Capitulo 24

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POV Christian

-No puedo creerlo... han matado a Ella... James...- susurra, Anastasia  conmocionada y se sienta en la silla.

-Ana, mirame.- le digo, ni yo pensé que estos hijos de puta, llegaran a tanto -Mirame.- Repito.

Me arrodillo en frente de ella, y tomo su cara con mis manos.

-Esto se ha puesto muy peligroso... Se está saliendo de control... -Le digo.- Debemos regresar a Seattle.

-Fueron ellos... fueron los Hyde, y ahora vienen por mi...- me dice con un hilo de voz. Mi niña esta asustada, pero yo no dejaré que esos desgraciados se acerquen a ella.

-Escucha. No dejare que nadie se acerque a ti.- afirmo con pasión, no me rendiré hasta convencerla. -Vámonos a Seattle... Vuelve conmigo a Seattle, por favor.- Le suplico.

-Yo...yo...- ella esta horrorizada.

-Iré por un vaso de agua.- Escucho que dice José.

Veo a la policía moverse y se acerca a mi un oficial...

-¿Se les ofrece algo?- pregunta comedido.

-Solo queremos pasar a ver a Robbin Adams. ¿Eso sería posible?- le respondo al oficial mientras me pongo de pie.

-Espere un momento, y lo dejaremos pasar...

Treinta minutos después, estamos entrando Anastasia y yo a un pasillo con vidrios en las paredes y varios interruptores. Nos detenemos en la puerta que está al final del pasillo y el oficial nos abre la puerta.

El tal Robbin está sentado en una silla, frente a él está una mesa con un vaso de unicel vacío, un cenicero y varias colillas de cigarro en él. El tipo mantiene todo el tiempo la vista fija en la ventana y no se mueve. Al escuchar pasos solo mueve las manos, pero por lo demás, sigue estático.

-¿Que tal, Bob?- Le pregunta Ana, tratando de sonar segura, pero yo se que ella tiene miedo en estos momentos. Daría lo que fuera para que ella no pase por todo esto.

El sujeto se detiene a mirarnos, a ella la mira con algo cercano al arrepentimiento y a mi, me ve sorprendido.

-¿Y este quién es?- Pregunta el señor Adams.

- Christian Grey- le digo con firmeza, el me mira de pies a cabeza, analizandome

Tiene el labio roto, los ojos morados por los golpes.

- El oficial...dijo que querías verme Anastasia ¿Para que?¿Burlarte de mi?-

- No pretendo burlarme de ti, solo quiero que me mire de frente y me digas;¿Por que? Si yo nunca les hice nada- dice Ana con rabia

Yo cojo su mano y la aprieto. Se que este momento es muy difícil para ella. Y esta sacando fuerza no se de donde para estar enfrente del maldito que intento matarla.

- Siempre fuiste el centro del universo del viejo Frank...para el no existía nadie mas-

- ¡Era obvio!¡ Era su nieta!¡¿Que querian?!- Espeta Ana con voz dura

- Era su nieta...en eso tienes razón. Pero yo te odio¿Y sabes por que? Por que tu eres el fruto de la historia de amor de tu maldito padre, con la mujer que yo amaba - dice con rabia el tal Robbin. Ana se queda estupefacta.

- ¿Trataste de destruirme, por que amabas a mi madre?- Le pregunta horrorizada

- Carla, era mi novia, pero el hijo de puta de tu padre me la quito- ¿De que va esto? ¿De despecho?

- Señor Adams, el que usted haya amado a la madre de Ana, no le daba derecho de querer destruirla. Ahora por sus estupideces, pasara el resto de su vida en la cárcel. Y yo me encargaré de eso- le digo con frialdad

- ¿Crees que tengo miedo?- se ríe con sarcasmo.-  El hecho que yo este aqui, no significa que estés a salvo - mira a Ana

- ¿Si se refiere a que tus cómplices querrán hacerle daño a Ana? Déjeme informarle que ya la policía esta buscando a los Hyde, por la muerte de Ella James - abre los ojos como plato

- ¡¿Que?! ¿Ella esta muerta?- Se queda impresionado

- Si, y me imagino que Jack o su padre la han matado- responde Ana

- Fueron ellos, estoy seguro. Ella y yo le estábamos causándole estorbo. ¡Maldición! - golpea la mesita con su puño

- ¿Quien atento con mis padres?- Pregunta Ana

- Jhon - responde Robbin Adams.-  El quería a Raymond y Carla muertos, pensaba que así se quedaría con la fortuna de su tío...no pensaba que Frank iba ponerte en la presidencia del holding y creo que mucho menos pensó que tu serías su única heredera.

- A mi no importaba el dinero, nunca quise seguir los pasos de mi abuelo, pero ustedes me obligaron aceptar un puesto que yo no quería. El no confiaba en ninguno de ustedes, y por eso me obligo estudiar economía, y me entreno - murmura mi nena, mientras una lagrima rueda por su mejilla - eso no era lo que yo quería, ni siquiera me gusta la economía.

- Ese fue el peor error del viejo Frank, no escuchar y con eso te condeno - dice Bob y vuelve mirar a Ana

- En eso tienes razón - responde Ana con tristeza- yo no elegí lo que me tocó.- Añade

- Vamos nena- digo, me parte el corazón verla que sufre.

- Si, ya nada tenemos que hacer aquí
- nos volteamos, y caminamos hacia la salida

- Espero que algún día...me perdones Anastasia - escucho que dice Robbin Adams, dejando paralizada a Ana.

Anastasia se voltea y le responde;

- Lo que me hicieron, no tiene perdón...que Dios te perdone, porque yo nunca lo hare - Ana habla con rencor.

Salimos de la habitación

-¿Estas bien?- Le pregunto

- No- se limita en decir

- Ana, debemos irnos a Seattle...no podemos quedarnos aqui- le digo

- Esos malditos deben pagar- afirma con rabia

-Si, pero yo no quiero que te expongas- debo hacerla entender que su vida corre peligro.

- Ya te dije Grey, no tengo nada que perder.- Contesta con tono duro

-¡Ya te dije, que me tienes a mi!- Le grito

- Sabes, que eso no es verdad- masculla

Mierda ¿Como hago para hacerla entender que me importa? Que me aterra la idea que le hagan daño.

Más  que mi protectorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora