capitulo. 6

8 4 0
                                    

4 días desde la muerte de Elena, y una semana desde que Kiara desapareció. Mel estaba sumida en un estado de depresión; se negaba a verme o a hablar conmigo, Andrés me ha apoyado en todo este tiempo.

-Solo tiene que darle tiempo amigo, es muy difícil todo lo que está viviendo

-Lo sé Andrés, pero yo quiero estar con ella en todo esto.

Mi amigo intentaba animarme sin éxito. Melanie no se presentó en el instituto.

-Otro día más, esto no puede seguir así, saliendo de clases voy a verla, tendrá que verme aunque no quiera- le comentaba a Andrés cuando mi teléfono sonó interrumpiendome.

-¿Mel?- una respiración agitada se escuchaba al otro lado de la línea- ¿melanie?- silencio- ¡MELANIE! - el grito atrpajo la atención de algunos curiosos.

-Ian- un susurro tenue se pronunció al otro lado.

-Melanie ¿Estás bien amor? - pero no conseguí ninguna respuesta. Mi desesperación  se acrecentaba - mel me estás asustando ¿Ocurre algo?.

La llamada finalizó, aumentando mi nivel de preocupación.

-Esta en peligro. Lo sé.

-Ian tranquilízate, ¿Que te dijo?

-Solo pronució mi nombre en un tono muy bajo, casi un susurro.

Salí del prisa del instituto, llegué a la casa de mi novia. Un golpe, dos, tres; nadie respondía, intenté y al quinto golpe la señora Eloísa salió hecha un manojo de nervios, temblorosa y llorosa.

-Ian-las lágrimas ahogaban su voz.

-Señora Eloísa, ¿Que ocurre? ¿Dónde está mel?.

-Mi niña, mis dos niñas.

-¿Qué pasa? Por favor dígame.

-Mel- los sollozos no me permitían comprender muy bien sus palabras.

-Necesito que se calme- entramos a su casa, me dirigí a la cocina y le traje un vaso de agua. Extendí el vaso. La mujer temblorosa tomó el cristal y bebió su contenido pausadamente.

- Esta mañana que entré a la habitación de mel, -hizo una pausa-  no estaba. Él se la llevó, me quitó a mis dos hijas. Perdí a mis niñas - las lágrimas acudieron de nuevo a sus ojos. Pasé mis brazos alrededor de los hombros de la deshecha mujer. Después de una hora de acompañar a la señora Eloísa; el señor estephan apareció sedando a su esposa. El papá del mel y Kia, me comentó que la policía ya están en búsqueda de sus hijas y que por su parte había puesto a unos investigadores privados para hallar el paradero de ambas, me prometio mantenerme al tanto. No mencioné nada al respecto de la llamada.

Salí de ahí decidido averiguar ¿Dónde estaba mi novia?. Andrés y yo intentabamos atar acabos, recordar detalles cualquier cosa que nos pudiese dar indicios de quién era el homicida.

-¡Estoy harto! No hay nada. -me lance sobre la cama, cerrando los ojos con frustración- maldito que está detrás de todo esto, es muy astuto. No deja rastro.

-Debemos seguir buscando, no hay crímen perfecto, algún error aunque sea mínimo debió cometer.

Intenté recordar cualquier indicio que me pudiera dar con la identidad del asesino.

-Solo dos cuerpos se han hallado. El de  Allison, y el de Elena; algo deben tener en común, piensa...- una idea asaltó mi mente.- debemos ir a la casa de Elena, buscar a los alrededores, revisar todo el perímetro, depronto encontramos alguna pista que los policías pasaron por alto.

Llegamos hasta el barrio de Elena, estaba oscuro, las pocas luces provenientes de las casa vecinas, estaban dispersas debido a la gran distancia que había entre ellas.

-Elena mencionó que había visto a un hombre vestido de negro arrastrando a una chica que al parecer era su vecina; la casa mañana cercana esta a 50 metros aproximadamente. Empecemos por ahí, quizá el asesino dejó caer algo por accidente.

Buscamos entre los arbustos, el suelo, la tarea era complicada gracias a la oscuridad. Divisamos unas luces encendidas en la casa Elena.

-Hay Alguien en la casa de Elena- hablé llamando la atención de mi amigo.

-Desde la muerte de Elena escuché que sus padres se habían ido de viaje, que no soportaban la idea de estar en el mismo lugar donde perdieron a su hija. Creo que hoy regresaban; mi padre me comentó que pretenden vender la casa.- hablo Andrés.

Nos acercamos buscando pistas, de repente un Ruido dentro de la casa llamó mi atención, me asome por la ventana intentando averiguar lo que habia causado el fuerte sonido.

-¡IAN!- el grito de Andrés me hizo voltear en su dirección, un fuerte dolor de cabeza provocó que llevará mi mano hasta ella, al bajarla la sangre cubría mis dedos ocasionado que perdiera el conocimiento

-

Rostros #zelawards2019Where stories live. Discover now