Un Nuevo Comienzo

Capítulo 7

Nicholas estaba en la cama de la enfermería mientras yo le observaba desde la silla. No dejaba de revolverse entre las sabanas intentando encontrar una posición que le resultara

Después de cinco minutos moviéndose y destapándose, acabó tirando la manta a sus pies. Al fin se había quedado quieto. Había optado por ponerse de lado, en mi dirección, apoyando unos de sus brazos bajo su cara. Su pelo estaba revuelto y le caían mechones castaños sobre los ojos, que permanecían aún cerrados.

Tenía la camiseta ligeramente levantada dejando entrever una parte de su estómago.

Me quedé observándole un buen rato, hasta que el pequeño empezó a despertarse.

Abrió los ojos lentamente y se me quedó mirando un tiempo, antes de incorporarse en la cama sin decir nada.

Nicholas estaba sentado sobre el colchón y seguía observando con curiosidad la situación en la que se encontraba, seguramente confundido.

Cuando iba a hablar para explicarle lo sucedido él se me acercó demasiado, haciendo que nuestras miradas sr quedaran fijas durante un periodo de tiempo demasiado largo e incluso pudiera sentirle respirar

Mi respiración se había vuelto agitada de repente, le miraba a los ojos sin entender pero, sin embargo, no me aparte, ni le aparte a él.

Se me estaba Acercando poco a poco....

-Michael...- murmuró con una voz ronca y en un susurro. Después de aquello acortó la poca distancia que quedaba entre nosotros.

**** Narra Nicholas ***

-Michael, Michael...- le decía mientras le movía el brazo. Pero él seguía durmiendo plácidamente sobre la camilla.- ¡Michael!- le grite al final, al ver que no se levantaba

El pegó un saltito en su sitio y me miro confundido.

-¿Qué...?preguntó con voz somnolienta mirando a su alrededor.

-¿Que ha pasado?- le pregunté. No era consciente de nada, sólo recordaba haber ido hacia la Cafetería y haberme levantado aquí.

-¿Que ha pasado?- le pregunté. No era consciente de nada, sólo recordaba haber ido hacia la Cafetería y haberme levantado aquí.

Él pareció volver en sí tras un rato. Se frotó los ojos con las manos y se incorporó en la silla.

-Te encontré desmayado contra las taquillas.- respondió volviendo a usar su tono habitual.- y te traje a la enfermería.

-Oh.- fue lo único que respondí yo.- Gracias...le dije en un susurro casi inaudible, me fastidiaba que siempre acabara ayudándome.

-¿Estás bien?- me atreví a preguntarle.

-¿Eh? Sí, yo no soy el que necesito una niñera.- contesto sonriendo de lado.

-¡Yo no necesito una niñera!- le conteste molesto ¿Tenía que comportarse así siempre?

-¿En serio? Yo diría que sí.

Yo resoplé y me levante de un salto de la camilla para irme, pero en ese momento, me mareé y caí sobre Michael.

De pronto me puse tenso y me levante de nuevo. Él me miraba sonriendo burlonamente.

-Sabes, si me querías tocar, no era necesario fingir caerte...- continuó él.

Yo sentí mis mejillas arde.

-Idiota, ¿Por qué iba yo a querer tocarte?

Él se río.

-Quien sabe...contestó.- por cierto, la enfermera dijo que tenías que comer, o te vas a volver anémico.

Yo rodé los ojos.- Eso es cosa mía, gracias.- le dije y me dirigí a la salida.

*** Narra Michael ***

Lo vi salir por la puerta y me recosté sobre la silla.

¿Por qué demonios había soñado eso?

Me pasé las manos por la cara un par de veces frustrado, ya pensaría en eso después, al final y el cabo, tan solo había sido un estúpido sueño.