Missing [En Edición] (Completa)

Yuri Katsuki

Quien nos tenía secuestrados a Alexander Bell y a mí, nos llevó a otro lugar. No fue difícil darme cuenta que inicialmente me encontraba en una mansión. Después de que ese sujeto grabase el vídeo que le enviaría al detective Scott nos drogó con somnífero y después de eso no supimos nada más. Cuando abrí mis ojos de nuevo, me encontraba en una habitación diferente. Es probable que ese sujeto haya sido descubierto y cambiado de ubicación al encontrarse en riesgo. Inspeccioné la habitación, era de madera, y tablaroca, quizás un cuarto improvisado. Esta vez no tenía un vestido, sino pantalones deportivos y chamarra azul. Ambos eran viejos. Alexander Bell estaba en otra habitación, pero el día de ayer, nos había tomado una fotografía juntos, drogados. Nos dejaría vivos si el detective Scott seguía sus reglas. Espero que no tenga que hacer algo malo o que comprometa la integridad del detective.

Y luego estaba Viktor, él estará muy preocupado por mí y también Minako-sensei, mis padres y Mari-nechan, todos ellos deben estar rezando porque me encuentre bien y regrese a salvo con vida.

Sé lo que quiere ese sujeto, al detective Prescott. ¿Cómo lo sé?, él me lo dijo el día de ayer, después de enviar el vídeo al detective.

Era de noche, yo me encontraba sentado en la cama, después de que el sujeto quien me secuestró enviara el vídeo, entró a mi habitación, cerrando bajo llave.

—Yuri Katsuki, me alegra verte, ¿sabes porque odio tanto al detective Scott? – me preguntó, yo observé sus ojos, viendo sus irises amarillas. Lentillas.

—No lo sé, ¿acaso hizo algo que lo enfadara? – pregunté, mas valía ser cuidadoso con lo que decía

—Muy listo, Yuri Katsuki, así es, el detective hizo algo que me enojó muchísimo, además de acaparar la atención de mi amado Allen, rompió mi récord en patinaje artístico, eso me enfurece, Yuri – dijo, llenando la bandeja con comida – Pero también, lo amo – dijo, mirando a la nada – Amo al detective Prescott, y lo considero mi más grande rival, estuvo a punto de atraparme dos veces, una en Rusia y la otra aquí en París, es inteligente, pero no ha descifrado mi patrón – dijo, yendo hacia la ventana, corriéndola, admirando la noche estrellada

—Entonces, ¿Qué es lo que quiere del detective Prescott? – pregunté, siendo cauteloso, pero más que nada, curioso por la razón por la cual quería al detective

—Lo quiero a él, tengo un gran comprador que quiere un hombre irlandés, guapo y de carácter difícil, aunque primero deberé domesticarlo, por supuesto, el detective entra dentro de los parámetros que quiere mi cliente, le envíe una fotografía de él y me dijo que lo espera con ansias, recibiré una gran suma de dinero por el detective – me dijo – Pero primero lo tendré por un tiempo y después lo entregaré al cliente, lo haré mío de todas las formas posibles y después lo desecharé, será divertido considerando el carácter de Scott – dijo, alejándose de la ventana – Pero ahora, debemos irnos a otro lugar más privado, no pude capturar al horrible niño rubio y si nos quedamos aquí me atraparan y la diversión terminará – me dijo, colocándome un pañuelo con somnífero. Me rendí al sueño apenas olisqueé el pañuelo, y todo a mi alrededor se volvió negro.

Cuando desperté estaba en una habitación nueva, mohosa y hecha de madera, pareciera una cabaña, o una bodega donde había bolsas y estantes viejos. Apenas amanecía así que habré dormido la mayor parte de la noche. En la habitación había tuberías que corrían de un extremo a otro de la habitación, la puerta de madera, parecía nueva, una cama, donde me encontraba, una mesita de noche y un armario viejo con varios cajones. Sólo había una ventana pequeña hasta la parte de arriba de la habitación.

Me levanté de la cama, buscando que ese sujeto no estuviera en mi habitación, pero escuché ruidos, más bien, gemidos y quejidos venir detrás de la nueva puerta de madera. De un momento a otro cesaron.