Entre el amor y la amistad (Amor de niños). (Sofia y Hugo)

El amor de Amber

Sofía apretó la carta contra su pecho y se dispuso a escribir una nueva.

Hugo

No sé qué le hizo pensar a Jade que yo estaba enamorada del señor Cedric ¡Es absurdo! Él para mí es un buen amigo, casi como un padre.
No te sigas mortificando por lo que pasó hace dos años. El orgullo fue más fuerte que nosotros. Aunque yo quería acercarme a ti, pero me lo impidió verte besar a Jade ¡Tu eras mi amor de la niñez!, Pero me costaba trabajo aceptarlo ya que eras mi mejor amigo. ¡Qué confesiones!, Solo espero que tu relación con Jade vaya mejor. Ella es muy feliz a tu lado.

Sofía.

Hugo estaba feliz de poder hablar con Sofía, aún no la había olvidado pero al parecer habían muchas cosas que no entendía.
Él no tenía ninguna relación con Jade, ellos eran solamente amigos. ¿Y aquel beso?, Solamente lo hizo porque perdió una apuesta ante ella ¡No podía creer que eso había arruinado todo!

El día del cumpleaños de los gemelos había llegado, en ese tiempo, las chicas al cumplir los 15 años podían comenzar a ser pretendidas e incluso casarse. Amber estaba ansiosa por volver a ver a su príncipe adorado.

Según la tradición de Encantia distintos jóvenes interesados en la dama tendrían que escribir su nombre en un papel y gracias a una serie de juegos se decidiría al ganador. Siempre y cuando la joven no hubiera escogido a alguien y tuviera deseos de ser pretendida.

Amber deslumbró a todos los invitados con un gran vestido rojo con bordados de oro. Su gemelo vestía un traje del mismo color y ambos abrieron el baile. Unos segundos después llegó el rey Roland a pedir la mano de su hija y Miranda tomó la de James. Sofía se encontraba feliz viendo cómo se deslizaban alrededor del salón.
Cédric ofreció su mano a Sofía y así toda la familia real de Encantia se encontraba bailando en la pista.

De un momento a otro se abrieron las puertas dando paso a la familia real de Albuquerque. Amber sonrió emocionada y se paró lo más derecha posible.

~Deseamos felicitaciones a los príncipes. Habló Garrick inclinándose ante ellos mientras sus dos hijos se encontraban detrás de él.

La vista de Amber se dirigió a Axel.

El joven ya contaba con 18 años y se preparába para asumir la corona de Albuquerque. Era el orgullo de su padre y aún mas interesante y galante que Hugo.

~Es un placer que hayan aceptado nuestra invitación. Agradeció Roland estrechando la mano de Garrick con euforia.

Axel y Hugo caminaron hasta el salón y Amber agachó la cabeza, ella esperaba que al verla el príncipe la invitará a bailar.

Sofía se acercó rápidamente a su hermana y está limpió sus ojos con un pañuelo.

~¡Eres la más hermosa Amber! En cualquier momento él te invitará a bailar, ¡estoy segura!

~Te lo agradezco Sofía.

Unos minutos más tarde Amber aceptó la invitación de Dereck y a propósito giró repetidas veces frente a Axel sin despertar su interés.
¡Estaba cansada!, Tenía ganas de gritarle a la cara cuanto quería que la invitará a bailar, pero eso solo haría notar lo ansiosa que se encontraba.

Sofía al no aguantar más se acercó a Hugo.

~Por favor pídele a Axel que baile con Amber. Ella está ansiosa por que la invite.

Hugo soltó una sonrisa de complicidad para después volver con la mirada baja.

~Axel dijo que se lo pidieras tú, si tanto te interesa. Sofía frunció el ceño pero la felicidad de su hermana era mayor que su orgullo.

~Príncipe Axel ¿Podría invitar a mi hermana a bailar? Preguntó intentando ser lo más educada posible.

~No lo sé, ella ni siquiera me interesa. Y tú ¿Cuantos años tienes?

~Cumpliré 15, ¡Ahora podría hacerlo!, ella lleva esperando por este momento toda la semana.

Axel soltó una risa burlona dirigiéndose hacia donde se encontraba Amber.

La princesa sonrió al verlo inclinado frente a ella. Enseguida acepto su invitación y ambos giraron alrededor del salón, los ojos de la rubia no dejaban de brillar perdiéndose en la mirada de su príncipe soñado.

Al terminar la noche Amber decidió que no se harían los juegos, puesto que ella ya estaba enamorada de alguien y esperaría una propuesta de dicho príncipe.
Todos aplaudieron y Axel giró la cabeza ante las burlas de su hermano.

James pasó toda la noche comiendo los distintos bocadillos que se sirvieron. Como el príncipe no invitaba a nadie a bailar las jóvenes se encontraban bastante tensas. Sofía no podía evitar reírse de la actitud de sus hermanos. Mientras que Amber se sentía la reina del lugar, James pasaba desapercibido.

~Sofia, tenemos que aclarar muchas cosas. Por el momento descansa y prepárate para la competencia de mañana.

~¡Si Hugo!, ¿Te parece si practicamos una nueva jugada?

~Claro que si Sofía, te veo mañana.

El rey Garrick se inclinó hacia la princesa y no pudo evitar acariciar su mejilla, era una niña muy dulce y le tenía estima, no solo porque había ayudado a cambiar a su hijo sino por la bondad y alegría que la caracterizaban.
Posteriormente Axel besó su mano haciéndole un guiño de ojo, Sofía recordó aquella vez que Hugo hizo lo mismo y no pudo evitar soltar una risa.
Amber miró a su hermana con extrañeza y corrió a encerrarse a su habitación.

~Amber... ¿Estas bien?

~ Vete Sofía, no quiero ver a nadie.

~¿Qué te pasa? Axel bailó contigo toda la noche.

~Solo porque tú se lo pediste, yo ni siquiera le interesó.

~¿Espera, que?

~Dijo que solo lo hacía por ti.... Porque le dabas lástima.

Sofía apretó los puños con rabia. Aunque era el hermano de Hugo, era un patán, arrogante y ¡Tendría que escucharla!

~Amber déjame entrar y podremos hablar.

La rubia abrió la puerta y se lanzó a los brazos de su hermana.

~Yo lo amo y no quiero a nadie más, pero él es un chico mayor, quizás por eso no me toma enserio, es posible que él quiera a alguien como Astrid, una princesa de su edad y con ansias de gobernar.

~¡Amber tu eres una joya! Él se dará cuenta de eso muy pronto ¡Solo espera!

~¿Tu crees Sofía?

~Yo estoy segura Amber.