No te dejes engañar.

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En la esquina mas apartada del salón habían colocado dos sofás de manera estrategicamente para que no se escuchara la conversación. Mientras tanto solamente cuatro de los chicos atendían a todas las señoritas, pues Kyouya se tenia que mantener al pendiente de las necesidades del director y por supuesto de que Tamaki no sufriera un colapso nervioso.

Ya era bastante la carga de trabajo para los gemelos y Honey que apenas se había calmado, pero aquella conversación prohibida llamaba demasiado la atención, que se complicaba demasiado el poner atención es dedicar melosas palabras o actuar como idiotas. Simplemente era demasiada distracción.

-Supongo que ya lo haz contado todo, pues bien estas en todo tu derecho de negarte o aceptar, piénsalo bien y créeme el mundo no se acaba si cumples alguna meta.

-La verdad señor... es que no me veo saliendo del país... -la mirada de Haruhi estaba perdida en la nada como si quisiera evitar la realidad- quiero decir... los únicos viajes que he realizado fueron con el Host club a lugares relativamente cercanos.

-déjame preguntarte algo. ¿por qué sigues dentro del host club, si ya pagaste tu deuda?

Era verdad, Kyouya le había dicho que se podía retirar en cuanto ella quisiera y dejar de usar el uniforme masculino, pero llevaba meses cortándose el cabello y dirigiéndose a la sala de música cada día que parecía una costumbre mas que una obligación.

-pues... porque... -jamas lo había pensado a fondo, simplemente había dado por sentado que ella debía estar ahí- creo que... ellos han estado en cada momento importante que he vivido en este colegio...

-Porque son tus amigos incondicionalmente, te quieren a ti, buscan lo mejor para ti sin un beneficio... aunque la razón para estar juntos es realmente sacar beneficio de señoritas encantadoras.

-Pues no, ellos no... no serian...

¿Acaso había otra realidad que ella no hubiera considerado? a quienes llamaba sus amigos podían o no sacar ventaja de alguien tan desafortunada, al fin y al cabo ella era quien traía los pasteles para Honey, era el juguete de los gemelos y generaba dinero para Kyouya, pero realmente no encontraba una razón pera creerse una verdadera amiga o ayuda en ese club. Pues a decir verdad sin ella el club habría seguido un rumbo normal por lo menos hasta que la abuela de Tmaki metiera las manos.

-No tienes derecho de hablarle así, no debe dudar ni por un momento y tu no puedes meterle ideas a la cabeza.

Tamaki estaba de pie gritándole de forma histérica a su padre quien a decir verdad no parecía preocupado, ya todo el mundo en la habitación los estaba viendo con una atención impresionante, el rubio ya no podía resistir el enojo que le producía que su propia familia alejara de esa manera Haruhi, sabiendo que por ella el club se mantenía unido y que por ella las compañías no habían caído.

-Que forma tan descortés de dirigirte al director, pero bueno esta bien, es todo lo que tenia que decir, ahora por favor atiende a las señoritas, seguramente están esperando a que Haruhi las acompañe, quiero que disfrute estos días antes de irse a Alemania -bajo la voz para que solamente Tamaki y Haruhi lo  escucharan- ... o hasta que lo decida.

-Yo... -Haruhi estaba petrificada, no podía ni alzar la vista.

-Oh no te apresures, te dije que tenias dos días para que pongamos todo en orden. Bueno hasta luego caballeros -hizo una pequeña reverencia hacia los chicos y otra un poco mas profunda a las chicas- señorita... con permiso.

De ese modo salio de la habitación cerrando las puertas y dejando a una multitud pasmada por saber que Haruhi tenia planes de irse a Alemania, algo que al menos las chicas daban por hecho.

-Haruhi... -Tamki apenas podía hablar, ni siquiera le dirigía la mirada a la chica- por favor cumple con las citas que tienes el día de hoy.

Asi pasaron las horas del club, todos trataban de continuar con el dia normal como si realmente no hubiera pasado nada, pero como era de imaginar mas de una persona pregunto por el asunto del intercambio. Tamaki simplemente cambiaba el tema por cualquier tontería pero había perdido el interés en hacer cumplidos, y toda la sala se fue vaciando poco a poco pero ya no quedaba nadie una media hora de terminar las horas de club.

-¡Haru! por favor perdóname por lo que hice... -Haruhi fijo la mirada en Honey y le dedico una sonrisa despreocupada- oye... ¿Trajiste el pastel de fresa que te pedí?

De alguna forma el ambiente dulce que se generaba cada que hablaba con ese chico se había desvanecido, ¿realmente había un beneficio? y si así era ¿por qué tan repentinamente le importaba?

-Perdón, tengo que irme

 Haruhi dio marcha hasta uno de las jardines para terminar sentada bajo un árbol reflexionando realmente que haría, ella era una persona demasiado buena, ¿de que otra forma aceptaría ser parte de un grupo así?, quizá y solamente quizá debía salir de ahí relacionarse con alguien asi no debe ser sano... menos si son ricos, mimados y... y si te lastiman por dejarlos.

-Oye nunca te he visto tan des animada, siempre tienes una sonrisa ahí, si justo ahí debajo de la nariz- ¿realmente ea Kyouya él que le hablaba? parado ahí a lado.- vamos no quiero volver con las manos vacías.

-Tamaki te mando a traerme... supongo que debo volver para escuchar cosas terribles sobre lo que puede pasar si me voy y como todo el mundo quiere que me quede, tal vez debería convencerme de la realidad.

-No creo que sepas cual es la realidad ahora mismo, si realmente quisieras podrías tomar ese vuelo a Alemania ahora mismo. Pero si no es así, el host club mantiene las puertas abiertas para ti.

-No actúes así por favor -Haruhi se había rendido- realmente crees que no lo he pensado, tu sacaras conveniencia de esto y trataras de apaciguar a Tamaki, quizá el sea el único que realmente te importa, yo soy un simple generador de ganancias...

-Tu eres mi amiga -¿acaso Kyouya podia leer la mente? -mira eres importante para todos nosotros, ya no estas obligada a estar en el club pero realmente nos agrada tu parecencia, nos gusta estar contigo, mira nadie esta intentando sacar provecho de ti, piénsalo bien.

-Si no quieren sacar provecho e mi ¿por que no quieren que me valla?

-Por que al igual que a ti nos da miedo despedirnos de nuestra familia.

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