Capítulo 26: A ray of light

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Antes de entregarles este nuevo capítulo, el último que subiré este 2018, quiero agradecerles enormemente esos 🎉20K🎉 o 20.000 lecturas de esta historia! 😇👍🏼
Me llena de tanta alegría y no hace más que motivarme cada día a seguir escribiendo, y a tratar de mejorar en mis escritos, sobre todo en lo técnico. Asi que termino este 💥2018💥 más que feliz y agradecida con todos ustedes maravillosa gente, por tomarse el tiempo de leer mis historias, comentarlas, sentirlas, y votarlas!
Espero que disfruten de un muy positivo 🌟Año Nuevo 2019🌟 con mucho amor, paz, alegría y salud!❤️✌🏼🌏🕊✍🏻😃
San x

❤️¡¡¡¡MUCHAS GRACIAS!!!!❤️


Había llegado el día tan esperado, el día que Clarke iba a ser sometida a la operación que quizás le devolviera la vista nuevamente. Lexa había reservado ese día solo para estar con su amada artista. Desde que habían vuelto a unirse en cuerpo y alma, casi no se habían separado, felices amándose, creando un único y privado universo donde amabas se escapaban a disfrutar de lo que las unía, de lo que las hacía vivir, el más puro y simple amor.

Mientras Clarke era preparada por una enfermera, Lexa estaba a su lado en el quirófano tomando su mano,y con la otra acariciando su rostro, mientras sus suaves labios besaban su frente con dulzura. La artista estaba nerviosa, pero el amor y el dulce apoyo que la doctora Woods le brindaba a su lado, le transmitían la calma y esa confianza que necesitaba, a pesar de que Lexa interiormente era un manojo de nervios, como jamás lo había estado en su vida, pero no era para menos, aunque se las arreglaba bastante bien para disimularlo.

Fuera del quirófano el doctor Kane hablaba con la madre de Clarke, la doctora Griffin, quien deseaba estar al lado de su hija en tan importante día y momento de su vida. Cuando Clarke le presentó a su madre a la bella y famosa doctora Woods, Abby pudo percibir que entre su hija y la profesional había algo más que la simple relación doctora paciente. Pero se repitió mentalmente que no era el día para cuestionar, ni para usar su mente en especulaciones acerca de la vida privada de su hija, al tiempo que mantenía una breve conversación muy amena, con su muy joven colega quien junto al doctor Kane le explicaban en detalle, en términos muy médicos el procedimiento que llevarían a cabo en la intervención de Clarke.

A Lexa le temblaron bastante las piernas cuando Clarke le presentó a su madre, pero mantubo sin problemas su postura profesional y muy amable que solía mantener con sus colegas. Lexa encontró a la doctora Griffin una mujer muy bien mantenida para su edad, de una mente brillante, y con modales propios de una clase alta. Agradeció al mismo tiempo que no pudo ver en sus ojos alguna muestra de escrutinio profundo hacia su persona.

Aunque igualmente Lexa pudo notar que Abby las observaba con cierto interés cuando ella y Clarke intercambiaban alguna palabra, o cuando la joven doctora, sin darse cuenta, tomaba la mano de la artista con cariño. Lexa respetó la decisión de Clarke de no decirle acerca de su relación sentimental a su madre, al menos no aun. La artista le explicó que la doctora Abby Griffin era muy atada a la vieja escuela, en donde no tendría que existir ningun relacionamiento sentimental entre el paciente y el profesional médico. Saber de su íntimo relacionamiento, produciría un enorme rechazo la madree de la artista, y no deseaba que en un día tan especial, una discusión de puntos de vistas se desatara, y además tubiera un mal concepto de Lexa. Por suerte para Lexa, el encuentro con la madre de Clarke fue breve, y ella diría muy ameno, además de haber estado acompañada por el doctor Kane y la artista.

Ahora estaban allí en el quirófano, Clarke estaba recostada en la camilla, tratando de calmar sus nervios, sonriendo ante las caricias y besos que Lexa no dejaba de proporcionarle, ante la fascinadas miradas de las enfermeras y la anestecista, quienes preparaban a la paciente y los elementos para la operación. Obviamente podían notar el relacionamiento entre la doctora Woods y la paciente Griffin, pero nadie juzgó la situación, sino más bien disfrutaban viendo como la profesional le transmitía apoyo y mucho amor a la paciente, de esa manera tan tierna.

Angel de Luz [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora