(58)

15 0 0
                                    

Nadie nace sabiendo como ser mamá, y nadie nace sabiendo como ser papa.

¿Porqué no me lo dijiste?—susurró con la mirada perdida en su estómago.

Ella seguía llorando. Thiana intentaba calmarla pero era casí imposible hacerla entrar en razón.

Tu no estás preparado para ser padre—fué su excusa y Rey intentó calmarse.

—¿Y acaso tu sí?—sonó tan incrédulo que Annie quedó perpleja.

—Soy el principal responsable de todo esto—respiró para calmarse—y aún así ¿no tuviste la intención de decirme antes de que se te inflara la panza?—está vez Annie se ofendio completamente y rodó los ojos.

Un silencio hizo presencia en el ambiente, Thiana intentó hablar pero Rey con tan solo verla le pidió que se callará.

No pretendo pelear contigo—apretó la mandibula y Annie lo miró con los ojos aguados.

—Estoy asustado, emocionado y a la vez horrorizado por la idea de ser padre—admitió sin importarle lo muy débil que sonará.

—Pero a la vez estoy contento de que seas tu quién lleve a nuestro bebe justo aquí—acercó sus dedos hasta la mediana panza de Annie y esta sonrió sin mostrar los dientes.

—Annie Jones—insistió en preguntar una vez más—¿Te gustaría permanecer el resto de tu vida—levantó una de sus cejas y luego sonrió—De nuestras vidas—corrigio esta vez señalando al bebe aún no nacido—¿juntos?—sonrió y Annie río ante aquella mueca.

Ella asintió repetidas veces y sintió toda la alegría del mundo. Con nerviosismo colocó el anillo de oro con detalles de plata en el dedo indicado y luego con delicadeza la beso sin apuró.

Un chillido de alegría por parte de Thiana los hizo alejarse.

Rey rodó los ojos y luego con delicadeza coloco la cadena en el cuello de Annie. A ella le sorprendió que aun recordará ese detalle que le había gustado hace meses atras.

Ahora la pregunta que me tiene algo desesperado—exclamó y Annie la esperó atentamente.

—¿Será niña o niño?—cuestionó.

—¡Ian y Dominic!—llamó la atención de los susodichos para que matarán su curiosidad.

—Sera...—se mordió el labio derecho y luego sonrió—será una nena—dijo al fin y Dominic empezó a dar saltos de alegria.

Le dio ternura ver aquella escena. Rey sonrió de lado y luego tomo su mano.

Es hora de cenar—anunció llamando el apetito de cada integrante de su familia.

—Le agradezco enormemente a Ian por ayudarme con tus gustos—susurro y Annie sonrió.

Se sentaron en la arena,  rodeando una fogata que irradiaba un fuego brillante, este causaba satisfacción en vez de miedo.

Ahora quiero escuchar propuestas para el nombre de mi pequeña—exclamó y a Thiana casi se le devuelve la comida por la cantida de nombres que tenia en mente.

—Dayana—propuso Dominic y Thiana negó.

—Lola—está vez hablo Ian pero Annie fué la que negó.

—Melody—habló Rey y todos sonrieron—Será Melody—repuso Annie como una afirmación.

Después de cenar se encaminaron a apartamento y esperaron a que les bajará la comida para acostarse.

Rey entro en un estado de pensamientos... ¿cómo haría para ser un buen padre?

Por nada del mundo quería que su hija se enterará de quién era, de todo lo que hizo alguna vez, de cuantas personas asesino.

Rey—susurró la voz apagada de Annie al estar cayéndose del sueño.

Sonrió al verla, era preciosa la mujer que sería su esposa.

~

—¿Entonces se lo tomó muy bien?—cuestionó el detective.

—Yo supongo que si—se encogió de hombros la anciana.

—¿Le gustaría verlo de nuevo?—esa pregunta dejo a la anciana boquiabierta, sin embargo sonrio sin decir una sola palabra.

—Le repito—insitió—¿le gustaría verlo de nuevo?—

Me gustaría, me encantaría—admitió—más me temo que es imposible—reconoció y el detective frunció el ceño.

—¿Disculpa?—exclamó con asombro.

—Pues....

~

Meses después...

Faltaba solo un mes para el embarazo de Annie.

Se encontraba frente al espejo con los ojos iluminados, Thiana aparecio detras de ella y le sonrio.

—Estás preciosa—dijo al ver su largo vestido color blanco que se ajustaba a su embarazo.

—Aún no puedo creer que este sucediendo esto—río de alegria y Thiana negó tomando su brazo.

—Ya es hora Annie—le informó y ella asintió.

-

La vi y automáticamente sonreí, se veía tan preciosa con nuestro hijo en su estómago y su vestido blanco.

Los invitados necesarios se levantaron al verla acercarse, no eran muchas personas. Mi familia (Ian Dominic y Thiana quién traia a Annie) estaba raramente Olivia, el ex mejor amigo de Annie, James y una pelirroja extraña. Restándole importancia a ese asunto tomo la mano de Annie con ternura.

—Qué hermosa estás—susurré sonrrojandola.

Después de que el padre dijera las cosas necesarias llegó el momento que tanto esperé.

—¿Aceptas bajo la promesa de amar y respetar a esta hermosa mujer para toda la vida?—

—Aceptó—Sonreí con toda la alegría del mundo.

—Annie, ¿aceptas bajo la promesa de Amar y respetar a este hombre para toda la vida?—

—Acepto—sonrió y sentí el impulso de alzarla, era tanta mi alegria que no dude ni un segundo más en besarla con ternura y tanto amor.

—Mi Esposa—susurre y ella volvio a pegar sus labios a los mios.

Annie Jones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora