Capitulo 6

1.2K 60 0
                                    

(Futuro)
POV Flor
—No sé que estoy haciendo. ¿Qué hago aquí? No he encontrado nada y tampoco yo aporto nada. Se acabó. Pienso que se acabó. No sé qué hago aquí... debería estar con ella.

(Pasado)
POV Jazmín
Los días, las semanas, todo iba volando. Pero así es la escuela. Hoy es tu primer día y mañana ya estás en tus primeras pruebas.
Me encantaba estar con mis amigos y hacer estupideces juntos, pero, estos últimos días quien tenía mí total atención no era ellos. Había un par de ojos color cafe que no había visto ya hace unos días y no estoy segura de porqué, pero sentía una gran necesidad de mirarlos.
Había visto a Flor algunas veces por los pasillos, pero cada vez que pretendía acercarme o Carla o Trini o quien fuera me interrumpían o ella solo me miraba y salía corriendo del lugar. No entendía nada de lo que pasaba. Yo solo quería acercarme y ella solo huía. ¿Se habrá enterado?

(Presente)
POV Jazmín
-Bip.......Bip…Bip... ¿Hola?
—Hola amm ¿Señora Rachel Marín?
—Si, ella habla.
—Hola ¿Qué tal señora Marín? Habla Jazmín Del Rio. Hable con usted hace  algunas semanas con respecto al lanzamiento de un libro.
—Ohhhh, pero claro, Jazmín querida ¿Cómo estás?
—Muy bien, gracias. Solo llamaba para ver si ya podría decirme que día será la cita con la imprenta.
—Claro que si quería... lo anote en algún lugar por aquí. ¿ya estás en Nueva York?
—Ya señora, llegue el sábado. Tengo que atender unos asuntos de trabajo por aquí así que planee aprovechar el viaje.
—Oh, pero claro, mira aquí está. Hmm martes... 11 se septiembre. Y como él Lic. Allen viajara ese mismo día a las 2 de la tarde pidió que fuera temprano. A las 7 am. Todos están muy emocionados por su libro Srita. Del Rio. No puedo prometerle nada, pero “Encuentros Imprevistos” para mí, tiene un gran futuro. La trama es maravillosa.
—Me alaga demasiado que usted opine eso señora Marín. Y no, no hay ningún
problema con él horario. Nos vemos en una semana, se lo agradezco muchísimo.
—De que querida, si algo llegara a pasar yo misma te informare. Hasta luego.
Hacia tanto que no me sentía tan feliz. Mis palabras serian multiplicadas en papel y repartidas por él país, sé que solo se repartirá en Nueva York o en USA, pero tengo la sensación de que llegará a Buenos Aires, a casa, después quien sabe, quizás por él mundo. Estaba tan emocionada.
Pero aún falta para eso y nos espera una semana agitada. Así que tomé una ducha, me vestí y salí con Elena en busca de sus primeras opciones de departamento.
—Quiero algo acogedor, pero tampoco un lugar donde no pueda tener mí espacio. Algo fresco, pero no donde me muera de frío. Algo que...
—Elena ¿te das cuenta de que pides demasiado? ¿Por qué no dejas esta idea loca y mejor mandas a hacer tu propio departamento? —Dije burlándome de sus ideas.
—JAJA eres tan graciosita.
—Aprendí de vos.
—Pues aprendiste mal. —Dijo mientras me hacía cosquillas en el estómago y yo reía. —Ya en serio, sé que sonare exigente, pero quiero algo... perfecto. Lucy lo vale.
—¿En qué momento te me viniste abajo por Lucy, ¿eh?
—En él mismo momento en que tú te enamoraste tan enfermizamente de Flor.
—Le di un golpe con él codo. —Ahh ¿auch?
—Salud...
—Ese es “achu” estúpida. Y bueno dime... ¿Cuándo es la junta para la publicación de tu libro?
—El siguiente martes en la mañana. —Dije emocionada.
—¡Felicidades! Bueno... sí nos apuramos estos días podría llamar a la aerolínea y regresar el miércoles y ambas le damos una sorpresa a nuestras chicas. —Dijo con una enorme sonrisa. Siempre le había respetado eso a Elena, su sonrisa. Su enorme carisma. Viejos amigos se preguntaban aún ahora él por qué jamás había pasado nada entre nosotras. Pero creo que ella y yo siempre estuvimos destinadas y pre dispuestas a no ser más que amigas, o tal vez sí.
Hermanas.
—Me parece increíble tu idea Elena. ¡Mira! Ahí están vendiendo uno... vamos.

