-30- *no mueras*

3.5K 325 131
                                    

Kaneki - en verdad eres arriesgado, pero supongo que sólo así lo lograremos - admitió mientras se levantaba de la silla a la par que Juuzou.

Juuzou - sí, ¿ahora entiendes por qué quería hablar a solas contigo sobre esto? - cruzó ambos brazos.

Kaneki - completamente.

(...)

Al día siguiente...

Juuzou - ya lo teníamos todo planeado. El ataque sería en tres días, pero no por ello bajaríamos la guardia, así que toda la CCG estaba preparada y sabían qué hacer perfectamente. Muchos aún no podían aceptar trabajar con un Ghoul, menos con uno como el chico del parque, pero... ¿de qué otra forma lo lograríamos? Aunque fuese en contra de nuestros principios, debíamos hacerlo si queríamos proteger a los nuestros, no sólo a los que son parte de la agencia, sino a los inocentes que cargamos en la espalda...

_____- ayúdame a abrir esto - puso un frasco frente a mí.

Juuzou - ¡¿por qué yo?!

_____- reclamó en tono infantil, cosa que me hizo reír un poco.

Muchos pensarán que deberíamos estar preparando las cosas para prevenir el gran ataque, pero Shinohara San nos ha pedido que nos tomemos sólo este día para estar juntos un rato... Sé bien lo que piensa, y es que en esa guerra cualquiera de los dos podría irse, o ambos, y el tan sólo pensar en la posibilidad de perder a mi lindo psicópata me aterrorizaba...

Cuando menos me di cuenta y, dejando de divagar en mis pensamientos, miré al frente, donde estaba la mano de Juuzou sosteniendo el frasco ya abierto, el cual no dudé dos veces en tomarlo.

Así que...Soy la señorita Suzuya...Pero, en realidad...Juuzou y yo aún no somos novios formalmente... ¡maldito orgullo de mujer! ¡eso no debería preocuparme justo ahora!

Juuzou - ahora te conocen como la señorita Suzuya, qué conveniente - añadío eso último en tono de sarcasmo.

_____- no me heces la culpa - dejé el frasco en la mesa - tú también eres muy llamativo.

No pude evitar darle un pequeño empujón al chico, sin embargo éste no parecía estar bien sujetado a la barra de la cocina y cayó de su banco tan alto, al parecer se había golpeado en la cabeza, pero por una parte no me sentí tan culpable, incluso me quería reír un poco, pues se había notado bastante que él le había puesto un poco de actuación exagerada a la situación, aunque no estoy segura del porqué.

No pude evitar darle un pequeño empujón al chico, sin embargo éste no parecía estar bien sujetado a la barra de la cocina y cayó de su banco tan alto, al parecer se había golpeado en la cabeza, pero por una parte no me sentí tan culpable, incluso ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Juuzou - hey, yo no soy el enemigo - se sentó en el suelo, cual gato reincorporándose después de una larga siesta - no te noto normal - inquirió mirándome hacia arriba mientras jalaba un mechón de su cabello, el cual atrapó con el dedo índice y el pulgar - te noto preocupada.

¿Amor? ¿Es una clase de rosquilla? ×juuzou y tú×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora