El Dragon y Las Sirenas

Es una cita, verdad?

  Natsu y Mira caminaban casualmente por la ciudad. Mira estaba un poco nerviosa por el hecho de que solo eran ellos dos. Ella no esperaba caminar tan solo por la ciudad tan pronto. Sus mejillas estaban un poco rosadas por la vergüenza, ya que estaba en su pequeño mundo tratando de pensar qué demonios hacer. 

"Ok, ¿qué diablos hacemos?! Esta es la primera vez que voy a ... espera, estano es una cita Mira! Sólo ... dos amigos pasando el rato ... ¡y divirtiéndose!" 

"Oh sí, eso verdad". Natsu solo se dio cuenta de algo.

 "¿Eh?" Mira se volvió hacia él.

 "¿Querías sacar provecho de ese, eh, favor?" Se rascó la parte posterior de lacabeza preguntando. 

"Fav- Oh! Eso! Uhh, no tienes que preocuparte por eso. Yo solo estaba-"

 "No me importa para nada, de verdad. Además, me estás ayudando, así que bien podría devolverte el favor". Insistió cuando se detuvo y se volvió hacia ella. 

"B-bueno si insistes. Supongo que lo haré". Ella tosió en su mano. Parecía estar un poco molesta, pero por dentro su mente estaba entrando en pánico. 

"¡Maldita sea! ¡Eso no es lo que quise decir! ¡Ahora probablemente pensará que estoy enojado!" Ella miró ligeramente en su dirección, luego se encogió de hombros y caminaron. "Él debe pensar que soy rara ahora ... ¡No! ¡Solo estoy sacando conclusiones, Solo concéntrate a dónde ir ... veamos ... Creo que había ese museo detrás de ese edificio de allí. , eso es lo que haremos! " Ella asintió y luego se acercó a él. "Vi un museo por ahí. ¿Por qué no vamos allí a matar algo de tiempo?"

 "Claro suena bien." Él simplemente dijo. Luego sintió que un agarre en su mano y él hizo un sonido de sorpresa. 

 "Ah, l-lo siento". Ella se sonrojó, se dio la vuelta y volvió a entrar en pánico."¡Mira, idiota! ¡No vayas y agarres su mano así! ¡Apenas si conoces a este tipo, y ya estás tomando la iniciativa! ¿Por qué estoy tan tensa? ¡Esto debería ser un paseo por el parque!"

"¿Mira?" Preguntó. 

"¿Sí?" Ella rápidamente se volvió y preguntó con una sonrisa.

 "¿Estás ... queriendo tomarnos de las manos?" Preguntó con una ceja levantada. 

"T-tomarnos de las manos...? Yo no podría simplemente tomarme de la mano con alguien que conocí hace un rato". Ella dijo nerviosamente.

 "Sí, supongo que tienes razón. Lo siento si lo hice sonar extraño". Simplemente se encogió de hombros y siguió caminando. Él había aprendido de Grandeeny que lo más importante es no hacer que las mujeres hagan algo que no quieren hacer. Fue mal karma, o ... algo. Él todavía no entendía a las mujeres, pensó mientras suspiraba. Mira, por otro lado, estaba golpeando su cabeza contra el costado de un edificio.  (T/N: sabias palabras xD )

 "¡Baka! ¡Baka! ¡BAKA! ¡No necesitas disculparte! Solo necesito salvar la situación ... solo actúa como solías estar con él antes". Ella gruñó y luego la alcanzó y tartamudeó un poco y dijo. "L-lo que quise decir es que no me importaría ... si nos tomamos de la mano. Pero si no quieres, lo entender-" Natsu simplemente tomó su mano con normalidad, y su rostro se iluminó de rosa. 

"Bien entonces. Si eso es lo que quieres, entonces lo haré". Él dijo y los dos siguieron caminando. Mira estaba mirando hacia abajo mientras trataba de ocultar su sonrojo. No tenía idea de qué cara estaba haciendo o qué decir a continuación. A decir verdad, ella solo había llegado así de lejos en una cita con un chico, antes de que le pateara el culo a la luna. Ella era una mujer muy hermosa, incluso según los estándares de sus colegas. Los directores al azar,los directores famosos, los funcionarios gubernamentales jóvenes y los ídols del canto popular la invitaron a salir. Por una clasificación de publicidad, Natsu estaba en la parte inferior. Pero en términos de material de novio decente, él estaba en la cima de su libro. Ella vestía su atuendo de color púrpura oscuro habitual,que le daba una apariencia gótica. Su estómago estaba expuesto, sus botas de tacón alto solo llegaban hasta las rodillas, mostrando sus blancas y esbeltas piernas. La camisa que llevaba realmente abrazaba su abundante pecho. Ella era como el caramelo ideal para los ojos de los hombres en esta ciudad, y más allá.