Ragoney | OneShots

IX. Popularidad

"One for the money,
two for the show.
I love you, honey,
I'm ready,
I'm ready to go.
You've got the world,
but, baby, at what price?"
-Million Dollar Man, Lana Del Rey

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Raoul es uno de los chicos más populares del instituto, lo cual es un mérito a sus 15 años, ya que los más populares suelen ser de Bachiller y él aún está en 3° de la ESO. Es un chico guapo, listo y bueno en los deportes que, además, sale con Aitana, una de las chicas más guapas de su curso, querida y envidiada a partes iguales por la mayoría. Tiene todo lo que necesita para triunfar en el instituto y, además, es amablae con todo el mundo.

O bueno, casi todo el mundo.

-Hola, Raoul.-Le saluda tímido Agoney, un chico canario de su mismo curso.
-¿Qué te dije ayer? No me hables, no estás a mi nivel.-Le contesta este, haciendo que el resto de sus amigos se rían.
-Pensé que igual querías verme...
-¿Por qué iba a querer ver a un bicho raro como tú? Vete con tus amigos. Ah, no, espera. No tienes.

Agoney agacha la cabeza avergonzado y se aleja, oyendo las burlas y risas de los amigos del rubio.

-¿A qué se refería con que igual querías verle?
-Yo qué sé, Luis, está loco.-Se ríe Raoul.

Aitana se acerca a Raoul, y, sonriendo coqueta, le pide que vayan a algún lado solos y le arrastra hasta el baño.

-¡En que coño estabas pensando!-Le grita la chica.-Te has pasado con el pobre chaval.
-Qué va, si solo le he hecho lo de siempre.-Se defiendo el rubio.
-Le has dejado en ridículo delante de todos.-Le acusa ella.
-Pues eso, lo de siempre.-Sigu él.-Que deje de venir a saludarme todas las putas mañanas.

Aitana resopla, negando con la cabeza.

-Lo hace con la esperanza de alguien a quien, inocentemente, le importa una mierda su popularidad y espera que un día le eches algo de valor y le hagas caso, ignorando de una vez tu puto estatus social.-Le reprocha ella enfadada.-Estoy harta ya de tener que verme a escondidas con la persona a quien realmente quiero solo para fingir que salgo contigo.

La discusión sigue, no lleva a ninguna parte y acaban en la misma situación que cada vez que discuten, Aitana gritandole que es un cobarde y recordándole que la jerarquía de popularidad del instituto es una mierda.

Aitana sale del bañó dando un portazo, más decepcionada que enfadada con el comportamiento que sigue teniendo Raoul.

Lo de todos los días.

Raoul sin embargo se queda allí paralizado. Cuando logra reaccionar, se encierra allí dentro y empieza a llorar, dándo golpes a las paredes y gritando de rabia, odiándose por lo imbécil y cobarde que, tal como le ha dicho Aitana, está siendo.

Se mira en el espejo y siente verdadero asco al ver en quién se ha convertido, porque, al final, su reflejo no es mejor que el de todos esos imbéciles que tiene por "amigos" y tanto asco le dan.

Tiene el mundo, pero, ¿a qué precio?

Necesita estar ahora mismo con él.

Manda un par de mensajes con su móvil, después de secarse las lágrimas y tranquilizarse un poco, y poco más de un minuto después, se oyen unos golpes en la puerta.

-Soy yo.-Se oye un susurro.

Raoul reconoce esa voz al instante y se le iluminan los ojos. Abre la puerta y entra el chico castaño, que aunque le saca casi una cabeza de altura, perece más pequeño que él, más frágil. El rubio vuelve a cerrar la puerta, para que nadie más pueda entrar y abraza al chico, para luego empezar a besarle el cuello y, más tarde, la boca.

-¿Qué coño te pasa?-Le grita Agoney empujándole, cuando logra reaccionar.
-No grites.-Sisea el otro.
-¿Por ué coño me besas?
-Porque somos novios, ¿no?-Dice confundido.
-No lo parecía cuando me insultabas delante de tus amigos.

