Deja Vu

19. «El crepúsculo»

¡Era inmensa su felicidad!

Se sentía tan bien... 

Aquella noche había soñado con un príncipe y una princesa que estaban amarrados por su añejo amor y que eran predestinados a estar juntos para toda la eternidad.

Toda ella estaba como en mucho tiempo no se sintió, y es que su ánimo era muy comprensible. No todos los días tu persona favorita te correspondía y priorizaba tu comodidad y tus deseos. Aunque, claro..., todo tenía un límite. 

Nunca se esperó la petición de Jungkook para verse en su habitación. Muy probablemente él no había visto lo serio del asunto porque ni siquiera hizo mucho esfuerzo para convencerla.

Por la madrugada de ese día, debido al shock de la experiencia, no se lo tomó muy a pecho, pero, conforme las horas pasaron, se enteró de cuán bochornosa era la situación para los dos.

Centrándose en el presente, enfocó su mente en escucharse por los altavoces. Sus amigas y ella estaban en el ensayo del concierto de su sunbaenim, Taeyang, en Japón, en el Hotto Motto Field Kobe. La ocasión era debida a que serían sus teloneras en un par de conciertos y, ella, además del resto de Blackpink, no quería hacer las cosas mal. Debían mostrar la misma calidad musical que hacía unas semanas atrás, durante su propio showcase.

Acabaron de ensayar y, despidiéndose de Youngbae, partieron rumbo al restaurante más cercano. Afortunadamente, llevaban buenas recomendaciones de un lugar no tan lejos del recinto y la comida tenía buena pinta.

—Chicas, comed —dijo Jisoo, cansada de tanto parloteo en la mesa mientras comían—. Como no comáis bien, mañana no estaréis buenas para el concierto.

—¡Chichoo mamá al ataque! —Lisa sonrió—. Pero si no es para tanto, unnie.

—¡Oye! ¿Acaso no sabes lo que pasa cuando no comes?

—¿Qué pasa cuando no como? —Chaeyoung intervino para hacerse la pensativa—. ¿Pues que tengo hambre horas después...?

Jisoo reprobó su aparente ignorancia sobre el tema.

—Pues estáis buenas las dos. No, Chaeng, lo que pasa cuando no comes es que tu metabolismo te ayuda a consumir energías que tienes almacenadas.

—Pues eso es algo bueno, ¿no? Por ello es que podemos pasar algunos ratos sin comer y no nos pasa nada.

—El problema es que esas energías no son inacabables, se obtienen estas de los alimentos que consumimos a diario. La comida es la energía que usamos para vivir, ¿lo pilláis? Entonces, si desgastamos esa energía de manera innecesaria, cambiamos de humor, nos volvemos unos ogros como Shrek porque no comemos y hacemos ¡uhhh!

Jennie pegó un salto cuando Jisoo se le echó con una expresión que dictaba "tengo ganas de molestar a cierta persona". Con las manos hechas garras a lo alto, Jisoo gruñó e hizo una mueca salvaje.