Capítulo 4

8 3 0
                                    

La campana suena anunciado el final de las clases, por fin puedo regresar a casa tranquilamente, aunque al cruzar la puerta me encuentro con Michael que estaba con una chica, me retiro sigilosamente hasta llegar a la salida. Ya que el chofer me está esperando. Subo al auto y el chofer arranca.

Para ser el primer día de clases no fue nada mal, creo que todo estaba en mi mente así que por ahora dejaré de pensar en eso.

Son las 6 de la tarde, mi madre no está en casa según ella fue a comprar telas para su siguiente colección.

Estaba sentado en el salón mirando la televisión.

Después de la comida me voy directo a mi habitación, tengo que terminar de redecorar y además una nueva temporada de mi seria favorita me espera, por suerte no hay tarea que hacer así que puedo disfrutar del día.

Termino los últimos detalles y listo, mi habitación está como nueva, acto seguido tomo mi ordenador y me recuesto sobre la cama, pero entonces no sé por qué desvío la mirada hacia la ventana y me encuentro a Michael desde la suya. Frunzo el ceño al ver que está mirando hacia acá. Saludo con la mano y el hace lo mismo, toma lo que creo que un cuaderno, escribe algo y lo muestra.

¿Puedes venir un momento?

Sonrío y también busco un cuaderno ¿qué será tan importante para asistir a casa de Michael?

¿Qué sucede?

Hace una seña con su mano para que me aproxime. Lo pienso por un segundo, quizá solo está aburrido y necesita compañía. La serie puede esperar.

Salgo de casa un poco confundido, no quiero pensar otra vez negativamente así que solo me dedico a pensar que todo va a salir bien, es una simple invitación. Subo las escaleras del porche y toco el timbre, unos segundos después la puerta frente a mí se abre, esperaba encontrarme con Michael pero no es así, es un chico.

-¿Si?- pregunta confundido.

-Ah, Busco a Michael.

-¿Quién lo busca?

-Soy Nicholas, el vecino, vivo al lado- señala la casa, él me observa confundido.

-Claro, Pasa, está en su habitación.

Entro lentamente y cierro la puerta poco a poco, hay un pequeño problema, no sé muy bien donde se encuentra la habitación de Michael en esta casa, pero me alivia ver que él mismo baja las escalera.

-Nicholas por aquí.

Nuevamente sube muy rápido e intento seguir su ritmo, pero es bastante rápido, me doy cuenta que tengo que hacer más ejercicio.

-Sígueme, vas a entrar al " Michael Wortd"

Caminamos hasta su habitación y en la puerta hay un letrero que dice "Zona de peligro" tiene buen gusto por la decoración. Entonces abre la puerta y me quedo pasmado, mi mandíbula cae hasta el suelo por el simple hecho de que tiene una pantalla enorme, la consola de videojuegos más nuevo del mercado, un mueble lleno de libros.

-Wao- digo después de observar cada detalle de su habitación.

-¿Te gusta?

-Creo que tiene la habitación que todo chico quiere tener.

Su guitarra se encuentra en el pedestal, tiene otras dos junto a una bacteria instrumental, de verdad no puedo creer que mis ojos no hayan visto todo esto desde la ventana.

Su guitarra se encuentra en el pedestal, tiene otras dos junto a una bacteria instrumental, de verdad no puedo creer que mis ojos no hayan visto todo esto desde la ventana.

-¿Me fueras esperando para que te vinieras conmigo?

-Bueno, te vi algo ocupado. Además el chofer de mi madre me fue a buscar.

-¿Ocupado?

-Sí, con una chica.

-Oh, bueno, me hubieras salvado entonces- dice algo seco.

-No Te entiendo.

-¿Puedo decirte un secreto?

Asiento, no creo que hasta al quien especial para charlar sobre el secreto de Michael, aunque no entiendo por qué me tiene confianza si no me conoce del todo.

-Ya no es lo mismo, creo que he dejado de sentir algo por ella.

-Eso fue lo que vi.

-Bueno, dime por favor que te gustan los videojuegos.

Era lo que quería escuchar desde que llegué, con esa pantalla de alto definición seguramente me sentiré en el cielo.

-¿Es una broma? Dime que tienes Final Fantasy.

Michael toma el juego de su librero y me lo muestra, no puedo creer que tiene el más reciente que ha salido.

Un Nuevo ComienzoOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz