Entre el amor y la amistad (Amor de niños). (Sofia y Hugo)

El dolor del amor

Hugo bajó la mirada y se retiró a su habitación. ¡Ni siquiera entendía lo que estaba pasando! Se convertirá en padre a los 19 años y sentía que no tenía la madurez necesaria para afrontarlo. Un bebé cambiaría su vida, sus planes, ¡Todo!

~¡Nadie debe saber sobre esto! Haremos la boda lo antes posible, si dejamos que el tiempo corra el embarazo comenzará a notarse. Habló Garrick jalando a su hijo.

Jade sonrió feliz y caminó detrás de Hugo.

~Te agradezco tanto lo que haces por mí y... por nuestro hijo, verás que seremos muy felices.

~Jade... Yo prometí estar a tu lado y protegerte, realmente espero que esto sea verdad, porque si es otro de tus planes ¡Jamás te perdonaré! Además quiero que sepas que no dejaré de amar a Sofía, ¡ella nunca se borrará de mi corazón! Querré al bebé pero jamás podré llegar a amarte.

~Hugo... No me digas eso. Sollozó en silencio.

~Es lo que te mereces después de conseguirme a la fuerza ¿No te sientes mal por causar la desgracia a tu amiga?, Sofía jamás hubiera actuado de esa forma. Apesar de todo ella nunca podrá odiarte ¡Ella es una verdadera mujer y no vive de engaños!

~Yo nunca te engañe... Gritó golpeando su pecho.

~¡Lo hiciste!, estoy seguro de que vertiste algo en la bebida y aprovechaste la situación para llevarme a tu casa. Eres tan manipuladora que ni siquiera puedo mirarte a los ojos sin sentir lástima.

El rey Garrick se presentó a Encantia con la mirada baja. Tenía pena de hablar con el rey Roland y la pequeña Sofía, pero lo haría con tal de mantener la buena relación que tenía con el reino.

~Rey Garrick ¡Qué gusto verlo! ¿Viene Hugo con usted? Prometió escribirme pero aún no lo hace. Habló Sofía corriendo hasta el hombre.

El rey miró a la jovén con tristeza y acarició su mejilla. Sofía se veía tan enamorada que le costaba trabajo poder hilar una oración.

~Sofia... Debemos hablar, pasaré a ver a tu padre. Espérame en la entrada del castillo...tengo que decirte algo delicado.

Sofía asintió y enseguida sintió que un sudor frío la recorría.

~¿Puedo pasar? Exclamó el rey entrando al estudio.

~Garrick ¿Qué te trae por aquí?

~Sabes, pasó algo inesperado y tendremos que cancelar el compromiso entre Sofía y Hugo.

~¿Pero qué pasó? Sea lo que sea podemos arreglarlo.

~No es posible, mi hijo me ha deshonrado. A cambio he venido a ofrecerte la mano de mi primogénito para alguna de tus hijas, es mucho mejor opción que Hugo, la que se case con él podra convertirse en reina de Albuquerque.

~No es la corona o la riqueza, es el amor, Sofía jamás aceptaría casarse con el hermano de su ex prometido, en cuanto a Amber; ella no lleva buena relación con el príncipe Axel.

~Perdóname por todo Roland, lo que menos quiero es arruinar nuestra amistad. Aún no puedo decirte lo que pasó, pero estoy salvando a Sofía de una vergüenza pública.

~¡Esto no es sencillo! No sé cómo se lo diré... Ya es una humillación que hayan cancelado el matrimonio.

~Yo hablaré con Sofía y le explicaré todo... Esto no fue mi intención, lo que más añoraba era que Sofía se convirtiera en mi hija.

El rey salió rápidamente y se encontró a la princesa recargada sobre uno de los pilares.

~Hija... Te ves pálida, ¿Estás bien?

~Lo estaré cuando me diga lo que pasa, temo que le haya ocurrido algo malo a Hugo.

~Enrealidad así fue, pero él está bien si es eso lo que te preocupa. Quiero que me digas algo, ¿Recuerdas que Hugo desaparecio enmedio de la fiesta de compromiso?

~Claro que si su majestad, pero él se encontraba con Dereck esa noche.

~¡Asi que ignoras lo que ocurrió!
Sofía sintió que su estómago se encogió y supo que era momento de hablar con la verdad

~Crei que usted no lo sabía... Solo trataba de proteger a Hugo.

~Él no merece tu protección, estoy seguro que después de hablar contigo jamás querrás volver a verlo.

~Me está asustando... ¿Qué pasó?

~Jade está embarazada, ocurrió en la noche de tu compromiso.

Sofía sintió como si le clavaran una estaca en el pecho.

~¡No puede ser! Hugo dijo que no había pasado nada, ¡él no lo recuerda!

~Que no lo recuerde no quita la posibilidad... ¿Sabes algo más que avale a Jade?

Sofía recordó aquella mañana en la que descubrió a su prometido en cama de su amiga. La princesa bajó la cabeza y le contó todo al rey.

~¿Y aún así lo perdonaste?

~Yo lo amo... Jamás lo olvidaré... Pero tendré que hacerlo, él tendrá una familia con otra mujer.

~Mi niña, siento mucho todo, yo no quería que esto pasará...

~No es culpa suya... Jade ganó, dijo que arruinaría mi vida y lo hizo... No sé si podré reponerme de esto.

~Esa joven no me da buena espina, pero debo cuidar de ella, tiene en sus entrañas a un miembro de mi familia.

~Lo comprendo, le deseo una feliz vida a usted y a su familia... Ahora debo ir a mí habitación, mañana visitaré el pueblo.

~Hasta pronto princesa Sofia...

Sofía fingió que todo estaba bien, pero al llegar a su habitación se dejó caer sobre la cama y lloró hasta quedarse sin lágrimas, lo único que le quedaba de Hugo era un viejo retrato que él le había regalado y que la acompañaría por el resto de su vida.

Hugo se encontraba redactando una carta para Sofía cuando Axel entró a la habitación.

~¿A quién le escribes? Espero que no sea a Sofía, papá ya debió darle la noticia, después de lo que hiciste dudo que quiera volver a saber de ti.

~Yo no hice nada Axel... Sé que soy inocente.

~Las pruebas están en tu contra. Sí en verdad lo fueras, no hubieras deshonrado a la familia como lo hiciste.

~¿Vienes a burlarte de mi? Porque si es así ya puedes marcharte. ¿Te sientes feliz porque mi padre te casará con Sofía? ¡Ella jamás podrá quererte!

~La cuidaría mejor que tú, pero no me casare con ella, estoy encaprichado con Amber y recuperaré su amor a como dé lugar.