CAPÍTULO 10: ESTO ACABA AQUI Y AHORA

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El elicoptero solo se podia hacercar a un bosque cercano si no quería ser detectado así que bajemos hay y continuemos a pie.
- Oye soldados no morais confío en vosotros. Sofía eres igual que tu padre una luchadora y justiciera. Toma estas pistolas me las regalo tu padre. Cuando me salvó la vida creo que ahora te pertenecen a ti.- Nos dirigió el piloto esas palabras de ánimo lanzando las armas. -
- Gracias. Con estas pistolas haré justicia.
Dicho esto todos los soldados que habían en el elicoptero se unieron a nosotros excepto dos que se quedaron protegiendo al piloto. Entramos por unas escaleras ocultas de la base que solo los mas veteranos conocian. Ibamos limpiando los pisos uno a uno intentando que no se percataran de que seguiamos con vida. Hasta que llegamos a un piso en el cual debiamos separarnos. La escuadra que me estaba protegiendo hasta ahora tenia que ir a una planta donde pudieran hacer una sorpresa en el momento adecuado.

- Chicos hasta aqui.

- ¿Hee? - Juan confuso.-

- Sé que os sonara a locura pero voy a darles una sorpresa. Sabemos que se encuentran en la Gran Sala. No se esperaran que entre por la puerta principal. Así ganare toda la atencion y tiempo.

-¿Estas completamente loca? Te mataran. - Pregunto Juan sin creer lo que oia.-

- No tengo intencion de darles esa satisfacción. Ademas confió en vosotros. No te preocupes hara falta algo màs que ellos y sus armas para acabar conmigo.

- Yo creo que esta bastante cuerda. - Interrumpió Alex ironicamente.-

- Pues aqui nos separamos. Jovencita más te vale que sea una corta separacion. - Continuo Kiara.-

- Supongo que esto és un adios. - Se despidio Jackson.-

- ¿Que tal si lo dejamos en un hasta luego? - Pregunto Alex algo preocupado.-

- Estoy de acuerdo. Hasta luego soldados. Nos veremos. - Me despedí sonriendo.-

- ¡¡Heee!! Camarada confio en tí. Te prohibo morir. És una orden. - Se despidió Alex.-

- En otras cosas hubiera dicho que nadie me da ordenes pero esta debes dar por hecho que la cumplire.

Despues de aquel hasta luego cada uno fue por su camino. Cogi el acensor para bajar a mi piso objetivo el ultimo al que se podia acceder. Mientras bajaba mire aquellas pistolas. No eran el mismo tipo una de la otra aunque ambas tenian simbolos decorativos incrustados. en una de mis manos calló una gota de sangre que provenia del corte en la cabeza que habia manchado ya practicamente un cuarto de mi rostro cubriendome la mirada de aquel lado de sangre monstrando en ese ojo mas odio del que hubiese monstrado estando limpio. Mire un insante al techo cerrando los ojos unos instantes como si le rogara a un dios del cual no creo un dia más el cual poder vivir para continuar hacia adelante. Sabia que todas aquellas vidas, que todas y cada una de ellas ahora era responsabilidad mia si les pasaba algo. Unos segundos antes de que la puerta se abriera volví a mirar al frente con una mirada de odio puro con sed de venganza y suspire sacando con ese aire el miedo de mi interior. Segun se abrieron aquellas puertas disparé a todo soldado que encontraba en mi camino y cuando hube de cambiar de cargador los deje caer mientras andaba e colocaba otro de mi cinturon. Finalmente al girar una esquina me encontre al final del pasillo aquellas enormes puertas custodiadas por dos soldados con las manos temblorosas que no fueron capaces de dispararme y debido aquel miedo que tenian murieron por mis balas. De seguido apolle las dos manos sin soltar las pistolas y al mismo tiempo empujando hacia dentro abriendolas. Encontrandome al final de aquella sala llena de rehenes rodeados de soldados armados que dirigian sus armas a mi sin abrir fuego a aquellas dos personas que nos arruinaron la vida. Aquellas que mataron a nuestras familias y que despues intentaron acabar con nosotros.

Mar de sangre: "El Comienzo De Una Venganza "Where stories live. Discover now