Innocent or "Bitch" CANCELADA [Bnha-yaoi]-ShigaDeku/DabiDeku-

x Capítulo VI x

Capítulo seis.

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Cuando el crepúsculo llegó, fue la hora de ir a la guarida de su Sensei. Deku seguía a Tomura en silencio junto a Spinner, ninguno de los tres quería hablar.

El peli verde llevaba ropa deportiva que robó de una tienda, estaba emocionado por conocer a Muscular, sentía que ya había escuchado ese nombre antes.

Al llegar, entró y fue directamente donde su Sensei se encontraba.

-¡Sensei! Ya llegué-llama divertido, el hombre lo mira enseguida.

-Deku, mi chico. Acércate -pide a lo que el menor obedece rápidamente, acercándose al mayor.

-¿Ya llegó Muscular? -pregunta mientras el hombre frente a el pasaba los dedos de su mano por la rebelde cabellera de Deku.

-Si, y te está esperando. ¿Tu quirk ya se manifestó? -cuestiona mirando el rostro del oji verde, quien asiente, mostrando la mano con la marca. -Perfecto, Tomura te mostrará donde entrenarás -.

-Esta bien. Spinner-san, quedese aquí -le ordena al reptil, el cual asiente pero luego se da cuenta en donde se va a quedar.

-¡E-Espera! ¡¿C-con él?! -grita alterado, pero Deku ya no estaba como para escucharle.

Ahora debía quedarse con ese hombre que le daba escalofríos por todo el cuerpo cada vez que cruzaban miradas.

Esa sería una noche muy larga.

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El pecoso seguía siendo guiado por Shigaraki entre los pasillos de ese lugar, parte de el era las estaciones de trenes subterráneos que parecían abandonadas. Estaba lleno de villanos intimidantes, grandes o pequeños, todos daban miedo por igual.

La mayoría con quirks que les cambiaban el aspecto físico, haciéndoles ver más atemorizantes. Aunque para Deku, todo era impresionante.

Los hombres parecían bestias apenas notaron que quien estaba detrás de Tomura era un chico joven, los coqueteos y gritos llenos de sucios piropos no se hicieron esperar.

Uno de los hombres les obstaculizó el paso.

-Hey, Tomura. Ya era hora que nos trajeras una lindura para jugar -dice el hombre mirando directamente a Deku, quien ni se inmutó.

-No tenemos tiempo, apartate -dijo el de pelo celeste molesto, tomando del brazo al peli verde para seguido empezar a rodear al hombre.

Cuando el de orbes verdes pasó al lado de aquel repulsivo villano, este aprovechó para darle una nalgada al menor, quien se estremeció por el contacto. El hombre se reía, mientras Tomura estaba debatiéndose mentalmente si debia usar su quirk para desintegrar a ese tipo.

Deku se le adelantó, dándose vuelta y soltándose del agarre de Shigaraki, después se acercó al hombre que había osado tocarle esa parte tan privada.

-Oye tú, señor - llama sonriendo, a lo que el grupo de hombres lo miraron.

-Oh vaya, ¿decidiste venir a divertirte conmigo? Ya era h-- -antes de que pudiese tocarle un sólo pelo, Deku apretó con fuerza la muñeca contraria, un crujido se escuchó dejando helados a los presentes.

De un tirón, el peli verde lo acercó a el para seguido soltar una patada en la entrepierna contraria, el hombre cayó al suelo agarrándose sus partes.

Antes de que los demás villanos pudiesen hacer algo, usando su quirk, Deku consiguió hacerlos caer al suelo. Aún no era fuerte pero fue suficiente para hacerlos caer.

-¡¿Qué demonios te pasa, niño--?! -gritó un hombre en el suelo, pero el de orbes verdes lo interrumpió.

-Escuchenme, basuras. Mi nombre es Deku, y no soy un juguete nuevo. El que se atreva a tocarme de nuevo, se las verá con Sensei y eso si que será una tortura más horrible que huesos rotos- sentenció el chico.

Tomura reía extasiado por la actitud de Deku, le encantaba ese chico, sentía que lo necesitaba para el y sólo para el.

Siguieron su camino, mientras los villanos anotaban en su cabeza no molestar de nuevo a ese chico.

(...)

Por fin llegaron donde Muscular.

Deku se sentía realizado por lo que había hecho anteriormente, podía sentir su quirk correr por su sangre hasta la quemadura de su mano derecha.

Una sonrisa de diversión estaba en su rostro, sentía que podía hacer cualquier cosa que se proponiese.

Algo que los héroes jamás pudieron darle, mientras que los villanos le dieron un lugar y una razón para vivir.

Shigaraki se fue dejándolo con su rubio profesor, quien estaba relajado tomando té, al ver a Deku se levantó, le pasaba como cuatro cabezas al peli verde.

-¿Tú eres el que Tomura me dijo que vendría?-pregunta el tipo.

-Sip, ese soy yo. Deku, ese es mi nombre. Mucho gusto señor-se presenta el chico.

-Mm... quítate la camisa -ordena, a lo que el menor se ríe divertido alzando una ceja.

-¿Perdón? Creo que primero se pide una cita, pero no veo problema si quieres hacerlo así -dice y le guiña un ojo quitándose la camisa.

-No pienses cochinadas, sólo quiero ver tu torso...-responde el mayor mirando dicho lugar. -El entrenamiento empieza ahora, ¿Alguna objeción? -

-¡No, señor! -.

-Entonces, empecemos-.

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