CAPITULO IV. ECOS

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Al siguiente dia, unas marcadas ojeras se veían en la cara de la Neo Reina, no había podido conciliar el sueño, aquellas voces, que pensò eran alucinaciones suyas, una forma de sentirlo cerca, Serena le habìa dado tantas vueltas en su cabeza, lo necesitaba demasiado, pero aun asì todo esto la habían alterado demasiado, se sentía confundida; con pereza se levanto de la cama, su esposo estaba al lado de ella aún dormido y se dispuso a darse un baño.

Al salir de bañarse, se sentó frente al espejo, comenzó a cepillarse su cabello, estaba màs largo de lo normal. -Tendrè que decirle a Venus que me ayude...pensó.

De pronto una imagen transparente se reflejo en el espejo con una sonrisa radiante.-Así te ves hermosa...me encanta el olor de tu cabello, pero siempre me volvió loco tu resplandor...

Serena se levantó y gritò asustada al ver el reflejo en el espejo, volteò de inmediato hacìa atràs, pero no habìa nada.

Su grito hizo que Endymion se levantara de la cama asustado. -¿Què sucede?

Serena quien estaba hiperventilando, se tapó la boca y lentamente dijo. -Perdòn...y-yo...creí haber perdido el anillo de bodas...Mostraba su mano temblando con aquel anillo hermoso con una bella roca en medio.

-Serena...tu siempre tan descuidada...Decía Darien tranquilo pero con un ligero fastidio. -Voy a bañarme...Endymion se levantaba de la cama, se ponía su bata y se dirigía al baño.

-Esta bien...te espero en el comedor...Decìa Serena con el corazón aùn latiendo rápido.

Tan pronto como Darien se metió al baño, Serena se puso un vestido ligero, suspiro tratando de tranquilizarse y bajò al comedor, hasta no saber què pasaba, no deseaba estar sola, la confusiòn la embargaba.

Todas las chicas se encontraban animadamente desayunando.

Serena pasò por donde estaba Rini, y le dio un maternal beso en la coronilla antes de sentarse frente a ella, al lado derecho de la silla principal.

Los sirvientes se acercaron y le ofrecieron fruta y jugo.

-Mama...hoy iré a ver a Hotaru...me dijo que quería ver las estrellas por la noche...hoy hay lluvia de estrellas fugaces, hemos construido un telescopio con ayuda de Haruka...Rini decía esto entusiasmada y con bocados en la boca.

En la mirada de Serena se reflejó el dolor, pero de inmediato cambió de actitud -Pequeña dama...que te he dicho de hablar con la boca llena...Decìa Serena sonriente pero con tono de regaño.

-Perdon mama. Rini sorbía un trago de jugo. -Voy a llevarme a Sailor Vesta, ¿Està bien? Rini esperaba la respuesta de su madre.

-Y las demás chicas? Serena estaba intrigada.

-Yo puedo responder a esa pregunta. Decìa Venus pasando un bocado.- Las demás chicas estarán con nosotras... Venus decía orgullosa.

Serena puso cara de intriga, pero Mercury se adelantó. -Ellas nos propusieron ir de compras...Mercury tenía que evitar que Venus hablara de màs, las chicas habían visto a Serena un poco mal y planeaban sorprenderla con una fiesta, su cumpleaños estaba cerca.

-Està bien, tendré que pasar el día sola. Decía Serena con tristeza en los ojos.

-Pero estarás con papà...Rini decía metiéndose en la boca un pedazo grande de un panecillo.

-¿Quièn estará conmigo? Endymion entraba al comedor.

-Lo que pasa es que iré a casa de Hotaru y me voy a llevar a Sailor vesta, las demás chicas irán de compras...Decìa Rini sonriendo a Endymion.

EL AMOR DE UNA ESTRELLA ES INFINITODonde viven las historias. Descúbrelo ahora