Capítulo 1: Worlds Collide...

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- Octavia, te digo que estoy bien! No necesito andar de salidas a pubs, es que estoy un poco mayor para eso no te parece?

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- Octavia, te digo que estoy bien! No necesito andar de salidas a pubs, es que estoy un poco mayor para eso no te parece?

- Por Dios Lexa, escúchate por un instante, es que acaso estás en los sesenta? Bueno, si es así la verdad te mantienes en formol o en vez de ser oftalmóloga eres especialista en la vejes...? Lexa Jane Woods! tienes 32 años! qué demonios mujer?! Tienes que salir de la cueva, o enserio vas a parecer cavernicola!! Anímate, sólo seran un par de horas, Lincoln y yo queremos verte, prometemos acompañarte a tu casa asi no te pierdes... es que hace tanto no sales de allí que quizás necesites un GPS...

- Idiota! Mierda O.! Cómo demonios te digo que no...?! Esta bien, pero sólo un par de horas y no necesito que me acompañen, tampoco es que soy una hermitania y vivo encerrada en mi departamento. Por si lo olvidas voy a la clínica todos los dias de lunes a viernes, y salgo a correr por el Central Park todas las mañanas.

- Wow! la verdad toda una aventura tus salidas de la cueva. Pero no me quejaré más, nos vemos mañana a las 8 en la puerta del "Polis".

- Bien! sí, nos vemos pesada!!

- Buenas noches abuela...

- Vete a la mierda...

Lexa cortó la comunicación con su amiga de muchos años, Octavia Blake, con una sonrisa en el rostro. Era una noche fría de otoño en la ciudad de New York, pero Lexa sentía aun más frío en su interior.

Perdiéndose en la inmensidad de las luces de la ciudad, que contemplaba desde el gran ventanal, de su penthouse piso, en un edificio muy exclusivo en el corazón de Manhatan, sobre la quinta avenida.

La afamada Doctora Alexandría Woods lo tenía todo, una incalculable fortuna, ser una de las oftalmólogas más reconocidas no solo en los Estados Unidos, pero en el resto del mundo.

Un cuerpo de diosa al que trabajaba y cuidaba a diario, y que era el suspiro de cualquien mujer que cruzara sus enigmáticos ojos verdes, con los cuales atraía damas de todas las edades y estados civiles.

La Doctora Woods estaba a punto de patentar un nuevo tratamiento para la recuperación de la vista en ciertos casos, casi perdidos de ceguera, lo que pondría su nombre en las historicas páginas de la medicina, por cual estaba muy excitada, pero no por el reconocimiento, sino pensando en la cantidad de personas ciegas que podrían tener la posibilidad de volver a ver.

Pero no todo lo que brilla es oro, y ciertamente en su vida existía un gran vacio. El amor, ese sentimiento que se siente tan fuerte cuando te encuentra en la vida, tan poderoso, que nos hace perder la cabeza, y las hormonas corporales nos elevan al paraíso, y esa otra persona a nuestro lado se transforma en el todo.

El amor paso a ser algo inexistente en la vida dela Doctora Woods desde hacía cinco años atrás, cuando un accidente automovilístico cobró la vida de ése ser que lo era todo en su vida, su mejor amiga, su confesora del alma, su dueña sexual, su media naranja, su gran amor, su amada esposa Costia Wilder, una brillante profesora de literatura en la prestigiosa Universidad de Yale.

Angel de Luz [Completa]Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu