Like A Fool

CAPITULO 9

Las nueve chicas comenzaban a acoplarse. En especial Sana y Mina, Chae y Dahyun que ya ahora compartían habitación; aunque para ambos pares ya era costumbre compartir espacio.

-Sana.

-¿Mnh?

El no recibir más palabras de la pelirroja hizo voltear a Sana, interrogándola con la mirada, sabía que tenía algo que decir.

-Nada.

-Oh, vamos. Solo dime, ya sabes que conmigo no tienes por qué contenerte. Si no se la respuesta, la buscaremos juntas.

-No, si no sabes la respuesta entonces te corresponde buscarla sola, por esta vez.

-¿Eh? Ya dime que es entonces.

Se mostraba impaciente por las palabras de Mina, ¿sería que había olvidado algo de la escuela?

-¿Aun sientes algo por Dahyun?

La pregunta hizo que Sana perdiera el balance y terminara tropezando con la cama, cayendo sentada en ella.

-¿Y eso? ¿Por qué tan repentina pregunta?

-Lo sabes bien. Momo la adora y... No quiero llegar a verlas discutir por ello.

-Tranquila, yo comienzo a sentir algo por alguien más... ¿Momo lo sabe?

-No, recuerda que dije guardaría tu secreto.

-Uhn, tan buena que eres, Miguri.

En el trio japonés, Mina era quien guardaba los secretos más oscuros o vergonzosos de Sana y Momo, secretos que no le decían a nadie más, ni siquiera la una a la otra, solo a la pingüina.

Uno de esos secretos era ese, Sana había estado enamorada de Dahyun al mismo tiempo que Momo... Bueno, al mismo tiempo que comenzó a gustarle, porque por la respuesta de Sana, al parecer esa atracción desapareció y le de Momo aún continuaba.

Mina sabía que ninguna de sus amigas se había confesado con la menor. La excusa de Momo era que Dahyun es tan pura que no quiere mancharla y la de Sana es el simple hecho de no querer lastimar a Momo.

¿Por qué tanta seguridad en decir eso? Bueno, Mina sabe que Sana y Dahyun tienen una conexión, la química como también la llaman. Las ha visto, cuando Momo no miraba ellas se veían tan bien juntas y cuando Momo estaba cerca ellas eran algo indiferentes.

Para la pelirroja era algo seguro, Dahyun igual gustaba de Sana pero temía interferir en la amistad de las japonesas... Aunque era eso o que Dahyun estaba confundida y no sabía por cual ir.

Cualquiera que fuera, Mina agradecía la prudencia de la menor por no haber causado un conflicto entre ellas hace unos años; pues después de graduarse de la secundaria, ni Momo ni Sana habían vuelto a hablar con Dahyun hasta estos días.

-Espera... ¿Quién?

-¿Quién qué?

Levantó una ceja hacia la castaña clara que tardó unos segundos en comprender.

-Ah, eso es un secreto.

-Tzuyu.

-¿Cómo... Soy tan obvia?

La risa tan repentina y fuerte de la pelirroja lo dijo todo.

-Tan obvia que te aseguro que Tzuyu no lo nota. Tranquila.

-¿Segura? No quiero que piense que solo trato de, no sé... Creo que Tzuyu es mi equivalente a lo que Momo piensa de Dahyun.

-Wow, creo que si te has enamorado esta vez.