Tú Y Yo. [TYJN #2]

Capítulo 7

POV EVAN

Desde hace dos semanas que salí con Haylie, desde hace dos semanas somos más cercanos, desde hace dos semanas sufro cada vez que la veo con el idiota de West, desde hace dos semanas mi vida se convirtió en un conjunto de emociones que creo que ni las embarazadas tienen.

Necesitaba desahogarme con alguien y como Sabri casi nunca está aquí ahora sino con Esteb, llame a Carly, mi prima.

Estuve contándole mi situación por horas y creo que ella sufrió mucho más que yo y me dijo algo que tratare de hacer, volver a reinventar los momentos que Haylie y yo tuvimos juntos.

Siento una picazón en la nariz pero no me levanto y decido seguir durmiendo pero la misma picazón regresa.

— Vamos, arriba primito perezoso. — Me dice Carly despertándome. Ella es mayor que yo por dos años.

— Demonios, Carly. Déjame en paz. — Digo y vuelvo a recostarme en la cama.

— Hice panqueques. — Me dice y me levanto inmediatamente ya que sus panqueques saben deliciosos.

Bajamos a desayunar y ella vuelve y saca el tema de Haylie a flote, observa su reloj y se pone de pie.

— Me tengo que ir. — Me dice tomando sus cosas. — No olvides lo que te dije. — Me dice cuando le abro la puerta.

— No lo haré. — Le digo y ella asiente besándome la mejilla.

— Eso espero. — Dice y se va.

— Uh... Creo que debí haber venido otro día. — Me dice una voz que reconozco al instante y que me hace sonreír.

— ¡Haylie!— Le digo feliz.

— Lamento haberte interrumpido a ti y a tu novia. — Me dice y yo continúo sonriendo porque se ve tan tierna celosa.

— ¿Quién? ¿Carly? — Le digo riendo y ella se encoje de hombros. — Vamos, no estés celosa, ella es no es mi novia hay mucho Evan para el mundo todavía.

— Claro. — Me dice rodando los ojos.

— ¿Qué te trae a mi preciosa morada? — Le pregunto y ella juega con un mechón de su cabello.

— Vine por tus prometidas clases de natación. — Dice y yo rio.

— Pasa y siéntate, bajo en unos momentos me iré a cambiar. — Le digo y ella asiente.

Subo a mi habitación y me cambio, me pongo un traje de baño azul y tomo una toalla, cuando bajo veo que Haylie está viendo una foto mía y de Sabri cuando éramos pequeños, ese día fue épico, la mejor guerra de comida.

—Ese día tuvimos una guerra intensa. — Le digo. — Ven, vamos. — Le digo tomándola de la mano y guiándola hacia el patio, la ya conocida corriente hizo acto de presencia y sé que ella también lo sintió porque vi como se estremecía.

Veo como ella coloca sus cosas en el piso y se quita su vestido dejando a la vista su bikini verde que le queda precioso.

— Bien, lo primero es que te familiarices con tu entorno. —Le digo y ella asiente.

Veo como se sienta en el borde de la piscina y mueve sus pies en el agua.

— Ahora, vamos a flotar.

Seguí dándole instrucciones hasta que luego de unas dos o tres horas ya era una experta nadando.

Decido hacerle la misma broma que ella me hizo a mi aquella vez cuando por primera vez le enseñe a nadar.