"Cuando el árbitro suene el silbato en el minuto 90 y ya nuestro amor este perdido ¿El destino nos dará revancha?"
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Fic terminada, cualquier adaptacion debe ser consultada
Tenia que volver y digamos que no era de mis cosas favoritas. Volvía solamente por Gonzalo y Lara, pero si fuera por mi mandaría una carta con algún regalo en encomienda, pero no, no merecían algo tan frio y tan simple, más de mi parte.
Alma, tan hermosa, necesitaba conocerla personalmente. Y es que desde que deje ese lugar prometí no volver jamás pero mi cuñado y mi hermana me necesitaban a su lado y aunque quiera negarlo con todas mis fuerzas, yo necesitaba verlo al menos una vez más y confirmar que ya era el pasado. Al menos para el yo ya era pasado, los rumores de su nueva novia ya llegaron a mis oídos.
-Prometo hacer lo posible para que no se vuelvan a cruzar en todo el mes que vas a estar acá-Dijo Lara, y rompió mis esperanzas por completo.
-Bueno esta bien, calculo que estoy llegando la madrugada del sabado -Dije mientras miraba el pasaje- Te veo en unos días lali...
-Dale, te quiero Cata -Y finalizó la llamada.
Apoyé el teléfono en la mesada y suspiré. Dios mío había que volver y no tenía ganas.
-Sacar un pasaje e irme contigo no me cuesta nada... -Me dijo mientras se sentaba del otro lado de la mesada y justo en frente mío.
-Sabes perfectamente que te digo que si pero no se puede love -Le acaricie la barba de unos días- I can not take you with me, but I would love it
-I know ... I know you do not want
-Por favor -Hundí mi rostro en mis manos- Te llevaría conmigo a todas partes, pero mi familia no entendería nada -Reí- Y más si el va a estar ahí...
-Si me necesitas...sabes perfectamente que bastaría un llamado para que me tome el primer avión a Turín para verte -Me sonrío. Tengo el mejor amigo del mundo.
Mirándolo de cerca, Noah era el hombre perfecto, pero no para mí. Rubio, español y de ojos celestes.
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Por favor lo llego a llevar para Argentina y no dura ni cinco minutos que ya consigue a alguien. Pero ahora es todo para mí.
- ¿En qué piensas? – Se levanto y fue a abrir la heladera para sacar helado- Si piensas que soy el hombre que toda mujer quiere, es verdad, tú te lo pierdes...
-Cállate -Le tiré una manzana que había en la mesada- Ese mes va a ser una tortura sin vos
-Cata...-Se acerco depositando él pote a un costado y suspiró- Ya lo sé, pero...- Corrió un mechón de pelo de mi rostro- Podría ir la última semana que ya serán mis vacaciones
-Las primeras tres semanas sin vos van a ser una tortura -Corregí ocasionando que él se ría.
-Ahí está mejor -Me dio un cálido beso en la mejilla.
Definitivamente este hombre lo era todo en mi vida, una lastima que no me guste ni me llame la atención de forma amorosa. Una verdadera lástima.
- ¿No pensas visitar España? - Pregunté y él puso el pote de helado que saco de la heladera en la mesada- Dame una cuchara -Dicho eso me alcanzo una.
-Si...-Cuchareo el helado- Contigo cuando termine tu estadía con tu hermana... de vuelta nos pasamos por mi país y te presento como mi pareja nueva, pero con el defecto que estas enamorada de un jugador de futbol argentino de ojos verdes ¿tú qué dices?
-Yo digo que ya no estoy enamorada de él...
-Y yo digo que no me gusta el helado de frutilla, pero como la fruta, así que deja de negarlo
- ¿Cómo si no te gusta el helado comes la fruta? Es lo mismo que no coma el chocolate, pero si su helado, no tiene sentido
-Exacto, lo que dices sobre Paulo tampoco lo tiene
-Yo ahora digo que te vayas a la mierda
-Pues dime donde queda e iré
Comenzamos a reír de la nada misma, y de eso se trataba, de reír hasta no dar más.
Nos quedamos en el departamento mirando el paisaje en el ventanal enorme, Inglaterra brillaba a la noche y nos daba su mejor paisaje. Algunas banderas todavía estaban colgando en un que otro balcón, pero no duraría mucho. Este año hubo más banderas y esas cosas por el mundial, pero más por la boda del príncipe Harry. Eso era lo malo de Inglaterra, acá no se celebran las fiestas patrias como en Argentina ni otros lugares del mundo que sacan banderas y celebran, acá nada patrio se celebra como allá y eso se extraña, por eso cuando hay alguna boda real acá se aprovechan al máximo.
- ¿Cuándo te vas y me dejas en la depresión? -Pregunto Noah mientras miraba por el ventanal. Yo reí.
-Mañana a la tarde -Dije mirándolo.
-Y llegaras la madrugada del sábado si no me fallan los cálculos...-Asentí- Te voy a extrañar
-Y yo a vos -Me acerque para abrazarlo- La ultima semana te quiero ver ahí- Ordené.
-Al pie del cañón señorita -Le sonreí.
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-Noah más vale que cuides el departamento y no dejes nada sucio por ahí -Le dije corriendo por el aeropuerto.
- ¿Pero que eres? ¿Mi madre? -Dijo detrás de mí
-No me extrañes...
-No lo haré -Frene y lo mire con mi peor cara- Es broma Cata, lo haré. Avísame a penas pises suelo italiano...
Lo abrace bien fuerte. No estaba lista para enfrentar todo otra vez.
-Tranquila- Le acaricio la espalda- Estará todo más que bien y nos veremos pronto. Ya veras estas semanas se pasarán volando y cuando menos lo esperes estaré contigo -Nos separamos para mirarnos- Te quiero muchísimo tía, cuídate -Volvió a abrazarme. Yo no quería finalizarlo nunca- Y si ese idiota te dice algo o te hace algo, tu me avisas y a penas llegue le daré una buena paliza...
- ¡Noah!
-Es coña... si tu no quieres no lo haré -Nos separamos- Cuídate en serio Cata...
Luego de unos segundos más me fui de su lado para dirigirme al check in y ya subirme al avión. Le rogué a los dioses que algo pasará, pero no fue así, y ya estaría próxima a aterrizar en suelo italiano para ver a mi hermana.
