Otra oportunidad

Capítulo 6

Vi a Cheshire correr con todas sus fuerzas al mismo tiempo que intentaba cubrir a Emma de la llovizna con su chamarra, cuando salió del bosque se dirigió hacia una pequeña farmacia donde entró gritando que lo auxiliaran, pateó la puerta de la entrada obteniendo la completa atención de todos los presentes, estaban por sacarlo cuando vieron a mi hermana, a su alrededor llegaron enfermeras y por suerte una doctora que seguía ahí, sin esperar un segundo más tomó a mi hermana y le brindó la ayuda médica necesaria, tal vez el lugar era pequeño, pero estaba bien equipado, ese detalle me relajó bastante ya que el hospital más cercano estaba como a una hora de camino en coche, él iba a pie, era imposible que llegara en poco tiempo.

Cheshire se dejó caer sobre unas sillas, estaba bastante nervioso, tronaba sus dedos y no dejaba de golpear el piso con sus pies, veía su reloj e intentaba distraerse solo para que a los cinco minutos se levantara y comenzara a caminar en círculos, estoy seguro que hubiera estado haciendo lo mismo sino me hubiera quedado hipnotizado viendo sus reacciones, era bastante curioso el sentimiento de trance que me había embargado.

Dejé a Cheshire en la soledad de la sala de espera y entré a la zona donde estaba mi hermanita, su respiración era lenta, su cabeza vendada, esa imagen me rompía el corazón, quise sujetar su mano, pero sin importar lo mucho que lo deseara, mi mano la atravesaba, lo único que me distraía en mis intentos era el ver el brillo de su marca. Pasaron unas horas hasta que mi hermana despertó, sus ojos se abrieron lentamente, mi respiración se normalizó al verla reaccionando, aunque mi ansiedad seguía latente, intentó reincorporarse, pero el dolor se lo impidió, la doctora hizo algunas revisiones, le preguntó cosas sencillas y le indicó que se quedara recostada, la tranquilizó y le prometió que regresaría para hacerle otras preguntas, que ahora debía descansar, y con esas palabras había vuelto a cerrar sus ojos.

Sentía que estaba por volverme loco al verla así, normalmente era yo quien terminaba en el hospital no ella, las circunstancias me torturaban aún más que cualquier dolor que hubiera sentido cuando estaba vivo, aunque una parte de mí le agradecía a todo que Cheshire estuviera ahí para salvarla. Después de que mi hermana hablara con la doctora, fue el turno de Cheshire, al pobre lo interrogó uno de los policías de la farmacia por varios minutos, no podía creer que en una circunstancia así esperaban lo peor por su apariencia, tal vez no se veía como el estudiante perfecto, tal vez las perforaciones, tatuajes y vestimenta le daban un aspecto amenazador, pero por el simple hecho de haber rescatado a mi hermana se veía como un superhéroe ante mis ojos, cuando terminaron le pidieron algunos datos e incluso un oficial se mantuvo cerca de él cuando se acercó a la doctora.

-Mmm... disculpe que la moleste, pero ¿cómo sigue la chiquilla? –preguntó mientras tronaba sus dedos para calmar su preocupación.

-Será mejor que se quede en observación toda la noche, los golpes no fueron graves por suerte por lo que esperamos que su recuperación sea rápida – explicaba la doctora mientras el moreno asintió - ¿Sabe algo de la familia de la niña? ¿algún conocido o forma de contactarlos?

-No, lo siento... cuando estaba en el bosque solo estaba ella, al parecer se había caído cuando se desgajó el suelo –se quedó pensando unos minutos –haré algunas rondas para ver si encuentro a su familia.

Quise ayudar a Cheshire a dar con mi familia, aunque claro siendo invisible era prácticamente imposible, caminamos por varias horas, no le importó que la llovizna se transformara en un fuerte aguacero, tocó algunas puertas, paró a personas, nadie lo ayudaba y los pocos que lo hacían no tenían idea de cómo ayudarlo, el pobre chico estaba completamente empapado, dio varias vueltas por las diferentes manzanas, pero nunca se le ocurrió buscar en mi calle. Al ver que ya era muy noche no le quedó otra opción más que ir a su casa, eso me enfureció hasta que recordé la situación de Alice, era muy arriesgado el que me apareciera y le pidiera ayuda, lo más probable es que le causara una crisis o algo parecido, sin embargo, pensé en dejarle el teléfono entre los alimentos que le había dejado mi madre, aunque una parte de mí pensaba en que sería mejor evitarle más problemas a la joven de ojos verdes y por ende a Cheshire, después de todo debería estar agradecido de que la ayudaran. Sería mejor que tratara de contactar a mi madre, darle el número de la farmacia y esperar que conectara los puntos al ver que no apareciera.