Save me ~Sam Winchester~

Cap 12 "Crowley, otra vez"

Narra Eli:
Sam se separó de mi luego de unos minutos
-¿Estas bien?-pregunte tomando su mano
-si-murmuró observándome
-¿por qué me miras así?-pregunté notablemente sonrojada
-porque no puedo creer que aun estés aquí conmigo-dijo acariciando mi mejilla
-Sam no me iré, no te dejaré-declaré, para luego besarlo.
-me encantaría que pudiéramos quedarnos mas tiempo en la cama, pero ya debemos levantarnos-dijo el menor sentándose en la cama, tomó el pantalón y se lo puso.
-quería quedarme mas tiempo contigo-admití triste
-tenemos mucho tiempo para estar juntos, ¿No crees?-preguntó mientras se levantaba de la cama gateé hasta estar detrás de él, podía ver como sus músculos se contraían al ponerse la ropa, suspiré y me acerqué para luego abrazarlo por detrás sobresaltándolo
-¿Qué haces?-preguntó divertido
-nada, sólo te abrazaba-dije como si nada, besé su espalda logrando que su piel se erizará con el contacto, lo oí suspirar y en menos de lo que pensé me encontraba en la cama con el sobre mi sin aplastarme.
-eres mala, amor-declaró a lo que reí
-¿Por qué?-fruncí el ceño
-tu sabes-levantó las cejas a lo que reí
-te quiero mucho mucho, ¿Lo sabías?-abracé con mis brazos su cuello
-yo igual-dijo para luego besar mi cuello
-¿No que te querías levantar?-pregunté
-es tu culpa, me estabas provocando-dijo corriendo la camisa que traía puesta para luego dejar otro beso en mi clavícula
-¡Sam!-dije entre suspiros-ahora no
-fuiste tu quién empezó-dijo mirándome
-entonces fue mi error-sonreí-ahora que tal si me dejas ir a bañarme
-esto te costará-dijo levantándose para luego estirar una mano en mi dirección, la tomé y tiró de mi hasta que quede levantada.-¡Ve!-negué con la cabeza divertida y besé su mejilla, antes de tomar algunas cosas para luego ir al baño.
Al salir Sam aun estaba en la habitación con la única diferencia de que traía puesta una camisa y el botiquín de primeros auxilios descansaba sobre sus piernas
-supongo que quieres ver la herida-deduje mientras dejaba todo lo que traía en su lugar y me dedicaba a secar mi pelo con una toalla
-estas en lo cierto-murmuró sin dejar de seguir mis movimientos, deje lo que hacia y me acosté junto a él levantándome la remera, Sam se puso cómodo y se dedicó a cuidar de mi herida, la examinó, bajó la cabeza y besó la lastimadura toda mi piel se erizo con el contacto de sus labios en mi cuerpo, un suspiró algo entre cortado brotó de mis labios
-¿Q-Qué haces?-pregunté sorprendida
-estoy curando tu herida-dijo para luego levantar la cabeza y besar mis labios,no pude evitar reír, se separó mirándome con ambas cejas alzadas en señal de confusión-¿Por qué ríes?
-tu pelo me hace cosquillas-dije divertida
-um... creo que es tiempo de que lo corte-declaró
-¿Qué?-pregunté atónita-¡No!, Samuel ni lo pienses-reté
-¿Te gusta?-pregunto incrédulo
-te queda muy lindo-mordí mi labio inferior
-no hagas eso-dijo con la voz ronca
-¿Qué cosa?-fruncí el ceño
-morder tu labio-susurró
-Sam ya tengo hambre, ¿Podemos ir a desayunar?-pregunte mirándolo
-¡Sip!, pero antes debo desinfectar la herida-dijo tomando un algodón el cual mojó con alcohol y lo pasó con cuidado, me vendo y listo.
Me iba a levantar, pero Sam me sorprendió besándome, fue un beso lento y dulce, al separarnos bajó hasta mi cuello
-sujetate de mi cuello-murmuró contra mi piel sensible de la clavícula, no entendí por que pero igual lo hice, entonces pasó sus manos por detrás de mi cintura y me levantó, mis piernas quedaron suspendidas por lo que abracé su cintura, reí y Sam igual, dio un par de vueltas conmigo, lo tomé de las mejillas y lo besé.-bueno ahora si podemos ir por el desayuno
...
Bajamos las escaleras, cabe decir que Sam no me bajo en ningún momento, al llegar a la cocina Dean nos esperaba con unas donas y café
-¡Buenos días!-saludó el mayor
-¡Buenos días!-saludamos a unísono
-café, ¿Amor?-preguntó Sam dejándome en una de las sillas de la mesa para luego caminar hacia la cafetera
-por favor-dije feliz
-veo que ya se arreglaron-destacó Dean con una sonrisa
-¡Sip! por cierto-me acerqué a su oreja-gracias por hablar con Sam
-de nada cuñada-me guiño un ojo divertido
Sam me pasó mi taza de café, le di un largo tragó,estaba delicioso
-¿Qué hay por hacer?-preguntó el menor
-buscar a Crowley y creo saber dónde-dijo Dean tomando un periódico y poniéndolo frente a nosotros, de repente ya no sentí la necesidad de comer, el hambre de había ido dejando en su lugar un vacío provocado por el miedo, no conozco a Crowley pero algo me hace temerle mucho. Miré la noticia, hablaba de una mujer que murió misteriosamente luego de hacerse millonaria unos días antes tras haber ganado la lotería.
-¿Por qué esto tiene que ver con Crowley, Dean?-pregunto Sam levantando la vista del periódico para ver a su hermano
-lee entre líneas-ordenó, el menor volvió a leer la noticia rápidamente
-¿Crees que sean tratos que están siendo cobrados antes de tiempo?-pregunto Sam entendiendo
-¿Exacto! y donde hay demonios de encrucijada haciendo de las suyas probablemente allá un rey furioso-dijo triunfante
-¿Por qué estas tan callada, Amor?-pregunto Sam volteando a verme
-porque-mire mi taza de café humeante-tengo miedo-admití
-no tienes a que temerle-dijo tomando mi mano y la apretó suavemente-yo estoy aquí y mientras esté, nada podrá pasarte-aseguró, me acerqué a él y lo besé cortamente
-gracias, Sammy-dije corriendo un mechón que estorbaba a la vista, para luego besarlo dulcemente. Dean carraspeó haciendo que nos separemos
-no quiero interrumpir pero tenemos un problema-dijo el mayor serio
-¿Y el problema es...?-pregunto Sam sin entender a que iba eso
-Eli no tiene tatuaje anti posesión y la medallita que le diste no la protegerá por siempre, además se la pueden quitar, no es seguro.-explicó rápidamente.
-¡Tienes razón!-dijo el menor
-¿Lo haré!-declaré
-¿Qué?-preguntó Sam
-el tatuaje ,me lo voy a hacer-repetí
-¿Segura?-preguntó preocupado
-segura, amor-sonreí
-¡Bien!-aceptó
-de todas formas no es seguro que vengas-dijo Dean
-Dean ya soy parte de esto y ese demonio se esta metiendo conmigo -dije decidida-y quiero saber por que
-pues vamos  entonces-dijo el mayor no muy de acuerdo.