Anahim

Gino's

Gino es alguien que sabe hacer negocios, incluso más que nosotros. Tres años atrás se deicidio a convertir un albergue de camioneros en un hotel decente. Es decir, un lugar decente para Gerlach. Seguramente un neoyorquino hubiera elegido pasar una noche en Nixon. Lo cierto es que el lugar con sus siete habitaciones dobles había albergado a los organizadores del Black Rock Desert Burning man festival. Él lo cuenta con orgullo a todos los extraños visitantes. 

En la planta baja funcionaba una taberna atendida por el mismo Gino. En el centro había tres mesas de pool casi siempre ocupadas por los camioneros. En las paredes entre los blancos de dardo había fotos enmarcadas con personalidades que habían pasado por Gerlach. En una foto Gino sonreía acompañado con el gobernador, en otra hacia lo mismo con un ex vicepresidente. Por su improvisada galería de la fama desfilaban políticos, actores de hollywood y empresarios. Entre ellos el señor Rogers, a quien Gino admiraba. Un marco vació me sorprendió en una esquina del local.

El dueño del hospedaje nos preguntó cuantos días íbamos a estar ahí. Lucius insistió en que nos quedáramos por dos noches, a pesar de lo innecesario que todo esto me resultaba. Ya no respondía a mis señales. La primera noche pensé seriamente en terminar nuestra sociedad. No podía seguir perdiendo tiempo y dinero por algo que se estaba convirtiendo en un capricho. "Lucius, Tessa no va a volver" Era todo lo que debía decirle. Cualquier otra cosa sería inútil. Me revolví con estas ideas en mi cama. Me levante y camine por los pasillos del albergue como un zombie. Fui a la planta baja y para mi sorpresa me encontré a Gino bebiendo whisky. El tampoco podía dormir. Intente que me hablara de sus problemas pero él no era "esa clase de personas".