El Vuelo Chárter para Miami

Inmortalidad en la línea

— ¿...?

Mortificado por el silencio mental de Noll, Billy expresó:

— ¡Vuelve, Noll! — Y los dos reanudaron su diálogo telepático:

— ¿Vio cómo usted ya es más inteligente?

— Siempre he sido inteligente. Además, ustedes me han lobotomizado.

— Sólo le anabolizamos con células-robot para mapear sus clústeres cerebrales, esto es suficiente para pensar mejor y comunicarse telepáticamente, además de ecualizar su reloj espacial interno con la unidad mínima de la dimensión actual y prepararte para el segundo paso de la lobotomía.

— ¿Segundo paso?

— El siguiente paso para que usted se convierta así tan guapo como yo, ¿Qué le parece?

— ¿Quedarme como tú?

— Pero usted aún puede desistir, esas células se disuelven si no entra en la segunda etapa.

— ¿Podré hacer aquello que tú haces con las manos?

— Lo hará.

— ¿Quedarme a prueba de balas?

— Aquí no tenemos balas...

— ¿Armas láser?

— Aquí no tenemos armas.

— ¿Seré inmortal?

— Sí, pero ser o no ser inmortal es inútil si la realidad deja de existir, algo que usted puede captar, pero aún no consigue comprender.

— Siento... Siento que necesito entender. Yo quiero comprender.

— ¿Usted quiere realmente?

— Sí.

— La selección está hecha.

— ¿Pero primero quiero saber lo que va a pasar?

— La doctora le explicará, será ella la que leerá su mente.

— Ok. Hasta luego.

— Hola, Billy — Diana saludó.

— Hol...Gracias.

— ¿Usted está seguro de su elección?

— Sí.

— ¿Usted entiende el por qué?

— Sí.

— ¿Pero no sabe cómo?

— No.

— Será simple y rápido.

— ¿Va a doler?

— No sentirá nada, estará durmiendo.

— ¿Y cómo es?

— Vivirá de nuevo su existencia completa como si fuera una película de atrás hacia delante.

— ¿Y después?

— Despertará en el hospital donde estamos aterrizando.

— ¿Sentiré algo?

— Todo se quedará normal, pero siempre se acordará de todo desde que nasció.

— Pero ¿y ese asunto de entrar en la mente de los demás?

— Usted tendrá el control, es lo mismo que hablar.

— ¿Segura?

— Sí. No hay nada que temer.

— Entonces yo acepto.