Capítulo 18: "Estoy de paso"

789 70 199
                                    

Viernes en la noche - En el departamento

- ¡JIHYO! ¡SANA! ¡LLEGUÉ! -Nayeon llegaba al departamento con varias bolsas en su mano y con una sorpresa para sus amigas- ¡Tengo algo para mostrarles! -cantó mientras entraba a su propia habitación a dejar las bolsas.

- ¿Qué quieres Bunny? Y deja de gritar ¿quieres? Al menos que estés teniendo sexo conmigo o te llames Park Mija, no tienes porqué hacerlo -le preguntó sonriendo desde el balcón y largando el humo del cigarrillo que tenía en su mano.

Sana llegaba a la sala corriendo- ¿Dónde está? -Miró a Jihyo que se limitó a encogerse de hombros- ¡Jihyo! -El tono que usó Sana no era nada bueno- ¿Estás fumando de nuevo? Es el cuarto que te veo agarrar en la tarde -la retó.

- ¿Otra vez fumando Jisoo? ¿Cuántos llevas en el día ya? En la oficina te acabaste un paquete entero -Nayeon se unía a sus amigas en la sala y de paso dejaba a la bailarina y a su socia con las bocas abiertas- ¿Qué pasa? ¿No les gusta? -la empresaria se frenó delante de ellas.

- Te... te... te... ¡OH DIOS! -Sana se abalanzó sobre su amiga para felicitarla- Te combina perfecto con tu mirada de fuego, te van a tener más miedo que antes -agregó dejando a Nayeon pensando si eso era bueno o malo.

Jihyo sonrió vorazmente- ¿Te teñiste los de abajo también? Porque ¿Sabes a quién más le va a gusta este cambio? Al rarón... va a estar a mil con el nuevo pelo -dijo sacando su sonrisa maligna. Nayeon hizo silencio ante lo dicho por la pelinegra, no quería mencionar la verdadera razón de la elección del color de su pelo.

- Por supuesto que le va a gustar, el otro día Moguri estaba como loca con Christina Hendricks cuándo la hicimos ver Mad Men con nosotras, hasta que Nayeon se enojó con ella, porque no les estaba prestando atención y apagó el televisor -El colorado del pelo combinó a la perfección con su rostro cuando tuvo que esquivar la mirada de Jihyo. Sana había revelado su secreto.

- ¿Así que fue por eso... ?

- Hablando de Moguri... ¿Dónde está? -¡Ding! ¡Ding! Campana salvadora, la bailarina sacaba a Nayeon de un gran aprieto- Por la hora que es, ya debería estar aquí -comentó la japonesa- ¿Trabaja esta noche también? -Al parecer la castaña llevaba varios días encerrada en el estudio cubriendo los trabajos que tuvo que adelantar por la visita de Jennie y Jisoo.

Nayeon miró el reloj y frunció el ceño haciendo una nota mental automática que le recordara hablar con Momo de sus horarios agotadores de trabajo- Ya debe estar por llegar -dijo.

- Entonces deberíamos poner en funcionamiento el último día de tortura -con aviso previo la pelinegra se desvistió en medio de la sala y se quedó sólo con una diminuta bombacha blanca. Topless on.

- ¿El último día? -Sana entristecía mientras se desvestía- ¿Por qué? A mí me gusta andar desnuda por la casa -dijo mientras se sacaba las últimas prendas que le quedaban. El papel de la bailarina era atormentar a Momo como Dios la trajo al mundo.

La actual pelirroja hacia lo mismo que sus amigas, pero un poco más tímida elegía quedarse en ropa interior- No podemos andar así con las niñas en la casa Sana -aclaró mostrando su escultural cuerpo que ahora sólo vestía un conjunto de ropa interior negro con letras violetas de la marca- Además, extraño a Momo -confesó- Entre que trabaja todo el día, y el tiempo que la vemos se la pasa en el baño, no puedo cruzar ni dos palabras con ella. Aún no he podido ni hablar con ella sobre la Hermana Yun y Jein -al parecer Nayeon había puesto al tanto a sus amigas de lo que sucedió aquel día en la oficina.

- Dios, es que la cara de la rari vale la pena totalmente -La pelinegra prendía otro cigarrillo y sin pudor alguno se iba a la terraza mostrando sus pechos- La cara y la carpa -agregó- Que esta semana hemos tenido el Cirque du Soleil en vivo y en directo -Puso en funcionamiento sus conocimientos de francés.

Maybe I'm Not For You | ADAPTACIÓN | NamoWhere stories live. Discover now