momento.

 —Me encantaría, pero tengo un reto y lo preferible es no hablar de eso, cuéntenme ¿vieron el partido de ayer por la noche? —dijo James tranquilamente y sus amigos intercambiaron miradas; seguro pensaban que ya estaba vuelto loco. 

—Has perdido la cordura al aceptar ese reto.  

—Hablando de juego, ayer jugué fifa con mi hermano y le gané, ese si fue un buen juego —Dijo ahora el moreno y James alzó la ceja.

—Mejor voy a clase, hablamos luego, amigos... 

Como alma que lleva el diablo salió de esa conversación que iba a hacer que perdiera, sí, tal vez allí no estaba Megan pero ella iba a preguntar todas las semanas a los amigos de él si había hablado de videojuegos o series, claro, él haría exactamente lo mismo con ella.