Capítulo 7

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SeokMin observaba a SoonYoung mientras que este estaba en su mundo mirando algún punto en la sala, la secadora anunció que su ciclo había terminado e inmediatamente sacó las anteriormente empapadas ropas.

Esperó un momento que estas estuvieran a temperatura ambiente para ponerse las suyas y vestir a SoonYoung, luego de estar vestidos como si nada hubiese pasado, metió las toallas usadas en la secadora, se encargaría de no dejar rastros de los sucesos ocurridos.

Los minutos pasaron y el silencio reinaba en aquella sala, SeokMin subió a dejar las toallas ya secas en la habitación y SoonYoung lo seguía en silencio.

El de cabellos oscuros suspiró y se sentó en la cama del chico haciéndole señas para que repitiera su acción. SoonYoung obedeció y lo miró atentamente.

–Hagamos una promesa, no le dirás a mami que saliste al jardín, ni que nos bañamos juntos, ¿Entiendes?- SeokMin rogaba que el chico pudiese mantener silencio.

SoonYoung abrió ligeramente su boca pero no pronunció ninguna palabra, SeokMin empezaba a ponerse nervioso.

– ¿Qué le digo a mami?

–Que estabas durmiendo. ¿Está bien?, será nuestro secreto.

SeokMin hizo una señal de silencio con su dedo índice y SoonYoung asintió mientras repetía el gesto, el de cabellos oscuros estaba aliviando pero el rubio se sentía intranquilo por ciertas dudas que rondaban en su cabeza. 

–Así mami no te golpeará como a mi abuelita, ¿Verdad?- SeokMin tragó sonoramente y asintió sonriendo forzosamente-. Mmmm... Entonces no diré nada, porque... porque yo no quiero que mami te golpee, porque tú eres muy lindo.

SeokMin sonrió ante la inocencia de aquellas palabras, ¿Por qué se había involucrado con SoonYoung?, él sabía que si seguía estando a su lado nuevos sentimientos florecerían, pero, aunque fuera incorrecto, amaba que SoonYoung estuviese aceptando su presencia y le permitiera mimarlo, pero esa felicidad no duraría para siempre, esa burbuja en la cual se encontraban ya había flotado lo suficiente.

Llamada entrante: HyeSun.

–SeokMin, ¿Cómo va todo?

–Bien, SoonYoung se acaba de despertar-Miró al nombrado guiñándole un ojo y esté asintió frenéticamente- ¿Y tú madre... cómo está?

–Oh, ella está estable, parece que el golpe que sufrió al caerse no fue tan grave aun así necesitan hacerle más exámenes, pero no te preocupes querido ya el médico de SoonYoung va en camino, puedes volver a casa en lo que llegue.

SeokMin sintió una gran tristeza ante la última frase, pero siguió la conversación, mientras miraba como SoonYoung jugaba arrugando su camisa de pijama.

–Espero que se mejore. No es ninguna molesta cuidar de SoonYoung, no se preocupe.

–Ya veo. Bueno, hablamos luego querido, gracias por todo.

Y así la llamada finalizó, SeokMin suspiró mientras acariciaba los rubios cabellos de SoonYoung, no quería irse, al menos no sin SoonYoung.

El chico de cabellos rubios se acercó a SeokMin refugiándose en su pecho para que éste siguiera mimándolo.

–SoonYoung, Tu doctor viene a cuidarte, recuerda nuestra promesa, ¿Esta bien?, a él tampoco le digas.

Y antes de que SoonYoung respondiera la puerta de la habitación se abrió dejando ver a un hombre claramente confundido ante la escena, SeokMin sintió una leve presión en su pecho pero no perdió la compostura.

–Usted debe ser el doctor de SoonYoung, ¿no?-Dijo sonriendo mientras separaba amablemente al chico y acariciaba sus cabellos despeinándolo amistosamente.

–Sí, Soy el Doctor Min. ¿Usted es?-Sonrió amablemente y SeokMin se levantó de la cama ocultando todo el nerviosismo que sentía en aquel momento, como si a un adolescente lo hubiesen encontrado en pleno acto. 

–SeokMin, soy el asistente de HyeSun-Habló calmadamente para luego estrechar su mano, ausente al enojado rostro del de cabellos rubios.

–Ya veo, HyeSun me dijo que su asistente cuidaba del jovencito, disculpe las molestias provocadas, estaba atendiendo una emergencia.

–No se preocupe, bueno, volveré a casa, lo dejo bajo su cuidado...

– ¿SeokMin te vas?- La atención de ambos se dirigió al chico que observaba la escena, ahora su rostro revelaba tristeza en vez de enojo.

–Nos vemos luego SoonYoung, pórtate bien ¿sí?

Y despidiéndose con un movimiento de manos salió de la habitación, su corazón golpeaba fuertemente su pecho mientras con todas sus fuerzas avanzaba hasta la salida conteniéndose de llevarse al chico en sus brazos.

SoonYoung escuchaba la puerta de la habitación cerrarse mientras jugaba con sus dedos, lagrimas empezaban a dibujarse en sus mejillas, lagrimas que fueron secadas por su doctor.

Y mientras pasaban los minutos, su pecho subía y bajaba rápidamente mientras jadeaba saboreando las saladas lagrimas que no dejaban de salir, SoonYoung no sabía lo que era odiar a una persona, pero él día que conociera el concepto, descubriría que odiaba a su doctor. 


Nota:

Marisk el Internet en Venezuela está tan arrecho, que la luz va y viene 10 veces en menos de un minuto :D

El lado bueno es que terminé esta fic en Word, la mala... es que fueron solo... no voy a decir cuantos caps  7u7

Las correcciones serán al final de la fic, sorry por los errores, bye bye :3 

Samgus

Especial [SeokSoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora