Save me ~Sam Winchester~

Cap 26 "¿Gemelos?"

Le dí un último sorbo a mi batido y tiré el vaso en uno de los múltiples basureros que se encontraban en la cuadra. Llegué al motel, al doblar la esquina noté que la puerta de la habitación que compartía con los Winchester esta abierta, corrí lo que faltaba, sabía que me comería una buena regañada pero algo me decía que no fueron los chicos quiénes la abrieron. Antes de cruzar la puerta, saqué un arma que tenía en la cinturilla de mi pantalón, apunté al suelo y entré, mala idea, primero por que eran Vampiros los que habían atacado y segundo sólo podía matarlos cortándole la cabeza.
-Eli, ¡Vete!-gritó Sam desde una de las sillas en la que se encontraba amarrado.
-vaya, pero que tenemos aquí-uno de los vampiros, se acercó a mi y aspiró profundo-que delicioso olor pero...-frunció el ceño-no es tuyo-su mirada bajó a mi vientre, por lo tanto puse mis brazos como forma de protección para mi bebé, idiota lo sé, pero no tenía un machete cerca para cortarle la cabeza al chupa sangre.-es el niño-giró para ver a Sam-es tuyo Winchester, tiene tu mismo olor ¿O me equivoco?
-aléjate de ella-gruñó intentando romper las sogas.
-¡Uy! el gigante se enojó-dijo otro acercándose al que supongo es el jefe.-hay que probar su sangre-miró mi estómago lamiendo sus labios
-no, no le harás daño a mi hijo-dije furiosa
-atala-dijo el primer vampiro al que recién había hablado.
-no, no la toques-esta vez fue Dean y para mi sorpresa había logrado desatarse con un cuchillo que le pasó a Sam, para que hiciera lo mismo.
El mayor tomó rápidamente un machete que estaba en el suelo y corrió hacia el chupa sangre más cercano y le cortó la cabeza.
-tú sigues-miró al jefe
-¿Qué esperas?-preguntó burlón
-oh, yo no voy a hacerlo-rió, antes de que el vampiro pudiera decir algo, Sam lo mató.
-¿Estás bien?-preguntó Sam acercándose
-si, lo estoy-miré detrás de mi cuñado-Dean, ¡A tu espalda!
...
-¿Qué quieren para almorzar?-preguntó Dean desde la puerta
-una ensalada mediterránea-dijo Sam mientras miraba algo en su computadora
-yo quiero... una hamburguesa con doble queso y papas fritas-sonreí, mi cuñado estaba a punto se irse-¡Y Pie!
-¡Okey!
-¿Qué haces, amor?-pregunté sentandome a su lado.
-un caso-sonrió al verme
Hacia menos de un día habíamos llegado al búnker luego del encuentro con los vampiros y él ya buscaba un caso, la verdad no lo entendía.
Iba a hablar, cuando la puerta es tocada, ambos nos miramos, antes de tomar un arma, Sam se paró primero y luego yo lo seguí
-quédate detrás mío-dijo con la vista en la puerta.
Al abrirla, como mi novio me tapaba no pude ver quién era, así que no me quedaba otra más que escuchar
-¿Sí?-preguntó Sam
-ah... Soy Dylan Wright, ¿Está Eli?, soy su hermano mayor-con una sonrisa aparté a Sam del camino y me puse frente a mi hermano
-¡Dyl!-me lancé a sus brazos, enseguida envolvió mi cintura con los suyos-¿Qué haces aquí?-pregunté al separarnos y dejarlo entrar.
Nos sentamos en el sillón y nos quedamos en silencio unos minutos en los que observé a mi hermano, estaba decaído, quizás molesto también.
-uh... me he enterado de algo y necesito de tu ayuda-dijo mirándome con sus ojos azules, siempre lo envidié por su suerte de tener ojos claros.
-pues, dime-ahora estaba preocupada
-no quiero interrumpir pero...-Sam apreció frente a nosotros
-Estás interrumpiendo amor-reí
-los siento, no me he presentado correctamente, no la verdad no he podido-dijo el winchester menor a mi hermano-Soy Sam..
