Accidente de corazón, secretos olvidados...

Capítulo 24

Desperté en la misma habitación donde estuve después del accidente. Me sentía vacia, miraba por la ventana. Mi celular no lo tenía, seguro se lo había dado a Alex, pero no lo recuerdo.

Mi pecho se inflaba y desinflaba con lentitud. Estaba adormecida, seguramente me había drogado. Todo era lento y tranquilo. Pero no sentía paz, algo faltaba.

Eso era, estaba sola, como en tantas pesadillas. Pero ahora era realidad

¿Por qué los chicos no entraban a verme?¿Seguirán enojados por lo de recién?

Había un café sobre una mesita a mi lado, y junto a el un chocolate con envoltura azul y estrilltas blancas. Me recordaba tanto a los chicos. Las chicas tampoco han venido a verme.

Mi cabeza pesaba, las sábanas eran frías y la cama tiesa, no me gustaba nada donde estaba. Me siento mal por lo de mamá, en cuanto la vea, le pediré perdón por dudar de ella, y le contaré lo de papá.

Justo ella atraviesa la puerta, que estaba al final de un pequeño pasillo y daba a la sala de espera. No tenía ventanas, ya que era completamente de madera. Saludé a mamá, ella hizo una sonrisa triste y dijo:-¿Porqué no le hiciste caso al doctor, mi niña desobediente? Casi mueres. Que haríamos si mueres?-Dijo con lagrimitas en sus ojos.

-Llorar.-Dije atontada por el medicamento. Respiré lentamente.Y continué:-Mamá, quiero confesarte, que papá por accidente, me volvió la heredera de su empresa. Y que todo este tiempo te lo ocultamos a tí y Emily. Lo siento.

Mamá apretó sus puños fuertemente. Y dijo:-Ya lo sabía, y por lo que veo comenzaste a recordar. Que mas recuerdas? Dijo tensa.

-Todo, bueno, siento que hay una parte importante que me falta.-Suspiré y tomé el chocolate.- Me gusta el chocolate, el azul...

-Si, si. Que más? Algo del accidente?

-Si...Pero no mucho.-Yo comenzaba a recobrarme. Y caí en el peligro que estaba, pero necesitaba pruebas...Eran las dos de la tarde, si la recordaba sería la cuarta vez en el día. Y yo moriría, tenía que forzarla a confesar.

-Ah, dijo ella. Voy al baño ya vuelvo. Dijo dejando su celular sobre la mesita. Lo tomé y busque entre sus fotos. Los chicos tenían razón ella se había teñido. Yo estaba atrapada, y seguramente los chicos no entraban porque trabó la puerta. Decidí seguir fingiendo mi estado afectado por la droga.

Ella salió del baño, aparentemente se habia refrescado el rostro. Yo le sonreía.

-Pasaron muchas cosas el año pasado mamá. Sufrí mucho, me convertí en el cajón de secretos de todos aquellos que quería. Traté de suicidarme.-Ella abrió sus ojos como platos.

-Por qué?

-Cuando papá me contó lo de la empresa, yo entré en pánico, lo ultimo que quería era trabajar allí.

-Pero es mucho dinero hija. Siendo sincera, yo me enteré espiándolos. Y-yo.

-Yo y papá siempre pensamos que el debería haberte nombrado a tí. Pero me dijo que en el momento no lo pensó.

-Y-yo lo siento hija. Cuando me enteré lo de tu padre, decidí que debía sacarte del camino. Y por un tiempo pensé que si eso te hacía sufrir, sería mejor que no lo hicieras. Pues estaría en tu lugar.

Le pedí a un investigador privado que te siguiera y te aterrorizara desde las sombras. Al tiempo, comenzaste a sospechar de por qué el hombre lo hacia. Y un amiguito, te ayudaba a investigar.

La noche de la fiesta el chico dió con el nombre de Javier. Y como yo era su último trabajo, pronto me conectarían con él. Así que entré en pánico y le pagué el doble al hombre para que me ayude.

Los seguimos y se metieron en un edificio viejo. Yo de la ira y temor traté de terminar con tu vida. Pero minutos después me llamó Emily diciendo que estabas en el hospital. Mi corazón iba a mil, si me recordabas todo se acabó.

Entonces el doctor me explica que perdiste la memoria, yo estaba a salvo. Tu profesora tratando de ayudar, me entrega una carta hecha por ti que te ayudaría a recordar. Yo temerosa la quemé.

