Capítulo 15

70 24 10
                                    

Me alegro cuando leo el nombre de Axel en el papel de mi horario porque, además de ser mi amigo, es uno de los mejores luchadores de aquí y, entre su fuerza y mi puntería, estoy segura de que haremos una pareja de combate muy efectiva.

Me cambio y dejo a Raven y a Nix la tarea más difícil que pueden tener en este lugar: despertar a Fin.

Al salir de la habitación, no me dirijo al comedor como todos los días sino que voy en dirección a la habitación de Axel para ver si ya sabe que somos compañeros. 

Y al parecer ya lo sabe. Pero creo no le gusta la idea.

Le veo desde lejos pero el no me ve a mi, está demasiado concentrado en la conversación que mantiene con Charlotte.

Sé que está enfadado pero todavía no sé por qué, así que antes de que me vean, me escondo detrás de la litera más cercana a la de Axel.

-Por favor tienes que cambiarme de pareja.

Las palabras que salen de la boca de Axel me duelen, pensaba que estaría contento con la idea de luchar juntos pero al parecer no le hace gracia.

-¿Por qué iba a hacerlo? Deberías de estar satisfecho, Alex es una de las mejores con el cuchillo y la he entrenado personalmente y tengo que decir que mejora cada día.

Hay algo que no entiendo, algo se me está escapando y no sé que es. Axel está demasiado nervioso y hasta parece angustiado y por otro lado esta Charlotte, que parece que le divierte su nerviosismo.

Parece como si Charlotte hubiera encontrado algo raro en Axel, parece que sabe algo de él pero no lo quiere decir hasta que el lo admita.

-Lo sé, pero no es buena idea.

-¿Por qué?

Y ahí esta. Después de varios meses vuelvo a ver esa sonrisa siniestra de Charlotte que no me gusta nada. Es una sonrisa de superioridad. Ella se cree mejor que nosotros cuando sabe nuestros secretos pero después pide ayuda porque no es muy simpática con los demás.

-No creo que formemos un buen equipo. Alex no esta preparada solo sabe lanzar cuchillos medianamente bien y sabe pegar pero en cuanto vea todo lo que hay fuera no podrá con ello, no podrá soportarlo.

-¿Qué crees que no  podrá soportar?

-Matar a una persona y ver como muere sabiendo que ella le ha quitado la vida. No podrá soportarlo

-Lo podrá soportar, como todos.

-Aunque creo que no lo verá  -empieza a decir Axel- porque no le dará tiempo a sacar el cuchillo. La matarán antes de que se dé cuenta.

Esas palabras son como los cuchillos que estoy acostumbrada a coger; de doble filo. Sus palabras están llenas de veneno que ha metido en mi con una puñalada por la espalda.

Mi cuerpo reacciona y mis piernas dan un paso adelante dejando atrás mi escondite. Por suerte mi cara no interpreta todo el dolor que llevo ahora.

Charlotte es la primera que me ve y Axel ,al ver la cara de esta, se da la vuelta para mirarme pero no por mucho tiempo. 

El idiota ni siquiera me puede mirar a la cara.

No sé que decir pero tampoco voy a salir corriendo hacia mi cama a llorar, no soy como creen.

-No paréis la conversación por mi- empiezo a decir- vamos Axel sigue hablando sobre mi, sigue diciendo que soy un estorbo para un gran luchador como tu.

-Yo no he dicho eso.

-Si que lo has dicho- respondo rápido.- Ni siquiera puedes mirarme a la cara.

Axel me mira y en su rostro puedo percibir el arrepentimiento, pero sé que se arrepiente de que yo lo haya oído y no de haberlo dicho por eso no me da ninguna lástima.

-Si no quieres luchar conmigo no me importa. Sé que piensas que no puedo cuidarme sola  pero la verdad es que sí porque no necesito que nadie me ayude. No necesito tu ayuda.

Me quedo callada sin moverme esperando una respuesta que no llega nunca. Por eso Charlotte rompe en silencio.

-Por lo que veo ninguno de los dos quiere trabajar con el otro. Pues lo siento pero a mi me da igual, estáis aquí para cumplir una misión no para hacer nuevos amiguitos así que hacer lo que os he mandado y no protestéis por eso o si no quedaréis fuera, ¿entendido?

Los dos asentimos con la cabeza. Charlotte nos ha echado la bronca como si fuéramos niños pequeños y tiene razón en todo lo que ha dicho, no estamos aquí para pelearnos entre nosotros, estamos aquí para cumplir un objetivo común que nos debería unir y no al contrario. 

Por eso me avergüenzo de mi comportamiento.

Charlotte se va y nos deja solos y, aunque todavía estoy enfadada y sigo teniendo la herida que me ha hecho con sus palabras abierta, le miro y comienzo a hablar.

-Supongo que no nos queda otra opción.

-Supongo que no.- murmura. Sigue avergonzado.

-Deberíamos ir a entrenar.

El solo asiente. Nos dirigimos al patio para entrenar sin hablar y cuando llegamos vemos como las demás parejas se adaptan poco a poco. Cada uno de la pareja tiene una especialidad muy distinta a a la de su compañero y eso hace que los dos se complementen, como dijo en su discurso Charlotte. Pero no sé como nos vamos a complementar Axel y yo, ni si quiera nos hablamos.

-¿Por qué no empezamos con algo sencillo- dice Axel.

-Vale. 

Entonces se me ocurre una idea para descargar toda la ira que tengo ahora mismo hacía Axel.

-¿Empezamos con un combate cuerpo a cuerpo?

Es lo mejor que se me ocurre para pegar a Axel y que los demás no nos separen. Aunque hay un pequeño inconveniente, es una de sus especialidades pero ¿qué cosa no se le da bien a Axel? Puede que los cuchillos sean mi especialidad pero no voy a clavar le uno solo porque esté enfadada.

-¿Estas segura?

-Sí, enséñame todo lo que sepas aunque se muchas cosas, Charlotte es una gran entrenadora.

-Seguro que no te ha enseñado ni la mitad de cosas que yo se hacer.

Axel sonríe como si hace unos minutos no hubiera pasado nada y eso me enfada aún más. Yo no olvido fácilmente y menos cuando alguien dice que soy un estorbo.

-Que luchemos juntos no significa que seamos amigos.



La ResistenciaWhere stories live. Discover now