Cap 8 "Salvar personas, el negocio familiar"

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Narra eli:
Contemple a Sam ,por lo que a mi me parecieron horas pero en realidad fueron unos minutos ,el susodicho se volteo a verme con una sonrisa ,creo que notó que lo observaba 

-¿Cómo te sientes?-preguntó tomando mi mano entre la suya 

-muy bien-sonrei -¿Quieres ver una pelicula?-sugeri

-esta bien,pero no de Di caprio-condiciono divertido 

-¡Oh por favor!-rodeé los ojos aun con una sonrisa-cuantas veces tengo que decir ,¿Qué tu eres mucho mas sexy y hermoso que Di caprio?

-asi que soy mucho mas sexy ,¿Eh?-repitió divertido 

-¿Sam?-llamé

-¿Sí?

-no te ves cómodo en esa silla ¿Quieres acostarte conmigo?-pregunte haciéndome a un lado
-bueno... pues... am... ¡Claro!-aceptó
Una vez juntos, me giré y apoyé mi cabeza en su pecho, el paso un brazo por mi cintura dejando su mano con precaución sobre mi estómago
-¿Qué película quieres ver?-pregunté mirándolo
-elige tú-decidió
-¿Seguro?, por que corres el riesgo de tener que ver una película de Di Caprio-bromeé
-me arriesgaré-sonrió-confío en ti-besó mi cabeza
Prendí el televisor y puse Netflix, estuve buscando, cuando por fin decidí que ver, una sonrisa se instaló en mi cara, le puse play.
-¿Volver al futuro?-preguntó Sam
-¡Sip!-sonreí como niña pequeña.-¿Por qué? ¿No te gusta?
-si me gusta, solo que me sorprendió que la escogieras-admitió
Una hora mas tarde, la película termino, por lo que apagué el televisor y voltee a ver a Sam
-¿Cómo te sientes princesa?-preguntó
-¡Estoy bien!-dije para luego acercarme y besarlo.
-me alegra, por un momento pensé que-respiró hondo-que te perdía
-Sammy-sonreí acariciando su mejilla perfectamente afeitada-estoy aquí, ustedes, tú me salvaste y por eso te debo la vida, gracias-volví a besarlo
-tú no me debes nada, esto es lo que yo hago salvar personas, el negocio familiar.-me miró y corrió un mechón de mi pelo que estorbaba- además yo te prometí que te protegería, aunque fallé, pero pude salvarte
-Sam no fue tu culpa, ni siquiera lo viste venir-justifiqué
-debí interponerme entre tu y el demonio, pero simplemente no pude me quede de piedra, lo siento-se disculpó
-hey, no tengo nada que disculparte, por que no fue tu culpa-acaricié su mejilla nuevamente-ahora, tengo una cosa que discutir contigo-me puse seria y Sam se tensó
-ah... yo...-tartamudeó
-¡Tengo hambre!¿Cuánto crees que Dean tarde en cocinar?-pregunté , a lo que el chico junto a mi respiró con tranquilidad
-tienes razón-pensó-iré por tu comida-dijo apuntó de levantarse, pero ataje su brazo impidiendoselo
-mejor bajemos-sugerí-no quiero estar todo el día acostada.
-¿Podrás?-pregunto preocupado
-¡Claro que si!-aseguré
-pues entonces vamos-sonrió
Salimos hacia el pasillo caminando despacio, Sam insistió en que no me apurará, lo cual me pareció tierno que quiera ayudarme, llegamos hasta las escaleras y antes de que pudiera siquiera decir algo, Sam me tomó por sorpresa en forma nupcial
-¿Qué haces?-pregunté divertida mientras observaba sus hermosos ojos de cerca
-estoy ayudando a la princesa a bajar las escaleras-dijo obvio
-pero yo puedo sola-justifiqué
-si, pero yo quiero llevarte-sonrió dejando a la vista sus hoyuelos, pasé uno de mis brazos por su cuello y con mi otra mano acaricié su mejilla, ya se me había hecho costumbre.
