Capítulo 5

10 2 0
                                    

Pablo se había quedado diciendo que no iría hasta que me mejorara, traté de agarrar la pizarra, pero me la quitó y me dijo que quería que le dijera algo sin la necesidad de usar la pizarra, pero me dolía la garganta como para hablar.

  Donnovan apareció después de unos segundos.

-Evan, yo... -Dijo Donnovan- no sabía lo de...

-Paranoia nerviosa- dije.

-¡Puedes hablar!- Dijo Pablo.

-Mi labor al ser su entrenador es hacerlos ganar, no poner en riesgo sus vidas, así que por tu seguridad Evan... -Dijo Donnovan y me vio con ¿lástima?- No participarás en el juego de hoy.

-¿Qué? -Pregunté sentándome de golpe- ¡No puedes hacerme esto Donnovan!

-Lo siento Evan, pero no puedo poner en riesgo tu vida, eres uno de mis mejores jugadores, ustedes son una familia para mí y no puedo dejar que la pase algo.

  Donnovan era cuatro años menor que yo. Como donde vivíamos habían puros chicos, todos nos considerábamos hermanos, todos nos defendíamos de los adultos y de nosotros (aunque de los adultos nos defendíamos más).

-Supongo que no me queda opción, después de todo, era el entrenador.

-No me lo goles a mal Evan, yo no soy como los adultos, yo sí me preocupo por ustedes.

  Por más que quisiéramos a nuestros padres, ellos no estaban con nosotros, así que, solo nos quedaba apoyarnos entre nosotros.

>>Descuida, no he informado algo a los adultos, no quiero que vengan antes del juego, además de que no quiero que me hagan preguntas sobre cómo sucedió.

-Yo... -Dijo Pablo- hay algo que quiero decirles.

-¿De qué se trata?- Pregunté.

-Pero no aquí, más privado.

-Déjame la paranoia a mí.

  Donnovan y Pablo rieron.

>>Yo también tengo algo que decirles.

-Yo sé de un lugar, no hagan preguntas, solo síganme- dijo Donnovan.

  Donnovan era categorizado como un "vago" porque lo veías muy seguido por las calles, pero la verdad era que, solo lo hacía para descubrir puntos ciegos, los adultos nos habían pensar que éramos libres de hacer lo que quisiéramos en nuestro mundo, pero eso no era cierto, aunque no lo admitieran, nos vigilaban.

  Los tres sonreímos, ellos eran ahora mi familia y no quería que se fueran, porque una vez que se iban, nada vuelve a ser igual (incluso algunos han escapado antes de cumplir la mayoría de edad, no porque no quisieran ser responsables, sino que, habían rumores de que te hacían tan responsable que te borraban la memoria, olvidabas tus amigos, familiares, si salías con alguien, todo, prácticamente edad un robot).

Pero, son solo rumores, ¿no?

Control total (Completa)Where stories live. Discover now