Parte 7:

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Laura casi llego a la locura cuando se entero que su marido estaba hospitalizado y no podía visitarlo. Varias ocasiones llego frente a su habitación intentando entrar pero ni los médicos, enfermeros o la seguridad le dieron el paso.

Siempre que lo intentaba, la sacaban a rempujones y ella vociferaba a todo pulmón cualquier grosería contra ellos. También se molestaba cuando en reiteradas ocasiones trataba de comunicarse con Brendon y este colgaba la llamada. Algo había sucedido y ella no lo sabía. Eso la estaba matando lentamente, debía actuar rápidamente.

Mientras tanto Brendon, se instalo en un nuevo apartamento muy alejado de la ciudad. Tenía que estar solo y meditar bien que hacer y aunque ya contaba con una estrategia trazada, le estaba costando emprenderla.

Quince días después de la lectura del nuevo testamento, Brendon se aisló del mundo. Pocas veces revisaba su móvil y cuando así lo hacia los innumerables mensajes, llamadas de Laura, lo aturdían. En algunas ocasiones, leía algunos de los mensajes de la mujer de su padre pero se cansaba que siempre terminaban en insultos y groserías por su ausencia.

Al final tiraba su aparato a un lado de la cama y caía dormido.

Un mes completo paso solo en esa nueva estancia. Conocía a su padre y ese cambio de testamento, solo se debía a una razón: su padre sospechaba algo pero no estaba seguro si era su traición. Su estomago le dolía demasiado cada vez que recordaba cómo se tiraba a la mujer de su progenitor. El arrepentimiento era extremadamente cruel con los culpables.

Un día después de nadar y ejercitarse en el exclusivo gimnasio del nuevo apartamento, regreso a su piso y antes de emprender su camino a la ducha, se percato que su móvil vibraba en la cama.

Llego frente a este y reviso que nuevamente era Laura. Dejo que sonara hasta que dejo de hacer ruido. Inmediatamente, salto al buzón de mensajes y este apareció en la pantalla. Brendon tomo el móvil y lo leyó:

Amanda se encuentra completamente ensangrentada,

Creo que ha sufrido un aborto en su sexto mes de embarazo

Brendon apretó con fuerza el aparato, tanto que no sintió cuando su puño comenzó a temblarle. Muy en su interior, varias preguntas lo asaltaron: ¿Embarazo?, ¿Sangrado?, ¿Sexto mes de gestación?.

Se vistió como pudo, tomo la llave de su auto y corrió al estacionamiento. Laura podía ser la mujer más despreciable pero Amanda era diferente y en esos años, la quería como la hermana que nunca tuvo.

Manejo como loco por la autopista hasta llegar a su antigua casa. Toco con desesperación el timbre porque olvido su llave.

Laura abrió la puerta y trato de abrazarlo pero no lo permitió y corrió al interior de la casa: -¿DONDE ESTA AMANDA?-

-¿ESTA EN EL BAÑO?

Brendon corrió hacia el lugar indicado, al entrar se quedo de pie contemplando a su hermana tirada en el piso, llena de sangre.

-LLAMA A EMERGENCIAS DE INMEDIATO.-

Se tiro a un lado de su hermana tratando de reanimarla pero ella no respondía: -Amanda, contéstame por favor.-. Le rogaba

Laura los contemplaba apoyada en el marco de la puerta y después de varios minutos, comenzó a hablar: -ESE MALDITO DESGRACIADO, ES EL QUE LE HA HECHO TANTO DAÑO. LA EMBARAZO Y CUANDO INTENTE QUE SE HICIERA RESPONSABLE, HUYO DEL PAIS. MALDITO, DESGRACIADO, MATO A MI HIJA, SE APROVECHO DE ELLA Y MIRA COMO LA HA DEJADO-

Parte II: Dinero, Traición y VenganzaWhere stories live. Discover now