(Pasado)
POV Jaz
Estaba en clase de historia y él aburrimiento estaba matándome. Necesitaba salir  de ahí ahora. Levante la mano y pedí permiso para salir al baño. Por suerte me lo dieron y salí
casi corriendo del aula.
Llegué disparada y lo primero que hice fue lavarme la cara y recostarme sobre él
lava manos. Empecé a tararear una canción cuando sentí que alguien estaba atrás de mí. Así que  me voltee y me encontré con los ojos cafés más hermosos que alguien pudiera tener tratando de  salir del baño con cautela.
—Flor... yo... no sabía que estabas aquí. —Solo me miro. —¿A dónde vas?
—Yo... ammm tengo que regresar a clase.
La detuve del brazo antes de que saliera y la encaré.
—Hey Jazmín... ¿Qué te pasa?
—¿Puedo preguntar lo mismo? —Dije algo molesta.
—¿De qué estás hablando?
—Del hecho de que tengo semanas buscándote y tu solo me ignoras, ¿Qué pasa
¿Flor? ¿Hice algo mal acaso? Hasta donde yo recuerdo no fue así ¿Por qué estas evitándome?
—Solo aléjate Jazmín... —No podía creerlo.
—¿Qué? ¿Por qué?
—No eres tú ¿sí?
—Entonces ¿Qué es Flor? —Sentía que mis ojos se humedecían de a poco y no entendía por qué.
—Tu y yo... no podemos ser amigas. Olvídalo. —Dijo zafándose de mí y salió
corriendo del baño. Yo estaba en shock, no entendía nada. ¿Por qué ese cambio tan repentino?
Siempre fue tan agradable. A mí me agradaba. ¿Por qué ahora me pedía que me alejara? Dios...
¿seré tan obvia? ¿Lo sabrá? ¿Se sentirá incomoda? No entiendo absolutamente nada.

POV Flor
No quería ser tan mala con Jazmín, pero no podía estar cerca de ella ni de sus  amigos. No me arriesgaría. No otra vez. Ella no tenía idea de lo que pasaba y así era mejor, no
quería tener problemas con ellos, no de nuevo. Iba camino de regreso a mí salón cuando sentí  que alguien me empujo y me pego contra los casilleros.
—¿Cómo estas novata? —Dijo él chico del cabello castaño. —¿Qué tienes hoy para
nosotros? —Todos se rieron.
—No tengo nada, Josh, déjame tranquila. —Intente irme de sus brazos, pero él fácilmente me empujo de nuevo contra los casilleros.
—Woah woah woah niñita ¿A dónde vas? —Dijo él chico rubio. —Si porque si debes
de tener algo para nosotros.
—Saca él dinero ahora por las buenas linda. —Dijo un chico con risos castaños.
—Ya les dije por enésima vez que no tengo nada. Él almuerzo paso, no traigo dinero, déjenme irme. Ya, por favor.
Entonces Josh me tiro contra él piso y otro de ellos me echo encima una lata de
salsa de tomate. Él olor era muy fuerte y mi ropa estaba arruinada. Josh se agacho para quedar a mí altura.
—Por eso, pequeña novata, debes recordar siempre traer extra. Vámonos. —Dijo y
todos se echaron a reír mientras se iban dejándome sola.
Yo también me levanté y me fui, no podía seguir ahí. Pero tendría que esperar
hasta las 3 para regresar a casa así que decidí subir a la azotea y quedarme ahí el resto del día.

POV Jazmín
Me sentía fatal con lo que había pasado... ya no podía seguir ahí. Necesitaba respuestas, pero sabía que Flor no me las daría... no ahora. Sonó el timbre de la penúltima clase,
tomé mis cosas lo más rápido que puse y decidí saltarme él último periodo e ir a mí escondite personal a fumar un cigarrillo. Estaba nerviosa.
Subí las escaleras hasta llegar a la azotea. Amaba venir aquí, se tenía una vista maravillosa de Buenos Aires. Cerré la puerta lentamente y busqué en mí bolso el paquete de cigarros cuando escuché unos sollozos en él ambienté. Busque un poco hasta que detrás de los tubos que calefacción encontré la fuente de dónde venían. Para mí sorpresa era Flor. Claramente no se había percatado de que yo estaba aquí. Aún estaba enfadada y pensé seriamente en dejarla ahí y retirarme, pero... no podía dejarla sola así. No podía.
—Veo que encontraste mí escondite. —Dije aclarando un poco mí voz en son de
anunciarme y vi como pega un pequeño salto de sorpresa y me miro. —Amo venir aquí ¿sabes?
Aire puro... él sol en tu cara, una vista maravillosa. —Ella no me respondió, solo que quedo ahí, inmóvil.
No entendía que me pasaba con ella. Para todo el mundo era tan fácil sacarme que
quicio. De haber sido otra persona ya la hubiera mandado al carajo y me hubiera ido. Pero esta vez era diferente. Era ella, y ella causaba algo extraño en mí. Me acerqué a ella y me senté a su lado y note que estaba cubierta de salsa para pizza o algo. Jaja olía muy mal la verdad.
—¿Quieres contarme que haces aquí sola, llorando en silencio y semi preparada
como una pizza? —Dije haciéndola reír y me sentí una ganadora, con los ojos tan hinchados como los tenía no creí que fuera a sonreír en un rato. Tome un mechón de cabello que tapaba la vista de uno de sus ojos, sus hermosos ojos y lo acomode detrás de su oreja haciéndola mirarme...—Flor... cuéntame... ¿Qué pasa?

A PruebaWhere stories live. Discover now