CAPITULO 7

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Sin necesidad de dar una orden, el rey no podía haber dejado mas clara su voluntad. Sin embargo, Caleb miro a los ojos del monarca y vio que, si era necesario, daría esa orden. La frontera era motivo de preocupación para los reyes de ambos lados, y a menudo solía tener sus propias leyes. Dos clanes leales unidos por sangre defendiendo mano a mano una franja de aquella zona conflictiva era una tentación a la que el rey no podía resistirse. Significaría que, en ese punto, todo el mundo obedecería sus ordenes y podría contar con apoyos en la zona.

Caleb vio la inteligencia del movimiento, e incluso entendió el deseo del rey por materializarlo. Sin embargo, aquello no ayudo a que relajara la tensión y la rabia por saberse con la soga al cuello. Ni siquiera al saber que en unos años seria el rey y tendría una posición en la corte y también las riquezas que tendría mas la fortuna que ya tenia tendría que acatar los deseos del rey no había duda en ello.

Cuando decidió que no podía escapar, dijo:

__Si me da permiso para ausentarme un momento,majestad,buscare al padre dela chica para hablar con el.

__Esta bien hijo pero no te tardes que el baile esta por empezar y quiero que tu lo habrás con tu prometida al finalizar anunciare su compromiso.__

Caleb asintió, se acerco a Altair Campbell con cautela. El hombre adivino, con astucia, que todo era fruto de una orden real. Incluso mientras aceptaba la unión y discutía detalles en términos abstractos, Altair se preguntaba si era lo mejor para su hija: Era verdad que le gustaba, a pesar de que para el, MacRoth era la antítesis del sueño de cualquier chica, al ser tan serio y corpulento. Y también veía que el joven no quería casarse con Evolet o, quizá, con nadie. Ademas, también tenia que considerar la frialdad que mostraba. Evolet estaba acostumbrada al afecto, ya fuera rudo, chistoso o amable. Y parecía poco probable que encontrara cualquiera de los tres en el Marqués de Aberdeen.

__Cuando leyó la preocupación en los ojos del señor, Caleb dijo:

__Seré un buen marido para su hija. No le pegare ni iré con otras mujeres. No le faltara nada, lord Campbell .

<<Excepto amor>>, pensó Altair, pero no dijo nada. Los demás tampoco la querían. A sus ojos de padre, la niña se haca querer y no entendía por que los hombres no podían ver mas allá de la ausencia de curvas y descubrir a la autentica Evolet.

Suspiro para sus adentros. Puede que Caleb MacRoth no la quisiera, incluso puede que no fuera capaz de amar, pero la chica lo quería. Y aquello ya era mas de lo que sentía hacia cualquiera de los demás candidatos. Quizás aquello bastaría para que fuera feliz y el quería que lo fuera. Lo que el Marqués acababa de jurarle era mucho mas de lo que los demás habían prometido.

__Me tranquiliza oír eso. Pero me quedaría mucho mas tranquilo si no pareciera que te han condenado a la horca__ gruño.

__Entiendo su indignación señor. Disculpe mi sequedad, pero usted sabe que he enterrado a una esposa joven. No deseaba volver a casarme y correr el riesgo de tener que estar de pie frente a una segunda tumba.__Caleb suspiro pero creía que aquel hombre se merecía su absoluta sinceridad.

__Es mucho mas fuerte de lo que parece, Muchos creyeron que el matrimonio supondría una sentencia de muerte para su madre, pero Meghan demostró a todos que se equivocaban. Evolet no ha sido tratada como una muñeca por sus hermanos y así es mucho mejor._ Vio que Caleb escuchaba sus palabras con educación pero no se las creía, así que cambio de tema__.La tierra es muy buena, aunque la casa necesita acondicionamiento.

__No se preocupe, señor. Con todo respeto pero preferiría que mi esposa viviera en mi casa es un lugar muy bonito y la verdad creo que le encantara.

MATRIMONIO ForzadoWhere stories live. Discover now