INDARRA

8-Rutina

Normalmente mi rutina era la misma todos los días, me despertaba la primera, desayunada, preparaba el almuerzo a mis hermanos, les hacía colacao para desayunar e iba a despertarlos, la última siempre es Ainara,  me ingeniaba trucos para no llegar tarde.

-Ainara me voy, le gritaba- acto seguido abría y cerraba la puerta de casa, yo me quedaba dentro pero Ainara venía como una estrella, yo no me aguantaba la risa.

- Que graciosa eres- se quejaba ella.

Otras veces le llegaba a tirar agua en la cabeza para que se despertará, aunque a ella eso le molestaba mucho, pero sino llegabámos tarde a clase.

Después de las clases, volviámos a casa, comiamos, veíamos los Simpsons y nos íbamos de vuelta a clase, termianabamos las clases y volvíamos a casa, yo era la única que solía hacer los deberes y después de acabar me iba con Ainara e Izan a la calle a jugar, normalmente íbamos con Sansa que se traía también a su hermano pequeño Ilian, después nos ibamos a cenar, yo me echaba a dormir la primera, los demás se quedaban hasta tarde, Ainara a veces se venía antes así le contaba historias (Ainara y yo compartíamos la misma habitación, dividida en mi parte y su parte) Cada una con su territorio.

Erica se unía a nuestras tardes a jugar,aunque a veces se iba con otras chicas del pueblo que no nos caían muy bien, porque se hacían las malotas y en realidad somos niñas, pensaba que eso le podía perjudicar a Erica, Sansa y yo le dabámos a elegir ellas o nosotras. Creo que con nosotras tenía esa confianza, se sentía agusto con nosotras,pero con ellas tenía esa parte divertida y alocada, Sansa y yo nos parecíamos en que no nos gustaba romper las reglas, ni horarios, creo que demasiado responsables para nuestra edad, pero así éramos, si nos proponían alguna locura la descatabámos.

-¿y que hacemos hoy?- Dijo Erica

-¿Podemos ir a la estación?- contesté yo

-¿Y sí jugamos a profes y alumnos?- Dijo Sansa

La mayoría de las veces eligía Sansa, cuando nos enfadabamos le llamaba "marimandona", porque siempre acababamos jugando a lo que ella quería y yo no estaba de acuerdo, a veces me aburrían esos juegos y me tocaba a mí pedirla perdón, daba igual por lo que hubiéramos discutido, pero en realidad esque sin ella me quedaba vacía.

Un día Erica y otra chica de las que se querían hacer mayor, decidieron practicar un baile, donde vivía Sansa, vinieron muchas chicas del colegio, ese día yo estaba molesta, porque todas decían que bien os ha quedado. Me senté en una ventana apartada de todas, porque sinceramente yo no les caía bien a las chicas del colegio (nose porque pero no me querían cerca de ellas, es algo que asumí con el tiempo, tampoco me preocupó mucho, lo acepté) pero aquel día solo veía como se burlaban de ellas, les hacían creer que eran sus amigas, cuando en realidad no era así, amí poco me importaba si se burlaban de mí, pero no me gustaba que fueran así con las demás, siempre sentí que éramos las apartadas, con Sansa era diferente, a ella si le aceptaban, la trataban bien, sin burlas y sin nada, pero pese a ello nunca se separó de mí.

Por un tiempo éramos las tres, superamigas, las "supernenas", confidentes, vivíamos aventuras y nos divertíamos. Pero no duró mucho hasta que Erica se mudó a otro pueblo, más apartado, y solo volvimos a quedar Sansa y yo. Le escribíamos cartas a Erica, pero ya no era lo mismo, las cosas cambiaron.

Sansa comenzó en el instituto y entre ella y yo cada vez había más distancia, ella tenía muchos deberes y yo salía con otros amigos a jugar, nose como nos empezamos a separar, también peleabamos más, sentía como mi mejor amiga se distanciaba, tenía otras amigas que compartíamos, pero apenas la veía.

Cuando yo empecé el instituto, Sansa iba un año por encima de mí, puesto que repetí un curso, habíamos discutido y era mi primer día en el centro, estaba nerviosa, pero ahí estaba Melisa, amiga de Sansa, con la cual conecté enseguida, pero era raro porque Sansa no quería estar conmigo, así que se distanciaba de todas, por ello intenté hacer más amigas,  me lo pasaba genial con ellas, compartíamos muchos momentos y en clase nos divertíamos mucho.

Melisa era la hermana menor de la amiga de mi hermano Eric, creo que eso fue también algo que nos unió mucho, tiene un gran corazón, divertida y me gusta su melena larga y oscura.

De Erica no sabíamos mucho, era como si cada una hiciéramos nuestras vidas, sin recordar aquellos momentos que pasábamos, me encantaba tener nuevas amigas, pero las echaba de menos, extrañaba esos momentos con ellas, donde éramos solo niñas, creo que era momento de ir creciendo e ir tomando nuestros caminos, Sansa siempre pensé que le iría bien, cumpliría sus sueños, en eso estaba seguro y de Erica me preocupaba que tomará malas decisiones por las malas influencias, pero pienso que le irá bien, parece estar cómoda en su nuevo pueblo, en las clases, con nuevos amigos y pretendientes.