No un villano [Miraculous Ladybug AU]

Seís

Chat Noir tardó un poco más de lo habitual para partir aquella noche, realmente no deseaba alejarse de ella, pues era uno de los pocos momentos en los que en realidad se podía sentir plenamente en paz.

Pero aquel sonido que emitía su anillo fue lo que logró que se separara de ella, observándola fijamente y despidiéndose con un ademan de manos.

Dejando a Marinette completamente sola en su azotea, con el corazón levemente acelerado.

Quizás era por qué a pesar de todo, tenía un poco de miedo, o eso quería creer.

Tikki salió de la pequeña trampita, sentándose sobre las piernas de su portadora mientras observaba el camino por el cual Chat Noir habia partido, notando como se encontraba un pequeño rastro de energía de la destrucción, prueba de que las cosas no se encontraban para nada bien.

― Tikki, Chat Noir necesita mi ayuda y la tuya ― Murmuró con suavidad, siguiendo con la mirada hacia donde Tikki mantenía la suya ― Lo hace por su madre, desea recuperarla ― Explico lo que habia entendido de las pocas palabras del chico.

La pequeña criatura se giró, levitando para quedar frente a ella con una expresión que no supo cómo distinguir pues podía encontrar algo de tristeza, pero a la vez un poco de decepción.

― Lo escuché, pero aunque tenga el Miraculous de la creación no podría llevar acabo su cometido ― Intentó darse a entender, observando como Marinette alzaba una ceja sin comprender mucho ― Chat Noir seguramente piensa que el poder absoluto puede hacer realidad cualquier cosa, pero eso es un error, me sorprende que Plagg no lo corrigiera ― Continuo, suspirando ― Los Miraculous solo sirven para proteger el balance del mundo, y juntos son la fuerza más poderosa, pero eso no quiere decir que una sola persona deba poseer ambos o que esto podría lograr cosas inimaginables ― Finalizó, sintiéndose completamente mal por qué realmente no habia ninguna opción.

Era común que los humanos confundieran aquello, y quizás él ahora portador de la destrucción habia encontrado el Miraculous junto con el libro sagrado, aquellos que hacía más de un siglo había sido perdido durante una gran batalla.

Y ahora, aquel deseo comenzaba a corromper al portador, pues sus acciones demostraban como la ferocidad salía a flote sin pensar en las consecuencias.

― Entonces ¿No existe la manera? ― Marinette bajo su mirada, pues sabiendo la razón de las acciones del auto nombrado villano, estaba dispuesta a ayudarle a cumplir su objetivo con la condición de que dejara toda la destrucción de lado, que dejara de hacerle daño a la ciudad y de paso, a él mismo.

Tikki negó con su cabeza, acariciando la mejilla de su portadora.

― No, estoy segura de que ha confundido las cosas ― Comentó.

― Sé que él está confundido, y saber que existe una noble razón ante sus acciones hace que también me confunda yo, pues no sé si sentir miedo o admiración ante él, y eso me da pánico, pues ― Llevó las manos hasta su cuello que se encontraba completamente cubierto por su suéter, sintiendo una punzada de dolor ― Aquello fue aterrador ― Atinó a decir.

― Marinette, sé que quieres ayudarlo y también sé que te decepciona no poder hacerlo como él planea ― Comenzó a explicar, logrando que su portadora sintiera una chispa de esperanza por como comenzaban a sonar sus palabras ― Pero aun así debemos hacerlo, él está siendo consumido por la destrucción al usar de manera desmedida el poder que se le otorgo, él mismo causa un desbalance y es la razón por la que actuó como un animal ante ti aquella noche, debes recobrar el equilibrio ―.

Y aunque no debía pasar así, Marinette sintió un gran alivio por aquellas palabras, pues de alguna manera Tikki le confirmaba que las acciones de Chat Noir habían sido influenciadas por algo más y no habían sido realizadas bajo su plena conciencia.