Para eliminar todas las sospechas, teñi mi pelo de castaño y evité a tu amigo Alex. Lo peor es que aún después de que todo terminó, le pedí a Javier que continuara siguiéndote por las dudas.

En serio me arrepiento cielo, pero la envidia y el enojo me carcomían el cerebro. Y al final cuando logré mi cometido, esos sentimientos fueron remplazados por la culpabilidad y el temor constante. Lo unico que conseguí fue distanciarme más de mi familia. No sabes como me duele el corazón cada día al verte.

-Esta bien mamá.-Dije con mi cabeza doliendo como el infierno. Comencé a cerrar los ojos.

-HIJA! No! HIJA! Despierta ahora no!-Decía mientras me sacudía fuertemente.

Cerré los ojos. Y escuchaba de fondo como mi madre abría la puerta de la habitación y pedía a gritos que alguien me salvara. Mamá estaba muy mal, y necesitaba ayuda, que yo no le podía dar.

---

Yo no podía creerlo mamá salió por su cuenta de la habitación, eso solo significaba una cosa mi hermana estaba muy mal. Cinco enfermeras entraron al cuarto acompañadas de un doctor. Mi madre estaba parada fuera de la puerta cuando llegó papá. Ella lo miró triste y se acercó para abrazarlo y el serio ni se movió, venía acompañado por Alex. Varios hombres con traje de policía se llevaron a mamá, mientras Nil me abrazaba contra su reconfortante pecho. Creo que el sufría mas que yo. Me dijo que la escena que yo presenciaba era la misma que el soportó solo hace un tiempo. Y que no tenía que estar sola llorando en estos momentos.

Papá y Alex se acercaron hacia nosotros. Papá ni bien me vió abrazada a Nil abrió sus ojos como platos. El susodicho se separó al instante. Yo lo miré riendo y él no comprendió hasta que papá dijo:-¿Te teñiste el cabello Emily?

Alex se reía de Nil detrás de mi padre. Mientra él se tornaba de un color rojo fuego, en parte de enojo y parte de verguenza ¿Habrá pensado, que a papá le molestaría que me abrace? Se ve que ni Luz ni Alex le dijeron a Nil, que clase de padre tengo.

Mientras todos esperábamos sale una enfermera y dice:-Esta bien, quizas estaba cansada. Tendrán que esperar a mañana. Ya pueden pasar a la habitación.

Cuando me levanté noté que Nil me tomaba de la mano, pero no dije nada. Papá notando el acto dijo:-Se dieron cuenta de que sus cabellos combinan. Es más se parece a la mezcla de helados favorito de Luz.

-Crema del cielo y menta.- Dijo Alex. Los chicos se sonrieron.

-Que más te hace acordar a ella papá?-Dije curiosa. Él miró para todos lados en la habitación. Y señaló a Alex.-¿Por qué?

-Bromeas no?- Me dijo papá.-Miralo bien. Nil después de observar se comenzó a reír.

-Vamos Emliy es muy obvio.- Alex y yo nos mirábamos volteabamos hacia ellos sin comprender.

Su cabello me recuerda al chocolate negro.- A Luz le facina.- Sus ojos son como estrellitas brillantes.-Aja...-El chico huele a chocolate.-Si...-Y no se si lo recuerdas, pero es igualito al oso de peluche que está en el cuarto de tu hermana.-Abrí los ojos como platos, papá tenía razón.-Serías como su novio perfecto.

Alex se tiñó de rojo, mientras Nil se reía. Yo lo miré preocupada, según Luz él también gustaba de ella.

Él sintió mi mirada sobre sí, y volteó hacia mi rostro. Notando la preocupación en mi cara, con una gran sonrisa en su rostro dijo:-Tranquila yo también quiero que él esté con ella. Y además prefiero las chicas rudas de pelo celeste.- Pasó su mano por detrás de mi espalda, tomando mi cintura y acercándome a él. Yo me sonrojé.

Me sentía tan cansada por todo lo sucedido, que no recuerdo cuando me dormí. Al despertar estaba acostada en la sala de estar, sobre el regazo de un dormido Nil, que me acariciaba el pelo. Con tanta calma, me acurruqué y volví a dormir.

A las ocho de la mañana fui despertada por Nil, mi hermana había despertado.

Todo se acabó.