-Winchester, lo sé -dijo mi hermano estrechando su mano, frunció el ceño y se giró a verme luego del saludo con Sam-¿Son novios ustedes dos?
-pues sí, pero no le digas a nuestros padres-supliqué
-tranquila, no les pienso decir ni pío-dijo enojado
-¿Te peleaste con ellos?-fruncí el ceño
-si, por algo que, uh no se como tomar, no se que hacer en verdad -pasó una mano por su rubio cabello
-te ayudaré, pero debes decírmelo primero-dije compasiva
-yo... pues... tengo un hermano gemelo-soltó, que alguien me diga que escuché mal, ¿Un gemelo?
-¿Un gemelo?-pregunté atónita-ellos te lo ocultaron, ¿Verdad?
-si, no debían, no tenían el derecho-gruñó molesto
-¡Por supuesto que no!-dije de la misma forma
-amor-dijo Sam severo con su vista en mi vientre para que entendiera, no quería que me alterara y le pasara algo al bebé, yo tampoco quería que nada pasará.
-¿Cómo se llama?, ¿En dónde esta?, que pasó con él?-lo ataqué con preguntas
-Eli, no se nada de él-se fregó la cara con las manos-excepto que se llama Cole, o así es como nuestros padres le pusieron al nacer.
-¿Por qué los separaron?-se me hacia extraño
-problemas con su trabajo, ya sabes la caza y las criaturas-volteó sus ojos-pero luego llegaste tú y mamá se rehusó a dejarte.
-no es justo-murmuré
-¡Por supuesto que no!-Sam se levantó del sillón en el que estaba-veré en que puedo ayudar-se sentó frente a su computadora.
-y yo que creía que estaba...-golpeé se hombro para que no siguiera
-no eres el único-habló en rubio para mi sorpresa-yo mismo he creído siempre que estaba maldito.
-Sam-dije para que no siguiera
-entonces.... Cole ¿Y no sabes nada más?-preguntó el menor a mi hermano
-creo que estudiaba en la Universidad de Yale.
-bien...-tecleó unas cosas-aquí está Cole Mitchell Sprouse-leyó, mi hermano y yo nos levantamos de un salto para ver la pantalla de la Notebook, mis ojos se abrieron como platos, la persona en la imagen, era igual al chico con el que vivi toda mi vida. Rubio, pelo corto, ojos azules y cinco lunares, dos en cada mejilla y uno en su pera, también noté que era una poco más delgado que mi hermano, aunque él también era flaco, estaba bastante fornido debido al ejercicio que hacia diariamente durante la caza de monstruos.
-es igual a ti-dije asombrada-bueno eso prueba que nuestros padres decían la verdad.
-tengo que ir a verlo-dijo el rubio nervioso-¿Puedes averiguar en dónde vive?
-dame unos minutos-dijo concentrado en lo que hacía
-¡Llegué!-todos nos dimos vuelta encontrando a Dean, que nos miró con el ceño fruncido más bien a nuestro invitado.-¿De qué me perdí?
-¡Dean! ¿Recuerdas a mi hermano Dylan?
-ah, pues recuerdo que lo nombraste cuando fuimos a tu casa-frunció el ceño recordando-¿Es él?
-si, Dylan el es Dean, Dean el es Dylan-los presente, se estrecharon la mano
-¿Qué pasó?-preguntó mi cuñado al vernos de nuevo pegados a la computadora
-resulta que parece que tengo otro hermano y es gemelo de Dyl-expliqué
-¡Wow!, eso no es algo que se vea todos los días-dejó la comida en una de las mesas
-¿Cómo cazar cosas?-pregunté divertida
-¡Touché!
-bueno, no vive muy lejos de aquí-dijo Sam-¡New York!
-¿Eso te parece cerca?-preguntó Dean
-bueno, nos vamos a New York.-sonreí-Sam saca los pasajes.
-¿Qué? ¡No!-chilló Dean
-cierto, me había olvidado de tu temor-dije afligida-pues entonces vamos en Baby.
