El club de las chicas mimadas

Capitulo 17| La ultima Coca Cola

Alexa

Intento abrir mis ojos los cuales se mantienen pesados

El sol de la mañana me azota en la cara y no puedo evitar subir mi manta hasta la coronilla de la cabeza

-Ya levántate holgazana- me cierno más a mi manta y gruño

-No me gruñas-la molesta voz de Claire parece ser mi alarma de hoy

¿Por qué simplemente no me puede despertar un chico guapo de ensueño?

-Tú no molestes-digo con voz pastosa

Siento el sabor de la bilis en mi boca lo que hace que quiera levantarme y cepillarme.

-Hoy es sábado- pronuncia con satisfacción y se aunque este debajo de mi manta que está sonriendo -

-¿Y?- pregunto. ¿Qué tiene de especial el sábado?

-Los sábados son de fiesta - dice Claire con obviedad

-No me importa-

Presiono mis ojos con fuerza y me obligo a entrar en la dimensión de los sueños otra vez

-Aburrida- canturrea y tira con fuerza de mi manta dejando que todo el sol me cubra con su brillante resplandor

-¡El sol!- grito y pongo mis manos enfrente de mi cara con dramatismo -¡me quema!-

Hago el amago de estar derritiéndome y escucho a Claire resollar con desaprobación

-No te pases- me lanza en la cara mi manta-vamos que te toca hacer las compras-

-No- enuncio-si voy mi cama me extrañaría, y yo siempre quiero lo mejor para ella-

-Lo mejor para tu cama seria que movieras tu sucio trasero y te fueras a dar una ducha- forma una mueca y con su dedo índice y pulgar aprieta su nariz-más bien sería lo mejor para todos-

Me levanto un poco, lo adecuado para coger mi pantufla y lanzársela, la pantufla llega demasiado tarde ya que Claire se ha esfumado de mi habitación

Lanzo un bufido y me obligo a sentar; con los pies en mi alfombra me apoyo y me pongo de pie , bostezo y me estiro, frunzo el ceño al ver que Claire corrió las cortinas de mi ventana , he ahí la razón de porque tanto sol.

Luego de quitarme la pereza camino en dirección del baño y me despojo de mi ropa.

Una vez adentro del cubículo transparente giro la perilla y el agua tibia empieza a recorrer mi cuerpo.

-¡Alexaaa!- un gritillo me reclama y rio entre dientes

Al parecer Taylor se quedó sin agua caliente.

Luego de ducharme bien envuelvo mi cuerpo y cabello en frescas toallas blancas, cepillo mis dientes y aplico mi hidratante corporal.

Salgo del baño y me conduzco al armario con grandes puertas blancas

¿Recuerdan que cuando llegue todo era rosa? Bueno hice un pequeño cambio en los colores

La mayoría de mis muebles de dormitorio son color blanco hueso y las sabanas de mi cama son de azul marino, combinación sencilla pero agradable a mi vista.

Del armario cojo unos vaqueros azules claro, un bralette negro, una blusa sin mangas blancas y un suéter de lana de abrochar, solo por si acaso.

Me visto rápidamente colocándome unas converse blancas y salgo de mi habitación, mi estómago ruge, desde anoche no como, eso es demasiado tiempo para mi pobre ser