Memories

8K 1.2K 103
                                    

>Pov TaeTae<

Desperté temprano ese día, más temprano que Hobi al menos, era Sábado y él no tenía que ir a trabajar pero cierto Alfa con dientes grandes si, los Sábados resultaban ser sus días más ocupados y por ende no estaría en casa.

Ese era el día perfecto para ir por todas mis pertenencias y traerlas a la casa de Hoseok, antes de todo esto pensé que tal vez no me quería con él por tanto tiempo y tuvimos que hablarlo. Les cuento, lo recuerdo bien.

Me acerqué lentamente, él estaba trabajando en su computador dentro de su estudio, no quería interrumpirlo pero era hablar con el ahora o arruinarnos la cena y realmente no me gusta arruinar la comida.

--- Si quieres pasar puedes hacerlo TaeTae.

--- Y-yo... Hobi, estuve pensando y creí que tal vez podría buscar un departamento no muy alejado de aquí.

Paró en seco lo que sea que estaba haciendo y cerró su computadora para demostrarme que yo tenía toda su atención.

--- Siéntate Tae.--- Obedecí y me senté en un sofá negro que estaba ahí no muy alejado de él, en cuanto me senté retomó.

--- ¿Ya no quieres estar aquí conmigo?--- Su tono de voz y el olor que se hizo presente en la habitación lo decía todo, estaba triste, levemente decepcionado tal vez.

Mi pecho se estremeció ante la idea de ver a Hobi llorar y me sentí mucho peor al pensar que era por mi culpa.

--- N-no, no es eso, y-yo quiero seguir contigo pero creí que tal vez, q-que tal vez...

Agaché la mirada, ahora era yo quien quería llorar y mi voz se quebraba, no me había imaginado estar lejos de él y ciertamente no quería hacerlo, mi lobo, no, ambos estamos encariñados y aferrados a él.

Se levantó de su lugar y me envolvió con sus brazos llenándome de calidez, esa calidez que me ha hecho quererlo.

--- No quiero que te vayas Tae, quiero que te quedes conmigo, siempre.

¿Acaba de decir lo que creo que acaba de decir?

--- ¿Q-qué dijiste Hoppi?

--- Eso mismo, quiero que te quedes conmigo para toda la vida si es posible.--- Me regalo una suave sonrisa tan propia de él.

--- No sé si tomarlo como una declaración indirecta o una amenaza de secuestro.

Su risa, una muy tenue, sonó por la habitación, no hay mejor sonido que Hobi riendo.

--- Es una declaración Tae, ¿Crees poder darme un oportunidad?

Creí que tal vez las palabras sobrarían en ese momento así que levanté mi cabeza y uní nuestros labios lentamente, una sensación muy agradable se instaló en mi pecho, ahora soy el Omega de Hobi y en cuanto el me marque mi lazo con JungKook se irá.

Mi pecho volvió a latir fuertemente rememorando lo que pasó hace unos días, me levanté de la cama y fui hacia la cocina, nada mejor que sorprenderlo con la comida en la cama, ¿No? Comencé preparando el café y un ruido sordo en mi habitación me asustó, fui hacia ella.

Cuando entré vi a Hoseok sentado en el suelo sobándose la retaguardia.

--- ¿Hobi?--- Levantó la cabeza y me miró, el alivio en su rostro era enorme.

--- TaeTae, perdón, tu lado estaba vacío, me sobresalté un poco y creo que fue lo suficiente para caer por el borde de la cama.

--- Arriba, vamos a desayunar.--- Me acerqué y le tendí la mano para que se levantara.

[...]

Salimos de nuestro hogar en el auto de Hoseok y me llevó a mi antigua casa, inserté la llave en la cerradura y cuando abrí la puerta sólo había silencio, efectivamente, JungKook estaba en el trabajo.

Todo seguía igual, la casa estaba impecable y pulcra, seguramente había pagado para que limpiaran el lugar porque para los Jeon casi era pecado que un Alfa tome un escoba. El aroma era principalmente el de JungKook y aquel perfume que tanto me jodía los sentidos.

Entonces no le importó llevar a una mujer ajena a nuestro hogar y joderla ahí, ¿Tan poco le importo?

Mientras más recorría la casa más me quemaba el pecho, todo era tan parecido a cuando recién nos mudamos, llenos de alegría, sueños y esperanzas, tan jóvenes y estúpidos.

Las lágrimas se acumularon en mis ojos y los cerré fuertemente, no debía llorar por él, no otra vez. Hoseok estaba llevando caja tras caja al auto, no me dejó cargar nada. Cuando volvió a entrar y me vio ahí estático hizo lo que más me encanta, me abrazó.

Cuando sentí que ya había evitado el llanto lentamente abrí mis ojos, mi mirada chocó con la de él hermoso Alfa que tenía de frente, se acercó y suavemente me besó con tanto cariño, casi como si me fuera a romper por aquél tacto, la tranquilidad volvió a mí.

No tardamos mucho en sacar mis recuerdos personales, le regalé a JungKook muchas cosas, principalmente regalos que me había dado en mis cumpleaños o en nuestros aniversarios, no puedes empezar algo nuevo teniendo tantos recuerdos del pasado.

Nos fuimos rápidamente, no quería encontrarlo a pesar de que ese día nunca llegaba temprano, más vale prevenir que lamentar, ¿Verdad?

Ya una vez de vuelta en casa me ayudó a colocar todo en su lugar, mi lobo se regodeaba internamente de felicidad cuando el cuarto estuvo equitativo, mis cosas de un lado y las de Hobi del otro.

No pude evitar pensar en el futuro tan brillante que me esperaba al lado de mi HoSeok, de mi Alfa, de mi compañero de vida.

Tomorrow ~VHope~ OmegaverseWhere stories live. Discover now