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Jimin amaba a su cachorro con todo su ser, de verdad lo hacía, pero:— Aah! Cariño puedes salir de mi cuerpo lo más pronto posible?— Se quejó por centésima vez durante su octavo mes de embarazo.

— Me hace sentir afortunado el no ser el receptor de esas palabras. Sería verdaderamente decepcionante.— Yoongi bromeó, acercándose desde su espalda y alcanzando la caja de cereal que el menor trataba de tomar pero su vientre limitándole no le permitía.— Sólo queda un mes, cariño. Y tendrás a nuestro cachorro entre tus brazos.—

Jimin suspiró recostándose contra el pecho de su pareja.— Lo sé. Fuente se rompe, contracciones que me harán querer matarte, sentir que el niño me parte en dos al dar a luz, y cansancio por los siguientes cuarenta días junto a un niño que nos roba el sueño -literalmente- por las noches.— Jimin sonrió al sentir a su alfa tensarse a su espalda.

— Suena muy feo si lo pones de esa manera.— Dijo entonces.

El omega río, sirviendo leche y cereal en un tazón.— Estoy bromeando, Yoonie. No quita la realidad del asunto, pero es natural, es parte del sacrificio. Algo tan maravilloso y positivo como tener el poder de traer algo nuevo al mundo, crearlo, cargarlo y criarlo no puede, simplemente, no venir con complicaciones. Vale la pena cuando serás tu quién se hará cargo en las noches, cierto amor?—

Yoongi gruñó mientras Jimin reía.

Luego del desayuno ambos se dirigieron juntos a la editorial. A pesar de poder supervisar a su equipo de editores desde casa, por medio de correos electrónicos, ciertamente Jimin también debía hacer acto de presencia cada cierto tiempo.

Antes del embarazo, la pareja iría juntos al trabajo, pero desde los cuatro meses de gestación, el omega se había hecho a cargo desde casa. Al inicio presentándose una vez por semana, más tarde, cada quince días.

A Jimin le gustaba que le miraran y felicitaran por su embarazo, estaba orgulloso de cargar con su cachorro.

Yoongi le tendió la mano desde fuera, ayudándole a salir del auto. — Tienes reunión con Seokjin, cierto?— Preguntó casualmente sujetándole por la cintura.

Jimin asintió.— Debo entregarle los reportes de mi equipo. Pero primero debo chequear en todos.—

Yoongi, a pesar de ser editor, no formaba parte del equipo a cargo de Jimin. Su jefe, Seokjin lo había organizado de esa manera para así tener un ambiente "justo y sin tratos preferenciales".

Ambos se despidieron al salir del ascensor, yendo en rumbos diferentes.

Una vez en su oficina, que se encontraba con un gran vidrio frente a otros seis cubículos, este siendo el espacio del equipo número tres de editores.

Su móvil vibró en su bolsa trasera.

Descolgó.— Hola.—

— Creo que vas a querer subir a mi oficina para esto, Jimin.—

...

Nerviosamente caminó hacia la oficina de los directores, dueños y mejores migos, Seokjin y Namjoon. No recordaba nada malo de lo que lo pidieran acusar pero debido a la manera en que fue llamado por Namjoon no pudo evitar sentirse ansioso.

Una vez frente a la puerta, tocó dos veces antes de abrir la puerta.

Muchos gritos se escucharon y él chilló.

— ¡Felicidades!— Las voces gritaron a la vez.

Jimin cubrió su cara con sus manos. Una suave mano cubrió su hombro.— Es hora de celebrar a un bebé!— La grave voz de Taehyung vibró a través de sí.

Quitó lentamente sus manos de su cara, revelando la amplia oficina decorada de colores pasteles y diferentes tonos de verde, todos los presentes con pequeñas coronas de flores sobre sus cabezas y grandes sonrisas en sus rostros.

Seokjin sonreía a través del lugar con su pareja a su lado, claramente orgulloso de su obra.

Su esposo le miraba cariñosamente desde su lugar al lado de una caja decorada con pequeños adornos de hojas de árboles de diferentes tonos, dentro de esta se asomaban varias envolturas de regalo.

Detrás suyo estaban Taehyung junto a un Hoseok cargando a bebé Jungkook en su espalda, ambos sonriéndole grandemente.

Su mirada escaneó el lugar lleno de su limitado pero bien apreciado círculo social todos devolviéndole cálidas sonrisas.

Dos pares de ojos llamaron su atención junto a sus contenidas sonrisas.— Mamá?— susurró, dirigiéndose directamente hacia la pareja de mujeres en la esquina.

Casi corrió hacia ellas, la felicidad inundándole.

—Mamá.— Saludó a la omega de ambas con un beso sobre su frente, lagrimas enmarcaban los veteranos ojos de la mujer.

— Madre.— Saludo a la alfa, quien le recibió entre sus brazos con dificultad debido a su abultado vientre.

— Mi cachorro.— Le susurro esta sobre su cabello.

Jimin retrocedió, mirando a ambas y preguntando:— Han venido desde Italia por esto?— Ambas habían recibido trabajo en aquel extranjero país un año después de su consumido compromiso con Yoongi, no lea había visto en persona desde entonces, tan sólo a través de una pantalla.

Su mamá le sonrió, dejando resbalar una pequeña lagrima por su mejilla izquierda.— No por algo, cariño. Por alguien.— Acarició tentativamente el abultado vientre.— Por ti. Mírate estás radiante.—

Jimin río a través de sus propias lagrimas. La felicidad siendo abrumadora. Saltó en su lugar cuando una mano se posó en su espalda baja.

Yoongi estaba allí sonriéndole tan grande que hacía derretir en amor todo su interior.

— Este alfa aquí, tiene explicaciones que dar.— Su madre intervino.

Yoongi dió una sonrisa torcida algo incómoda, Jimin río.— Madre, estamos casados. Estoy marcado.—

Ella bufó.— No digas tonterías, Jimin, aún eres un bebé.— Lagrimas se deslizaron de mañera traicionera por las mejillas del omega, abrazando nuevamente a su madre y aspirando el fuerte y familiar aroma de la alfa.

Una voz logró cortar el momento.— Vamos! No es hora de llorar!— Jin interrumpió.— No me gusta verlos llorar, me hace querer llorar también. Jimin has visto la decoración? Es un bosque!—

La voz de Hoseok se unió.— Es como el bosque en la bella durmiente. Ya sabes, por la temática de princesa por ser una niña y eso.—

Taehyung río.— Yoongi esconde todas las agujas! No hemos invitado a Maléfica pero ya sabes ese fetiche que tiene por maldiciones con agujas.— Todos alrededor rieron.

Jimin le sonrió a su amigo, abrazándole también.— Vamos, Jimin, es el baby shower, no me hagas llorar.—

Se separó, dirigiéndose a todos en la habitación al decir:— Gracias a todos, me hacen la vida cada vez mejor, cada uno de ustedes tiene un lugar muy especial en nuestras vidas.— Se acercó al costado de Yoongi, este se inclinó y besó su sien.— Y lo tendrán también en la vida de nuestra pequeña cachorra.—

Culparía a las hormonas por su sentimentalismo, pero dentro suyo el agradecimiento por el cariño de todos, por recibir de tan ansiosa manera a su bebé, iba a ser una niña muy amada y eso era lo mejor que le podría heredar a su hija, el amor.

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Avísenme de errores, no está editado y está escrito desde mi móvil.

Sobredosis de azúcar para todas.

Nombres para niña?:

Recta final.
1/3

Veka.xx

Pregnancy Path  ❅Omegaverse❅ YoonMin/윤민Donde viven las historias. Descúbrelo ahora