Mar de sangre: "El Comienzo De Una Venganza "

CAPITULO 3: ¿DÓNDE VAMOS?

Sofía

Aquella noche caímos rendidos no podíamos con nuestros cuerpos ni tampoco con nuestras almas. Al día siguiente mientras desayunaba me puse a leer las cartas y vi algo estaño detrás de ellas. Como si estuvieran manchadas de algo las olí y olía a limón.

- ¿Jack?

- ¿Si Sofi?

- Dime que tienes un mechero o unas cerillas algo que prenda fuego.

-¿Por?

- Voy a jugar a ser científica

- No creo que sea el mejor momento para jugar Sofi.

- Tu dame lo que pido cojones. A menos que quieras que te pete el otro huevo.

- No, por favor, no hace falta de verdad.

- DAME FUEGO.

- Toma, toma un mechero que había en el coche.

- Ahora Jack confía en mi y aprende.

Cogí una de las cartas y le acerque las llamas del mechero para dar calor y no quemar la nota por la parte de abajo. Mientras todo el papel seguía blanco a causa del calor el zumo de limón reacciono dando un tono tostado al papel el cual revelo una dirección y un código. Hice lo mismo con la otra y apareció otra dirección diferente.

- Ves Jack es difícil de detectar pero es un método económico y muy eficaz de proteger un mensaje.

- Sofi permite-me que te llame genio y Einstein.

- Te lo permito pero debemos aprovechar el tiempo debemos movernos antes de que nos encuentren. Yo diría de ir primero donde nos pone un numero como de una taquilla y un código.

- ¿Porque primero allí?

- Primero porque puede haber algo que decida si vivimos o morimos y la segunda porque tengo una corazonada.

- ¿Sofi tu crees que en esta dirección halla alguien que nos proteja?

- Ni idea pero no me voy a quedar de brazos cruzados halla o no alguien que nos ayude voy a matar a esos cabrones. Si hace falta hago de la ciudad un mar de sangre. Pero no se libraran de mi.

- Pues en ese caso deja que me una a la fiesta. Mejor dos demonios que uno. Al fin y al cabo también han matado a gente que me importaba.

Después de dicho esto nos dirigimos al lugar donde en el papel había un código. Durante el trayecto nos dio la sensación de que alguien nos seguía. Jack mostró sus grandes habilidades de conducción y lo dejo atrás y eso que íbamos en mini. La dirección nos llevo a un zoológico. No podíamos arriesgarnos a que nos vigilen y vean habiendo tanta gente inocente. Podrían correr peligro. Sin contar la de seguridad que había entre guardias y cámaras.

Por la noche sin embargo habían muchos menos guardias y ningún visitante. Aprovecharíamos ese momento para entrar con cuidado.

- Las taquillas están en el centro del parque

- Lo se he venido un par de veces. Hay que tener cuidado porque las cámaras no descansan.

- Las rompemos según vamos pasando.

- No mejor no Jack ten en cuenta que nosotros somos los buenos. A parte detrás de esas cámaras hay alguien vigilando las pantallas y sospecharía si va perdiendo las imágenes una a una. Llamaríamos la atención.

- Es verdad te doy toda la razón. ¿Tu estas nerviosa?

- Solo lo estaré cuando nos descubran o nos busquen los polis. No creo que tarden mucho en encontrar cadáveres.