La vida en familia es complicada, las peleas y el dolor pueden ser cosa de todos los días, así como también el amor y el apoyo que te dan, no sólo la familia de sangre es tu familia
Viktor alfa, Yuri omega y Yurio como su pequeño hijo omega
*ome...
-¡LADRÓN KAZAJO!- el grito del ruso resono en toda la casa
-¡Viktor calmante!- lo regaño su pareja al ver que comenzaba a caminar molesto hacia el kazajo
-¡me robó a mis bebés!- grito abrazando a Hezelle contra su pecho, el cual parecía empujarlo incómodo, tratando de alejarlo
-¡no soy un bebé!- dijo Yurio en protesta
-¡tu no pero los otros dos si!-lo riño el alfa mayor, pasandole el cachorro al japonés para intentar tomar a Sora, la cual al instante se aferró al brazo del kazako -¡¿vas a dejar que te quiten a Otabek?!-
-¡el calvo tiene razón!, ¡enana alejate de Beka!- en un rápido movimiento cargo a la pequeña
Sora inmediatamente se removió entre su agarre, estirando sus brazos hacia Otabek, haciendo señas de que lo cargará
-¿porque apoyas que Yurio cele a Otabek?- pregunto Yuri confundido, observando de reojo la pelea entre sus dos hijos
-hay que hacer sacrificios por un bien mayor- dijo sonriendo maliciosamente
-el también es tu hijo- murmuró confundido
-pero el crecio, ya no es lindo-
-¡¿qué dijiste calvo?!-
-no deberias gritarle a tu padre-
-¡tu no te metas!- grito señalando al kazajo acusatoriamente para después observar a la pequeña alfa entre sus brazos, la cual tenía una sonrisa de corazón pegada en el rostro, parecía disfrutar todo el desastre que había creado -¡tu deja de reírte!-
-todos tranquilos- habló el japonés, perdiendo la paciencia- luego hablaremos de esto, la comida está lista desde hace un rato, ¿porque no mejor vamos a cenar?-
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Entró a la cocina molesto, ayudando al japonés a llevar las cosas para la cena, de pronto sintió como removian su cabellera, dejando al descubierto su nuca.
-¿qué haces?- le pregunto confundido a su madre
-nada...llegaste oliendo tanto a el, que pensé que te había marcado- se sonrojo inevitablemente ante el comentario del Omega mayor- se que se conocen desde pequeños y que son destinados, pero una unión es algo para toda la vida, no puedes tomarlo a la ligera -
-lo sé....no hicimos nada- respondió nervioso
-ya veo, a Viktor le hubiera dado un ataque si hubieras llegado marcado- continuó con voz divertida
-¿ y a ti no?-
-se que es algo que algún día tiene que suceder- le dijo con una sonrisa comprensiva, dejando los platós a un lados para verlo directamente a los ojos -así que....Yurio ¿podrías ser mi pequeño cachorro un poco más?-
Lo observo en silencio, para luego acercarse y abrazarlo, disfrutando el olor maternal que desprendía el japonés.
-te quiero Yurio- le susurró con cariño, abrazandolo fuertemente
