Parte 18

24.1K 2.1K 158
                                    


Hola, estoy muy, pero muy feliz!!!!!

Vuelve s girar la ruleta!!!!!!!

La mañana es muy calurosa, el sol brilla con majestad en los alrededores de la capilla a las afueras del el rancho el Retorno, cual esta alborotado por el gran acontecimiento que se llevara a cabo. La capilla no es que haya muchas personas la mayorías son trabajadores de los ranchos Villalobos y el Retorno, pero están muy alegres, por estar en ese acontecimiento.

El pasillo está decorado con flores que están sobre las bancas y unas grandes cadenas de cintas en varios colores, organizados de tal manera para darle la apariencia de un arco, de esta manera se decora la pequeña capilla, el arreglo es sencillo pero estaba cargado de muchas ilusiones. En la parte de enfrente de la puerta una parejita de hermosos niños vestidos de blanco y que sé miraban con ojos furiosos y se peleaban por la pequeña canastilla que llevaba los anillos, siendo la diversión de muchos y el contratiempo de otros.

Azucena trata por todos los medios de controlar a su hija Yalena que no se deja tomar de la mano de Adán Junior, que la mira muy molesto porque también es obligado por esa mujer pelirroja que él no conoce a que le de la mano a esa niñita llorona.

____ ¡No! ___ dijo el niño molesto ___ esa ñiña es fea____ vociferó enfadado porque lo obligaba a tomar la mano a la niña que tenía a su lado, una vez más.

___ Ven, mi amor _____ decía la joven pelirroja que esta al borde de la histeria ____ Yalena, amor, por favor, mira que Nany te está viendo.

Al mencionar la palabra Nany los dos niños miraron a la puerta por donde ella estaba de pie en silencio, con sus ojos cristalizados por el llanto.

____ Ven que si pueden cooperar___ dijo Azucena feliz por lograr que los dos niños se dieran las manos y comenzaran a caminar hacia el altar.

Nany miraba al hombre que estaba al frente de ella, lo veía radiante y vestía con un traje gris plata oscuro, le resaltaba el azul de sus ojos, su rostro irradiaba felicidad y no tuvo el valor de decir no, suspiro profundo y se dirigió a él con paso firme, tal vez el destino le diera una oportunidad de ser feliz al lado de ese maravilloso hombre, tal vez no la amaba, pero estaría dispuesta a ganarse su corazón.

Federico sentía como su corazón quería escapar de su pecho de la misma emoción que lo llenaba en ese instante. Sus ojos se concentraron en la joven que se acerca a él.

Su glorioso cuerpo llevaba un vestido blanca ceñido desde el talle hasta la parte baja de las caderas y de ahí se abría como un abanico, dándole forma de flor abierta en su mayor esplendor. Sus cabellos los traían recogido a un lado de su cabeza, coronado por un cerco de flores blancas y esta espectacular cabellera caía sobre unos de sus hombros y cubría uno de sus senos.

_____ "¡Dios como amo a esa mujer!" ___ pensó muy entusiasmado Federico y sonreía de oreja a oreja al verla tan bella, _____ "¡Y pensar que será solo mía!"

Ella suspiró nerviosa, y él así él lo percibió.

Los dos se miraron en un silencio sepulcral, él le extendió la mano y ella dejo caer la de ella sobre la de él. Él la apretó con firmeza, mas no la maltrato, ese gesto lleno de fortaleza a la joven temerosa.

Ninguno de los dos vio lo que los rodeaba en ese lugar, tampoco escucho lo que el hombre frente a ellos con sotana les hablaba, solo existían ellos dos en ese momento, se perdieron en sus miradas que brillaban con gran intensidad.

Dijeron sus votos casi de manera automáticas, palabras que repetían por que otros los iba guiando y se besaron con gran ternura y amor.

Cuando dijeron las palabras él novio puede besar a la novia, Federico se acercó con gran lentitud a Nany y la tomo por la cintura y la atrajo a la dureza de su cuerpo y sin dejar de mirarla a los ojos, le sonrió y le dijo.

El amargado.   Serie Salamina Nº 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora