Siempre a tu lado

Capitulo 2. Pequeña esperanza

  Estaba en un cuarto oscuro solo y silencioso, una puerta se abrió dejando entrar una gran cantidad de luz que me estaba dejando ciego. Entro un oficial de policía con All Might y una señora que pude distinguir que era la madre de Deku. Pasaron a la par sin darse cuenta de que yo estaba ahí, de pie en medio de esa oscuridad. No tenía idea de donde estaba o que pasaba. Solo los observe en silencio.

— Señora Midoriya, puede identificar el cuerpo de su hijo por favor — el oficial habló con una voz seca, casi sin sentimientos. ¿Cómo podía decir eso tan fríamente? Con esa frase sentí como el mundo se empezaba a caer, las paredes negras se quebrantaron y empezaron a desplomar.

La luz ahora entraba a esa aterradora habitación donde había varios montículos con una sábana blanca encima. Empecé a temblar ante aquella horrible escena, me rodeé con mis brazos, estaba aterrado, sudando y empecé a hiperventilar. Iba dando pasos lentos en retroceso. No podía creer que hacia ahí.

All Might solo permanecía en silencio, con una cara que expresaba la angustia y melancolía que teñía su alma, algo sumamente raro en ese símbolo de la paz que siempre sonreía y decía frases idiotas cada segundo. La madre estaba llorando desconsolada. Se acercó a uno de esos bultos, uno pequeño, con la sabana un poco manchada de sangre, y lo destapo.

Era Deku.

Sentí un gran aguijón atravesar mi pecho mientras caía al piso con los puños cerrados. Empecé a balbucear como un loco — Es mentira, si mentira. Yo...yo... ¡Maldición Deku! Despierta, dime que es una estúpida broma... todo esto nos es más que una estúpida broma, solo eso...no es más... ¡¿No es más que una broma, verdad?! Maldición... maldito nerd despierta....... —

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— Despierta estúpido! — dije a todo pulmón, con los ojos cerrados. Cuando los abrí, me encontraba en un cuarto blanco con azul con 2 ventanas laterales. Tenía puesta una bata de un color azul sobrio, y muchos aparatos conectados a mí. Estaba en una camilla, en un hospital.

Había 2 chicos viéndome de cerca estupefactos. También unos doctores y visitantes se me quedaron viendo por la ventana del cuarto que daba hacia el pasillo, esta probablemente estaba ahí para que las enfermeras pudieran vigilar a los pacientes sin necesidad de entrar a sus cuartos.

Entendí había gritado una estupidez en pleno hospital. Mi cara se arrugó inmediatamente al pensar en la idea. La cara de los chicos de sorpresa cambio a como si se estuvieran aguantando la risa, y en eso explotaron. Se empezaron a reír a carcajadas, burlándose de mí.

— ¿Se está gritando a el mismo que despierte o qué? —el pelirrojo decía mientras seguía riéndose descaradamente, casi se le salían las lágrimas de tanto reírse.

— Además, que mientras dormía solo decía "Deku, Deku" ¿estás enamorado? — El chico rubio ya estaba en el piso retorciéndose de la risa mientras trataba de hablar. Después el par de idiotas se quedaron mirando como planeando algo, juntaron sus manos y empezaron a imitarnos. Kirishima hacía mi papel supongo y Kaminari de Deku. Iba a matar a esos hijos de ....

— "Maldito nerd, te odio, pero...en realidad te amo, pero soy muy tsundere para admitirlo" —el idiota creía imitar mi voz haciéndola más grave y arrugando la cara en una expresión furiosa.

—Yo también te amo Kacchan — Kaminari afinó la voz lo más que pudo. Sentí como mis mejillas empezaban a tornarse calientes, en una sensación de rabia mezclada con pena, todo por culpa de estos estúpidos.

— ¡Quieren callarse malditos bastardos!! — lancé a los dos de una pequeña explosión, chocando estos con la pared. En eso entro una enfermera a regañarnos por no guardar silencio en un hospital. Estábamos molestando a los pacientes. Cuando cerró la puerta y se fue todos nos quedamos viendo mutuamente y se volvieron a empezar a reír los muy idiotas, y no pude aguantar la contagiosa carcajada y me dejé llevar solo por un momento.