Un año más

SEPTIEMBRE: CAUGHT UP IN CIRCLES

Los últimos días de agosto y los primeros de septiembre son una absoluta locura.

Visitan decenas de pisos y casas en Londres para encontrar una que realmente les guste a todos y tenga un buen colegio cerca.

Su idea inicial es alquilar un piso y buscar más adelante algo definitivo, pero su agente inmobiliario les habla de una casa, al sur de Hyde Park, a cuyos propietarios les urge vender.

Es una casa no excesivamente grande, con un pedazo de tierra que la agencia llama pomposamente jardín y Luis considera más acertado definir como una maceta.

El precio los inmuebles en Londres hace que, a pesar de sus ahorros, la venta del piso de Aitana y una considerable ayuda por parte de Cosme, en la primera semana de septiembre firmen tanto la compra de su primera casa como familia, como una hipoteca que probablemente acabe pagando Ana después de su jubilación.

Aitana se centrar en acondicionar esa casa mientras Luis y Ana guardan en cajas sus vidas de los últimos seis años y se despiden de Bibury.

Entiende que es algo que les pertenece solamente a ellos y les da su espacio.

Apelan a dios y al diablo para que Ana pueda entrar en el colegio del que se enamoran nada verlo. Un pequeño centro con un programa dedicado a las artes del que todo el mundo habla maravillas.

Y por fin llega el primer día de clase.

Luis se esconde en el ático para fumar un pitillo, Aitana se cambia quince veces de ropa y Ana decide que quizá sea mejor opción la educación a distancia.

Pero a la hora de salir de casa, la tropa Cepeda Ocaña muestra un frente común y encaran el escaso kilómetro que separa su nueva casa de su nuevo colegio, juntos. De la mano.

Y arranca una nueva vida.

Hay algo extremadamente liberador en caminar por la calle sin que nadie conozca tu vida al detalle, sea porque se lo han contado las revistas del corazón o el carnicero del pueblo.

Aitana descubre que un septiembre con niños implica una gran cantidad de compras y piensa que nunca le agradeció lo suficiente a su madre las caminatas por Barcelona buscando una marca exacta de pegamento que su profesora de segundo de primaria insistía en que era esencial para su educación.

También descubre que relajarse es peligroso, porque cuando empieza a pensar que lo tiene todo bajo control, Manuel Martos les convoca a una reunión para el lanzamiento del disco, e insiste en que, esta vez, es mejor que la reunión tenga lugar en Madrid, ya que la gente de marketing de Universal debe estar presente para hablar de la promoción.

Sus músculos empiezan a tensarse en el preciso instante en que deciden viajar por separado para no atraer a las hienas.

Aunque las cosas se han calmado mucho desde Enero, saben que hay fotógrafos haciendo guardia en el aeropuerto y que no ha pasado suficiente tiempo para que una foto de ellos juntos haya perdido valor.

Así que viajan en vuelos separados por apenas unas horas y Aitana piensa que el estrés que le produce volar sola no está en absoluto equilibrado con la tranquilidad de saber que nos les acosará la prensa.

Enciende el móvil nada más bajar del avión y comprueba que faltan varias horas para la reunión en la discográfica.

No es la única razón por la que está en Madrid. La venta de su piso fue más rápida de lo que habían previsto y tiene que vaciarlo. Podría encargarle a alguien que lo haga claro, pero no quiere a nadie rebuscando entre sus efectos personales.

Solo faltaría que apareciese su ropa interior en Ebay

Así que el taxi la lleva al centro de Madrid.