Hot Space «Roger Taylor»

Capítulo 11

"¿Por qué no podemos dar al amor
una oportunidad más?"
Under Pressure

Ninguno volvió a saber del otro en veinte días. Roger cumplió con la parte del trato y a los dos días de discutir con Amber, le envió una caja con el material que necesitaba sobre "Cool Cat", "Las Palabras De Amor" y "Under Pressure". La universitaria anotó lo que requería en tiempo record y devolvió el paquete por correo, pues quería olvidar todo lo sucedido con Taylor.

En esos días, las cosas al parecer para Amber se encontraban bien. Salía con sus amistades, asistió a reuniones sobre el medio ambiente o protestas, incluso intentó conseguir un trabajo estable, pero Queen era tan grande, que poco a poco la publicidad del grupo (en especial la del baterista), hacía que aún sus emociones no cesaran del todo.
Por parte de Roger, asistía a las típicas fiestas de siempre, solo que no se divertía en ellas, se alejó de las chicas, daba entrevistas con la banda, practicaba con ellos para la segunda parte de la gira, pero aún así por momentos notaba que la culpa aún seguía en él.

El dieciséis de julio de 1982 caía viernes y en ese día mas o menos soleado, algunos jóvenes caminaban hacia sus clases habituales en la universidad, mientras que los del último periodo, bien presentables, se dirigían con grandes maletines y papeles, los cuales usarían para su exposición final.
Amber tratando de no maldecir por el dolor que los tacones le causaban, observaba como el pequeño auditorio se llenaba. Frente a ella se ubicaban dos hombres y una mujer, quienes serían los que decidirán si aprobarían su tesis o no. La muchacha con sus materiales listos, intentó disimuladamente acomodarse la corta falda que traía, pues no era de su agrado.

Al ver que aparentemente la sala estaba llena de algunos profesores y alumnos principiantes, decidió repartir una copia de la tesis a los tres profesores que sentados estaban esperando el inicio de la exposición. Sin embargo, los murmullos de otros y los suspiros de otras captaron su atención.
Dejó lo que estaba haciendo y giró para ver la puerta. En ella se encontraba el hombre que le había roto el corazón.

—Hola —dijo amablemente y el grito por un cierto grupo de jovencitas se hizo presente.

Para Amber, la incomodidad, el enamoramiento y el enojo hacían una batalla dentro de ella, pero por fuera solo mostraba seguridad de si misma.

—Joven, íbamos a dar iniciada esta exposición —comentó uno de los profesores.

—Si... siento mucho llegar a esta hora —se justificó—. Vengo como testigo, si es que así se le dice, para apoyar a la alumna —señaló a Amber.

Ella rodó los ojos. Si bien se necesitaba a uno de los mencionados en su tesis para la presentación, no era obligatorio. Pues solo valían cinco puntos y se encontraba segura que iba a aprobar con o sin Taylor. Pero en este caso, la suerte no estaba de su lado, o tal vez si.

Roger tomó asiento en la primera fila de las siete butacas disponibles y prestó atención a la muchacha de cabellos castaños, que se encontraban en esta ocasión bien peinados, falda negra corta, blusa blanca, blazer y tacones negros. No parecía ella, parecía una secretaria.

—Puede iniciar señorita Connery —mencionó la profesora.

Aunque Amber se había preparado muy poco para su presentación, al ser fan de Queen y en especial del disco Hot Space, sentía que no necesitaba dar un repaso. Pero por culpa los eventos que ocurrieron hace veinte días, era imposible mantener la concentración.