El club de las chicas mimadas

Capítulo 21 | En sus marcas, listos ¡Fuera!

Taylor

La música no ha bajado de intensidad al igual que la fiesta.

¿Dónde diablos están las estúpidas?

Mi vista viaja por todo el lugar, analizando y admirando, que buen fiesta organizo este chico Franco.

Las fiestas de este tipo siempre han atraído mi atención ¿Por qué? Simple, te dan la sensación de que puedes ofrecer a las personas felicidad, y esa es una sensación muy linda, en su momento.

Luego vienen las consecuencias, la resaca, el arrepentimiento, etc. En las fiestas te la puedes pasar, o muy bien, o muy mal. Esta vez es una en la que me la estoy pasando muy mal.

Resulta que Adam se fue y me dejo sola, me dijo que me tranquilizara, que no era una niña de preescolar. Claro, él es un macho alfa sin miedo alguno. Resultó para mí, uno de esos chicos con el ego por las nubes, que estarían dispuestos a abrir los brazos a una chica para que después ella le abriera las piernas. Y créanme no estoy dispuesta a caer en sus jueguitos, a pesar de que fui yo la que comenzó algo que no estoy segura de poder terminar. Les dije a las chicas que me gustaba Adam.

Sé que tiendo a ser alguien competitiva y pretendo estar segura de mi misma en todo momento, cosa que no es cierto. Puedo ser un cachorro asustado algunas veces.

-¿Taylor?- levanto la cabeza y me topo con una castaña la cual tiene el ceño fruncido en señal de confusión.

-Rachel...- pronuncio y me levanto del sillón en que estaba-Te estaba esperando para pedirte un favor- aliso con mis manos sudorosas mi pantalón entubado.

Ella asiente con la cabeza y se muestra sorprendida-Claro, dime-

-¿Me puedes llevar a mi residencia? Deje mi celular en el auto y cuando fui a buscar a las otras chicas ellas no estaban-suspiro y observo como Rachel se ríe. Lo está disfrutando.

-Claro, solo espera un poco, iré a buscar a Oliver para que te lleve- asiento con mi cabeza, alborotando los rizos que llevo en mi cabeza.

Rachel se pierde entre las luces y la gente, dejándome de nuevo sola, al igual que todos en mi vida lo hacen.

¿Qué hora será? Solo estoy consciente de que ya es tarde.

Me acerco a una persona disfrazada de bruja que está usando su móvil y le pregunto la hora, la chica me da una mirada asesina y me da la hora casi escupiéndola en mi cara.

Seguro interrumpí algo importante para ella. Que bien Taylor, no será la primera persona a la que le jodes el momento.

A mi cabeza viene el recuerdo de Zack, le arruiné la relación con Claire, que aunque no me parecía de lo mejor, lo hacía feliz y yo destruí eso.

-Vamos Taylor- dicen a mi espalda.- Ya es tarde-

Me giro y camino hacia Oliver. -¿Sucede algo?- pregunta poniéndose a mi lado. Mi cara ha de ser la viva expresión de lo que siento.

-No, solo estoy un poco cansada- bostezo falsamente y él, convencido asiente.

-Bueno mejor será que nos vayamos ahora, tu hermana espera en el auto- me da la espalda y empieza a caminar a través de la gente.

Yo le sigo y a pesar de que fingí lo del cansancio, me siento agotada, los sustos de esta noche quedaran marcados en mi mente, como años anteriores.

Ah, pero el año pasado la pase mejor, Kylie planeo una pijamada de tres, ella Zack y yo. Nos pusimos mascarillas verdosas que prometían un cambio radical en la cara y jugamos verdad o reto, aunque era algo solo de retos porque no había nada que no supiéramos de nosotros, vimos películas de ciencia ficción y maquillamos a Zack quien al principio se negaba pero al final cedió. Ellos me hacían creer que también odiaban Halloween, aunque planearon la pijamada porque sabían de mi terror.