Un chico demasiado rico.

439 7 1
                                    

Cuando se dan cuenta de que es demasiado tarde, deciden recoger las cosas y marcharse al internado, antes de que Jacinta o cualquier profesor que esté de guardia los pille.

-Creo que es hora de que nos vayamos yendo. Si nos pillan...-dice Marcos.

-Sí, además no sé si es demasiado seguro que estemos por aquí. –dice Vicky.

Todos comienzan a andar, pero Julia decide quedarse un poco atrás.

-Vamos, venga. ¿Qué haces? –Dice Iván.

-Estaba viendo los feliz que hemos sido en este pequeño rato. –Dice Julia, mirando a sus amigos que se marchan felices.

-Bueno, en este colegio no sabes cuándo pueden cambiar las cosas. –Dice Iván. –Por eso, no tentemos a la suerte. Vámonos ya y cuanto antes entremos mejor.

Los chicos saben que tienen que tener cuidado ahora cuando entren para que nadie les pille de improvisto. Intentan hacer el menor ruido posible, pero como Iván ha dicho antes, en este colegio pueden cambiar las cosas en cualquier momento.

Pasan a la cocina, pero para su sorpresa, se dan cuenta de que no están solos. Elsa y Noiret los están esperando en la cocina.

Los chicos se miran nerviosos, ya que no saben muy bien que excusa inventar esta vez. Así que deciden no hablar.

-Vaya, vaya, ¿A quién tenemos aquí? ¿Es que no os es suficiente que haya aparecido el cuerpo de un antiguo profesor en el colegio como para dejar de estar merodeando en el bosque? –Dice enfadada.

-Perdón, no nos hemos alejado. Nos hemos quedado en el palomar. –Se inventa Vicky.

-Dime, Vicky. ¿Cómo le sentará a tu madre saber que su hija se está pasando las noches bebiendo cerveza con sus amigos? ¿O tú Marcos, qué habrían pensado tus padres, si estuviesen vivos? –Dice Noiret.

Marcos, tiene unas ganas increíbles de decirle cuatro cosas, pero sabe que lo hace para que pierda los papeles. Carolina, lo coge de la mano, intentando calmarle.

-¿Y vosotros? ¿Desde cuándo sois tan amigos? –Dice Iván.

-Lo que tú...-intenta decir Elsa, pero Noiret la interrumpe.

-Me temo, que vas a tener que acostumbrarte a verme con Elsa. Ella y yo, estamos empezando una relación.

Iván, siente como una patada en su entrepierna cuando oye aquellas palabras salir de la boca de su padre.

-Espero que a esta por lo menos, le dejes que se ponga falda. –Dice marchándose.

-Marcharos, ya bastante hemos visto por hoy. –Dice Elsa.

Los chicos se marchan y Elsa y Noiret se quedan en la cocina. Empiezan a oír barullo y salen a fuera. Está Héctor, con Jacinta y María.

-¿Qué ha pasado? –Dice Elsa.

-La Guardia Civil ha venido al colegio, diciendo que se han encontrado a Pedro, ahorcado a escasos metros del internado. –Dice Héctor, desolado.

-¿Cómo? –Dice Elsa, sin poder creérselo.

Aunque la relación que tuvieron los dos, duró poco, se conocían desde hace muchísimos años. Y también era el mejor amigo de Héctor.

Hace un mes...

-Jacinta, a ver si limpiamos la chimenea, porque cada vez que vengo a dar la clase aquí, algún que otro alumno, sale tiznado de la chimenea. –Dice Pedro.

El Internado.Where stories live. Discover now