-¿Estás segura?-preguntó Dylan
-es mi hermano también y además necesitas apoyo, tú me lo has dado siempre, ahora me toca a mi dartelo-lo abracé, y él me correspondió.
-Eli, puedo hablar contigo, en privado-al separarnos miré a Sam
-¡Claro!-sonreí tomando la mano del menor, subimos y nos metimos en nuestra habitación
-¿Qué pasa?-fruncí el ceño sentandome en la cama
-¿Le dirás sobre el bebé?-preguntó sentándose en una silla frente a mi
-si, pero aún no-toqué mi vientre
-¿No crees que notará qué algo te pasa, cuándo te vea comer como si no hubiera un mañana o cuando te agarren náuseas en el viaje?
-hay amor, no como tanto-reí-y sobre lo otro puede ser debido al movimiento del auto.-suspiré-de verdad quiero ir con él.
-Está bien-apoyó su mano sobre la mía con una sonrisa.
-no puedo creer que mi hermano tenga en gemelo-dije todavía sorprendida.
-si,debe ser...pues no sé-rió encogiéndose de hombros
-¿Hacemos los bolsos?-pregunté levantandome de dónde estaba.
-¡Adelante!-dijo tomando su mochila para iniciar.-¿Cómo se encuentra el pequeño?-acarició mi panza, haciéndome saltar de la sorpresa
-tranquilo-apoyé mis manos sobre las suyas
-¿Tú también tienes la sensación de que será niño?-preguntó girandome sobre mi eje
-si-frunci el ceño-¿No es raro?
-ya nada me parece raro, a esta altura de mi vida-admitió.-¿Sabes?, tú y Dylan no se parecen en nada, ¿Seguro que es tú hermano?-cambió de tema.
-si, el sacó la belleza de la familia de mi madre, yo no corrí la misma suerte.
-¿Quién dijo eso?-me acercó a él y me besó
....
Bajamos con las mochilas listas, que por supuesto Sam bajó porque no quería que hiciera fuerza y no metimos al auto.
El viaje fue bastante entretenido, música clásica, chistes malos de parte de Dean y anécdotas de todos.
Cómo Sam predijo, me dieron  náuseas varias veces y por ellos paramos cada dos por tres, mi hermano había empezado a sospechar, pero se olvidó rápido de todo cuándo vimos el cartel de bienvenido al Estado de New York.
Cómo eran apenas las siete de la mañana, nos fuimos a un motel rentamos dos habitaciones, cada uno con su respectivo hermano, yo con Dylan, Dean con Sam.
-deja de dar vueltas-me quejé desde la cama, mientras observaba a mi hermano ir y venir repetidas veces.
-lo siento, es que estoy nervioso, ¿Qué le diré?-preguntó horrorizado
-cálmate-me levanté pero un mareo me atacó provocando que me sentara en la cama de nuevo, mi hermano me miró raro.
-¿Segura estás bien?-preguntó acercándose
-si, solo que viajar a veces me hace mal-me excusé
-uh... okey-dijo para nada convencido
-lo vas a hacer bien, es tu hermano-me encogí de hombros-después de todo compartieron matriz-me encogí de hombros con una mueca que pretendía ser una sonrisa
-¡Qué chistosa!-rodó sus ojos con la sombra de una sonrisa en sus labios
-¿Y quién es el mayor?
-¿Tú quién crees?-puso cara de arrogante
-cómo no adivinarlo-reí.
La puerta sonó por lo que fue Dylan a abrir, eran los hermanos que entraron y automáticamente Sam corrió hasta mi
-¿Estás bien?-apoyó una de sus enormes manos en mi mejilla
-si, solo estoy con mareos-expliqué
-¿Comiste algo?-negué, me miró severo.
-lo siento-me disculpé
-ten-sacó de su bolsillo una barra de chocolate con almendras, lo tomé y me lo devoré en menos de un minuto
-ya me siento mejor-sonreí parandome de la cama con cuidado
-¿Vamos?-preguntó Dean, jugando con las llaves de su auto.

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He hecho un cambio y ahora el hermano de Eli, se llama Dylan.