Capítulo 3

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Mi corazón bombeando en mi pecho subiendo con ligereza casi hasta mi garganta, Liam tironeaba mi muñeca mientras mis pasos se hacían cada vez más pesados por el tremendo esfuerzo de correr con Hannah en brazos por las calles de Londres.

Aliento caliente exhalado por el moreno que sonreía plácidamente justo al llegar a la piscina privada.

Gotas cristalinas alrededor de su frente que rápidamente fueron apartadas  por un frío helado. Liam sostuvo la cremallera de su abrigo abrochándola rápidamente para evitar que el frío se colara por su pecho, por mi parte yo también abroché  el abrigo rosa de la pequeña mientras la acunaba en mi hombro.

Sentí mis pómulos congelarse rápidamente por cada oleada de viento, deseé que Liam abriera pronto la puerta para poder entrar dentro del pabellón.

Arrugué una y otra vez mi nariz para evitar que esta se congelase mientras entraba detrás del moreno.

Me perdí por unos instantes mirando la piscina, bastante profunda y grande, de campeonato. Dentro del establecimiento no corría frío, al contrario, hacía calor para descongelar nuestros fríos huesos.

-Ten- Tomé la tela azul en mis manos- A la izquierda están los servicios, puedes dejármela mientras te cambias- Asentí haciendo que mis brazos con esfuerzo le dieran a Hannah.-¿Cómo se llama?

-Hannah- Sonreí

-Es preciosa- Asentí sonriente, mientras con pasos decididos busqué los servicios.

Agradecí una y otra vez haberme depilado por completo e introduje mi cuerpo en la tela flexible y pequeña, ajustando los tirantes a mis hombros.

-¿Me das un gorro?

-¿Puedes nadar sin él? Ahora mismo no encuentro ninguno- Me encogí de hombros colocándome en el puesto de salida.

-¿Lista?

-S-sí- Tartamudeé temblorosa, hacía mucho tiempo que mi piel no sentía el agua y mis fosas nasales no inhalaban el olor a cloro.

Me lancé al agua, movimientos ágiles de mis manos que hicieron que como una sirena llegara rápidamente de un lado a otro, me sentí orgullosa de mi misma al comprobar el poco tiempo que había tardado en hacer ese recorrido.

-Buen tiempo-Sonreí complacida- Pero te falta técnica.

-¿Qué?

-Tienes que coordinar mejor los brazos e intentar hacerlo con más elegancia- Achiné mis ojos y entreabrí mis labios, debía admitir que era algo orgullosa y su comentario no me era agradable.

-¿Has visto mi tiempo?

-Umh… sí lo he hecho, ¿Cuál es el problema?

-Sinceramente no sé a qué viene eso de que me falta técnica- El chico rodó los ojos con indiferencia y caminó apartando su mirada de la mía.

Salí de la piscina ágilmente mientras perseguía sus pasos.

-Verás- Continué hablando- Llevo practicando natación desde que era una niña y…

-Y nunca te han dicho que no eres la única en el equipo-Me sorprendí ante aquella interrupción- Roch, estás  dentro de mi equipo pero quiero que sepas que no serás la princesita, la natación no es solo trabajo individual es de equipo- Se veía pasión atravesando sus palabras, Liam hablaba con total sinceridad sobre su punto de vista y lo que significaba participar en su equipo y yo no negaría que tenía razón.

-Eh… de acuerdo, tú eres el entrenador…

-Exacto.

-Liam- Asintió volviendo hacia mi anatomía mojada con una toalla en sus manos.

For the love of a daughter. Liam Payne fanfic (Mayo de 2014)Where stories live. Discover now