Raoul se queda paralizado, maldiciéndose por no haber hecho caso a Aitana y dándose cuenta de que en realidad a su novio si le molesta lo que ocurre cuando no están solos. Le molesta mucho más de lo que muestra.

-Eso es porque con ellos soy completamente distinto. Con ellos no soy yo, soy lo que la gente espera ver de mí.

Se miran fíjamente, muy serios los dos.

-Te avergüenzas de mí.-Dice Agoney.
-Eso no es cierto.
-Te avergüenzas de salir conmigo.-Insiste.
-Ago, te quiero.
-Es otra broma vuestra, ¿no? Otra forma más de reíros de mí.
-No.
-Entonces por qué.-Le grita.
-Porque tengo miedo.-Grita Raoul con los ojos vidriosos.

Agoney se queda inmóvil, sin reacción, tratando de procesarlo, ya que nunca en su vida se habría imaginado viendo a Raoul, la persona más fuerte que conoce, derrumbándose completamente frente a él y confesando tener miedo.

-Tengo miedo,-Sigue.-a que me odian y me empiecen a insultar, como hacemos contigo, perder de golpe todo lo que tanto tiempo me ha costado ganar. Tengo miedo a quedarme solo contar el mundo.

Agoney le sonríe y toma las manos del rubio entre las suyas.

-Nunca vas a estar solo, estaremos juntos contra el mundo.
-Eso es lo que más miedo me da.
-¿Estar conmigo?
-No, tonto.-Sonríe el rubio revolviéndole el pelo.-Que dejes de quererme.

El castaño le besa, prometiéndole que eso no va a pasar.

Y así siguen pasando los días, por la mañana, Agoney deja de intentar saludarle y se ignoran por completo, luego Aitana sermonea al rubio y más tarde los chicos se ven en el baño, varias veces cada día. Por las tardes también suelen quedar juntos, a solas, y Aitana es la única enterada de todo.

Pero un día, Raoul se cansa, y decide cambiarlo todo sin avisar a nadie.

Esa mañana, Raoul lleva a sus amigos a donde está Agoney, y el castaño se prepara para que le insulten, o, incluso, para un golpe por parte de su novio o cualquiera de los chicos del grupo, pero, en cambio, el rubio se sienta a su lado en el banco.

-¿Ahora te juntas con maricones?-Dice uno del grupo y el resto le ríen la broma.
-Ni puta gracia, Luis.-Le corta Raoul.-Quería presentaros a este chico, ya que por más que os habéis metido con él, no os habéis molestado en aprenderos si quiera su nombre. Él es Agoney, y es una buenísima persona, y estoy muy orgulloso de poder decir que es mi novio.

Raoul agarra la mano de Agoney con fuerza y la mayoría del resto se ríen en bajo.

-¿Qué haces?-Le susurra el castaño.
-Dejar de ser un cobarde.

Agoney sonríe tímidamente y Raoul le da un corto beso en los labios.

-Yo nunca he estado saliendo con Raoul.-Dice Aitana y todo el grupo se gira hacia ella.-He estado saliendo con Nerea.
-¿La rata?
-Mira, Cepeda, o te callas o te vas a llevar una hostia.-De advierte la chica.
-Solo digo que no es normal que de repente haya tanto maricón y bollera aquí.-Añade encogiéndose de hombros.

Un puño acaba en la cara del chico y todos miran a Aitana, que por pequeña y débil que parezca, cuando se enfada es un peligro, y si no, que se lo pregunten al ojo morado de Cepeda.

-¿Narradora? ¿Quieres dejar de hacer que me lleve puñetazos?

No, querido, te los merecías por todos los que no te han dado en el mundo real.

-Eres una cabrona...

Y Aitana, mosqueada, le pega una patada, para que Luis no se queje de que solo le dan puñetazos.

Nerea se acerca, ya que desde el principio había estado apartada y escondida, y en cuanto la ve, Aitana le planta un morreo delante de todos, lo que Raoul usa como excusa para plantarle un morreo también a Agoney.

-Te quiero, Ago.