Al llegar a la planta de abajo, se suponía que Sam me bajaría
-Sam, ya puedes bajarme-avisé
-pues yo creo que aún no
-¡Sammy!-reprendí
-¿Qué?, yo te dije que te iba a proteger y eso hago-se encogió de hombros
No me pude resistir y lo besé.
...
Unos minutos después llegamos a la cocina, justo en ese momento Dean terminaba de hacer una hamburguesa. Nos miro divertido
-ay pero si son la bella y la bestia-se burló
-¡Qué chistoso!-dije con sarcasmo, aunque tenia una pequeña sonrisa-Sammy no es una bestia, es un gigante-lo miré conectando nuestras miradas-mi gigante
-bueno en eso tienes razón-dijo Dean mirando los platos de comida con una mirada triste-pero por otro lado-dio un aplauso feliz-ya esta la comida
Sam se encargo de dejarme suavemente en una de las sillas para luego sentarse junto a mi y pasarme mi plato, olía bien y no dudo que sabiera igual, de solo ver la hamburguesa se me hacia agua la boca.
Cuando Dean se sentó, rápidamente comencé a comer, realmente tenía hambre.
-oye Dean ¿Alguna novedad?-pregunto Sam
-pues si, hay un caso-miro a su hermano serio
-¿De que se trata?-cuestionó nuevamente el menor
-por lo que sé, un espíritu-tomó de su cerveza-¿Lo tomamos?
-ah...-Sam volteo a verme indeciso-Dean, no lo sé
-Sam si es por mi, no te preocupes-dije para calmarlo-puedo quedarme aquí o los puedo acompañar-sugerí como quien no quiere la cosa
Ahora ambos hermanos me miraban serios demasiado
-¡No!-dijeron a unísono
-pero-insistí
-no, no dejaré que te lastimen otra vez-dijo Sam
-pero puedo ir con ustedes y no interferir en el caso
-deja que lo piense-dio por terminada la discusión, estaba segura de que eso era una excusa. No me dejaría ir.
Me levanté de la mesa luego de terminar, dejé el plato en la bacha y me fui hacia las habitaciones
-¿A dónde vas?-pregunto Sam, me voltee y lo vi parado en la puerta de la cocina
-al baño, quiero darme una ducha-informé
-¿Necesitas que te ayude a subir?
-no, yo puedo-murmuré, estaba enojada por que sabia que no me dejaría ir, lo único que quería era acompañarlos, no pretendía meterme en el caso. Subí de a poco sintiendo como los puntos se tensionaban, no me preocupe, iba despacio sin apuro estaba segura de que nada iba a pasar.
Unos cuantos minutos después me encontraba abriendo la puerta de mi cuarto, tomé lo necesario y me entre a duchar. Me tome mi tiempo pensando en todo lo ocurrido los últimos días.Lo mejor de todo había sido que Sam me había dado una oportunidad para sanar viejas heridas. Sonreí pensando en el chico de ojos color infinito que tanto me enloquecía.
Salí, me cambié con ropa cómoda y volví a la habitación donde Sam se encontraba sentando en mi cama con un botiquín de primeros auxilios.
-ah... yo... no quería molestarte, sólo necesito cambiarte las vendas-informó tímido, asentí y me acosté a su lado, levanté la remera para que le fuese cómodo.
Rápidamente saco un algodón con desinfectante y me lo pasó cuidadosamente por la herida, sentí el escozor que el alcohol provocaba, solo pude sisear, Sam lo notó y sopló para que no me ardiera. Limpia la herida me la vendo.
-¡Gracias!-susurré
-de nada-tiro el algodón previamente usado-te dejaré descansar
Antes de que se fuera tome su mano
-¡Quédate!-pedí, a lo que asintió acostándose a mi lado abrazandome.

Save me ~Sam Winchester~Where stories live. Discover now